I Refuse... Vegas & Pete (KinnPorsche The Series) Parte I

Capítulo 2

Vegas nacido en la segunda familia como hijo mayor había gustado lo que era ser siempre lo segundo en todo, quizás por eso al ir a la misma universidad, la unica forma de descansar de esa presión fue escoger el programa internacional, así no tuvo que competir tanto con Kinn.

Pero ya era hora de acompañar a los mayores en sus negocios, específicamente a Kinn, como ambos eran los mayores, eran los encargados de acompañarlos a todos los eventos y negocios... y por último, actos de caridad como este viaje...

- ¿Vegas de que te encargaras? – este miro a Kinn con ojos displicentes, en la universidad había estudiado ingeniería en el plan internacional, a Vegas se le daban bien las herramientas, le gustaba el trabajo donde podía mezclar el esfuerzo físico con el mental.

- M... dame las renovaciones, techo y esas cosas... – Kinn le dio una amplia sonrisa, sabia que a su primo era un "manitas".

- Ok... y Macao...- Vegas no era de pedir nada, pero por Macao era capaz de ceder en su aspecto duro.

- Deja que corra libre... no suele salir mucho... además seria más un estorbo que ayuda... – Kinn que sabía de la debilidad de Vegas por su hermano asintió.

- Tankhun dijo que se encargaría de la redecoración... y Kim, bueno veremos si algo se puede sacar de él... – Vegas sonrió de lado, Kim no obedecía a nada ni nadie.

***

Pete se despertaba todos los días a las cinco de la mañana, ayudaba a su abuela a levantar el puesto en el mercado, luego se dedicaba a vender pescado con ella hasta el medio día... en la tarde se dedicaba a llevar algunos turistas a recorrer la isla en su motocicleta, también hacia todo tipo de encargos y trabajos a quien pagara por ellos. Luego volvía al mercado dependiendo de la hora y volvía con su abuela a casa. 

La casa de sus abuelos era humilde pero muy limpia y acogedora... tenia su propio cuarto lleno de sus "tesoros".

- Pequeño Pete...!!! – el grito de su abuela lo hizo entrar rápidamente a la casa, ya eran las seis y era hora de arreglar mercancía para mañana, a Pete jamás le molesto el olor a pescado creció entre ellos, era el mejor buceador de su edad en la isla, en sus días libres solía ir jugar con los chicos y siempre le ganaba a todos, por eso se sentía orgulloso, no le importaba tener una gran musculatura... eso le restaba velocidad y flexibilidad bajo el mar.

- Yāy, ya vine...- la abuela siempre lo esperaba con su comida favorita, arroz con curry picante y cerdo frito dulce... desde la esquina que su estómago venía haciendo ruiditos.

- Quiero que vayas al bar de Long y le lleves esto... además dijo que necesitaba un par de manos más, ya sabes los jóvenes amos trajeron mucha gente con ellos...

- Pero Yāy... aun no he comido nada... – se froto la panza de manera coqueta, sabia que su abuela no podía resistirse a su sonrisa.

- Puse una porción extra para ti pequeño...- La sonrisa de Pete fue aun más amplia, no le gusta pasar por el bar de tío Long, pero los bahts extras no le iban mal, estaba ahorrando para ir a Bangkok cuando cumpliera la mayoría de edad.

- Está bien Yāy... – Pete volvió a tomar el casco de la motocicleta el contenedor con la comida y salió sin pensarlo mucho.

- ¡Pequeño Pete...! hueles a pescado, báñate primero... pero no escucho, ya pensaba en el arroz con curry picante, el cerdo frito dulce y los bahts extras en sus bolsillos, no le importaba mucho ir muy arreglado y tenía una razón.

No le gustaba ir en temporada de turistas porque todos en la isla sabían que en el bar no solo se vendían cócteles y cervezas, cuando era niño no le molestaba trabajar lavando vasos, limpiando mesas y esas cosas. Pero cuando comenzó a crecer los turistas pedían algo mas que su servicio, las mujeres y los hombres por igual se le insinuaban... y no era su culpa, su abuela le enseño a ser amable y además el era de naturaleza extravertida, pero jamás vendería e cuerpo por dinero, sabía que algunos de sus amigos lo hacían, tenían un "romance" de verano y conseguían cosas de marca y de paso tenían sexo.