Two Lirios (Robin Arellano-TBP)

Three

•••

Julio 26, 1977, North Denver.

Narra Robin Arellano:

Desperté porque siento como alguien me sacude levemente, abro mis ojos y me encuentro con los Azules de Lorwin, ella me sonríe levemente y me apunta la ventana, volteó confundido y me asombro al ver qué ya es de mañana, me levanto apurado.

-Demonios, debo irme Lory, en la tarde vendré a jugar -bese su frente, tomé mis zapatillas y me prepare para salir del cuarto. Ella asintió y se despidió con la mano. Salgo del cuarto en sumo silencio, camino en puntitas  y llego hasta la puerta, cuando me estoy por ir una voz me frena.

-Asi te quería atrapar -habla Finn, cierro los ojos con fuerza y me doy vuelta lentamente. El se encontraba apoyado en la pared, de brazos cruzados y mirandome seriamente. -pense que ya te lo había dejado en claro Arellano.

-Nonononono -hable moviendo las manos exageradamente -no es lo que piensas Finn, te lo jur... -una carcajada me freno, Finn se ría enfrente mío.

-Lo-lo siento, es que tu cara fue muy graciosa -se burló un poco -solo estoy bromeando Robin, se que tu y mí hermana son amigos, y yo no tengo problema con eso. -un suspiro salió de mí, era un alivio. Le sonreí y me despedí avisándole que en la tarde vendría otra vez, finalmente volví a mí casa en la cual no había nadie. Mí tío estaba de viaje pero yo debía alimentar a mis perros, luego me fui a bañar y prepare algo de comer. Mí mente estaba en otro mundo, no podía dejar de pensar en la bella niña de ojos azules esa que me tenía tan hipnotizado. No puede ser, ya quiero verla otra vez y eso que estuve con ella hace menos de una hora. Esto podría acabar con mí reputación de chico malo pero enserio estaba empezando a querer a Lorwin.

Narra Lorwin Shaw:

Robin se fue de casa y yo salí afuera a esperar que pasara mí amigo Billy con el periódico del día, estuve esperando alrededor de 15 minutos hasta que escuche la tan característica campanilla de su bici.

-Hola repartidor! -grite cuando paso frente a casa levantando mí mano.

-Hola ojos de cielo! -grito frenando su bici, cuando estuvo bajo su bici corrí hacia el dándole un fuerte abrazo, el me levanto un poco del suelo y dio unas vueltas. -Como estás linda Lory? -me pregunto.

-Muy bien, y tu Billy? -le sonreí.

-Muy bien -me devolvió la sonrisa.

-Tienes lo que te pedí? -pregunte. El sonrió y de su bolsa saco un paquetito, con emoción lo tome y bese su mejilla -Gracias Billy -el río un poco.

-Todo por ti Lory, bueno, debo seguir con mí camino. Nos vemos -beso mí mejilla y volvió a subir a su bici para continuar repartiendo el periódico. Corrí hacia dentro de mí casa, le mostré a Finn el paquete y le señale mí cuarto con los ojos, el entendió y juntos corrimos hacia ahí.

-Es el diario de mamá, lo manda la abuela Rose -le susurré, el me miró con sorpresa y me abrazo fuertemente.

-Estas loca, si papá ve eso, te asesinara. -hablo preocupado.

-Pues no lo verá, no te preocupes. -le sonreí tranquilamente, le dije que se acostara en mí cama mientras yo iba a buscar a Gwenny a su cuarto. -Oye Gwenny, ven.- le sonreí, ella corrió hacia mí y estiró su brazos, yo con un poco de esfuerzo la cargue y fuimos a mí cuarto. La senté en mí cama y nos acostamos los tres allí, Finn en el medio abrazándonos a ambas. Tomé un poco de aire y empecé a leerles. Ellos me escuchaban con suma atención, soltaban risas y algunas lágrimas, notaba su felicidad a kilómetros y eso me hacía feliz a mí. Mamá era un tema delicado para nosotros, luego de su muerte papá se puso un poco sensible a su mención y a veces era un poco violento. Pero no lo culpamos de nada, un hombre lastimado solo ve atreves de su dolor, y alguien que vive mierda, solo tiene mierda que contar. Estábamos todos súper concentrados hasta que escuchamos la voz de papá llamándonos a comer, sin esperar mucho ellos fueron a la cocina mientras yo escondía el diario. No correría ningún riesgo. Llego a la cocina y todos almorzamos en silencio, con suerte hoy tendríamos un día agradable.

Ya habían pasado unas horas, estábamos Finn y yo en la sala viendo una película, Gwen había ido a lo de Susie cómo siempre así que estábamos solo el y yo, escuchamos como tocan la puerta, nos miramos raro y el rápidamente toca su nariz.

-toco nariz, te toca -hablo rápidamente.

-Demonios -maldeci levantandome y yendo hacia la puerta, cuando la abrí me encontré con el moreno de pelo largo ese con el que estaba empezando a llevarme muy bien. -Robin! -chille saltando sobre el y abrazándolo. El río un tanto.

-Hola Lory -me despeinó un poco.

-Pasa, Finn está en la sala -le comenté mientras le abría la puerta para que pase.

-Claro, gracias -comento entrando y yendo hacia allí. Ellos se saludaron y nos sentamos todos en el suelo a ver películas.
Llevábamos un par de horas viendo tele, Finn se había dormido en el suelo y Robin tenía la cabeza recostada en mis piernas mientras yo acariciaba su cabello, derrepente se sienta a mí lado y empieza a sacudir su pelo, yo lo miro raro sin poder evitarlo.

-Lo siento, es que tengo mucho calor -comenta. A mí se me prende el foquito así que decidí atarle el cabello.

-Puedo? -pregunte mostrándole la liga, el asintió así que yo me senté en sus piernas para acomodar su cabello. Le hice una coleta dejando así atado todo su pelo, cuando termine lo mire a los ojos dejando mis manos en sus hombros, el paso sus brazos por mí cintura y me atrajo hacia el.

-Sabes? ahora deseo que me ates el cabello siempre -me susurró al oído y sin poder evitarlo me sonroje. El se rió un poco y paso su mano derecha por mí espalda, yo lo mire y le dije.

-Pues deberás de verme más seguido si quieres que te ate el cabello -bese su frente y me senté a su lado para seguir viendo la película. De reojo logré ver cómo estaba muy sonrojado y una pequeña sonrisa se instaló en mí cara, me gustaba hacerlo sonrojar.

*****
el tercerooo, le estoy agarrando el gustito a la pareja de Lory y Robin❤️