Déjate Amar (Zayn y Tu) [TERMINADA]

Capitulo 4

-Llegamos

Mire por la ventana y me di cuenta que estábamos en un pequeño café muy estilo londinense antiguo.

-Espera un momento -Zayn bajo del auto y luego abrió mi puerta y estiro su mano así mi- ¿Vamos?

Tome un tanto dudosa su mano y salí del auto. Al entrar al café vi que era un lugar muy cálido y acogedor, tomamos un asiento cerca de la ventana.

-Ahora yo te hare preguntas a ti, ¿Puedo?

-Claro que puedes

-¿Por qué vas al hospital?

-Es algo personal, de verdad.

-No seas mala, dime, juro no decirle a nada a nadie.

Tenía una mirada muy dulce, nunca había conocido a algún chico con una mirada como la de él, y esa mirada me daba cierta confianza que nadie me ha dado en muchos años, aunque hoy estuve a punto de matarlo por no hacer nada bien, me daba cuenta que no lo hacía con intención a la hora que me pedía disculpas, y el trayecto corto en el auto, me di cuenta que este chico es feliz, muy feliz, no le importa no hacer lo que le gusta, pero es feliz y es lo que cuenta, me encantaría ser así de feliz, amaría poder un poco de la felicidad que él tiene.

-Emm _______, ¿Estás aquí?

-Disculpa ¿Qué decías?

-Que si no quieres no me dices nada, entiendo.

-No, no es nada, mi hermana está en el hospital y la iré a buscar.

-¿Por qué tus padres no la buscan?

-Mis padres están muertos -Fue complicado decir eso.

-Lo lamento, no tuve que preguntar, de verdad lo lamento.

-Tranquilo Zayn, no es nada, no sabías, nadie te culpa.

-Bueno, cambiemos de tema, ¿Qué quieres tomar? ¿Un café?

-No, estoy cansada de oler café todo el día, preferiría una malteada mejor.

-Cierto, llevamos mucho café hoy -Eleve una ceja- Ok, ok, tu llevaste mucho café hoy, ¿Mejor?

-Mucho mejor -Reí

-Bueno ¿De qué quieres la malteada?

-Chocolate

-Muy bien, ya vengo.

Zayn se levantó de la mesa y fue a la caja, en donde una señora de unos 60 años lo atendió, Zayn espero que le dieran el pedido y luego volvió con 2 malteadas a la mesa.

-Espero que la disfrutes.

La probé y estaba muy rica, un sabor a chocolate único, no tan dulce, pero si en un toque justo, la mejor malteada que me he tomado en la vida.

-Está demasiado rica.

-La verdad sí, siempre vengo a este lugar, hacen las mejores cosas del mundo.

-Concuerdo contigo, esta divina.

-Oye, ¿Por qué tu hermana está en el hospital?

No, no le quería decir el porqué, no quiero que alguien sienta lastima de mí, no, eso es lo que menos quiero, es algo que no soporto, no soporto la idea de pensar que alguien cree en mi como "La chica huérfana y con una hermana con cáncer"

-Eso si es personal Zayn.

-Está bien, no te insistiré, pero dime ¿Cuántos años tiene tu hermana?

-Tiene 7 años

-¿Cómo se llama?

-Sarah

-¿Tu sola la cuidas?

-¿Esto es un interrogatorio? -Pregunte en tono de burla

-No, solo quiero saber -Dijo mirando su malteada.

-Sí, yo sola la cuido, pero ahora yo te hare preguntas a ti, ¿Si?

-Claro.

-¿Tienes hermanos o hermanas?

-No, soy hijo único.

-¿Cómo se llaman tus padres?

-Mi madre se llama Elizabeth y mi padre John Morgan

-¿Morgan? ¿Tú no eres Malik?

-Bueno, es que yo soy adoptado.

Para mí eso fue con un golpe ¿Es adoptado?

-¿Y porque no usas el Morgan?

-Pues porque mis padres biológicos pidieron que llevara el apellido de ellos, así que mis padres aceptaron ese acuerdo, no es nada del otro mundo, mis papas es más importante el cariño que un apellido

-¿Y no sabes nada de tus padres?

-No, y la verdad no me interesa saber nada de ellos, vieron las cosas complicadas y decidieron adoptarme, ni siquiera lucharon un poco, ni tu harías algo así, tu cuidas a tu hermana y no sales corriendo a adoptarla, sabes que no es tu responsabilidad pero igual tú la cuidas, ellos no hicieron nada, no lucharon nada, pero algo que si le tengo que gradecer a la vida, son a mis padres, a los verdaderos, a los que siempre han estado para mí y siempre me han hablado con la verdad, tal vez no tenga su sangre, pero me tratan como si de verdad fuera un Morgan

-No comprendo porque usas el Malik

-No lo sé, me gusta cómo suena-Dijo riendo

-Zayn, eres raro

-¿Eso es bueno o malo?-Me miro con la cabeza ladeada y con una tierna mirada

-Bueno, en ti eso es bueno

El sonrió y yo igual, ambos seguimos tomando nuestras malteadas, pero algo extraño pasaba, ninguno quitaba la mirada del otro, pero no sé porque, me gusto eso.