Una Forma Diferente De Ver

CAPITULO 2

Gun se sentó junto a la tumba recién puesta y habló con su mamá a través de sus lágrimas. Él todavía no podía entender por qué Dios le envió a su mamá un ataque al corazón, que se la llevó lejos de él. Janhae le había dicho que ahora su mamá estaba viviendo en el cielo con Jesús. Teniéndola muy cerca de él, Jesús se sentía solo y necesitaba a su mamá para así tener un amigo en el cielo junto a Él.

—Mamá, Kelly Mack regresó a Wyoming para vivir con su familia. Me dijo que no iba a volver jamás. El jefe dice que no debía estar triste ya que todas las personas en la Triple H me quieren.

Gun, se quitó el sombrero Stetson y se frotó los dedos a través de la cicatriz que apareció en la parte superior de su cabeza rapada.

—Sé que no me quieren tanto como él. Pero lo echo de menos, mamá. También te extraño.

Tenía veinte y siete años ahora y todavía no podía recordar nada sobre el día en que se había ido con su padre a visitar al abuelo de Mew. El mismo día en el que se había caído de un caballo y se golpeó la cabeza contra el poste de la cerca que separaba el potrero del patio de la casa. Él había estado noqueado, y cuando volvió en sí, su mamá le había dicho que iba a ser diferente al chico que solía ser.

No sabía cuánto tiempo estuvo dormido, pero tenía que haber sido mucho, porque cuando por fin despertó su papá ya no vivía con ellos. Mamá le había dicho que papá se había ido y que ella se había librado de la mala hierba, aunque no sabía qué diablos significara eso. Mientras tanto recordó que nunca tuvo amigos. Las personas tendían a alejarse de él. Al parecer su mamá estaba demasiado sobreprotectora con él. Al crecer, pasaba los veranos trabajando para el señor Jongche, quien en ese momento todavía era el dueño del Triple H.

Cuando el anciano murió y Mew se hizo cargo de él, contrató a Gun de tiempo completo.

No sólo Gun hizo algunos amigos entre los otros obreros, sino que también fue el mismo año en que conoció a su mejor amigo, Off Jumpol. Eso fue hasta hace un par de años, cuando Gulf vino a vivir en el Triple H y su mamá no lo dejó más ser amigo de Off.

A veces en los últimos tres años, extrañó a Off casi tanto como lo hizo con Kelly Mack y su mamá, pero ahora, por alguna razón Off estaba viviendo en el Triple H. A Gun, eso lo confundía porque no todo el mundo estaba feliz con el hecho de que Off estuviera allí ahora. Gun mismo tenía sentimientos encontrados sobre eso. Una parte de él estaba esperando a que Off no le hiciera daño a Gulf o al pequeño Win, pero la otra parte estaba feliz porque quizá Off y él podrían ser amigos de nuevo.

Todo el mundo le decía que no pusiera demasiada confianza en lo que Off dijera, pero Gun sabía muy dentro de él que Off era un buen chico.

A medida que los minutos pasaban, Gun enterró su cara entre las manos y sollozó. Las lágrimas se escapaban entre sus dedos mientras lo hacía. Parecía como si Dios no quisiera que Gun tuviera a alguien en su vida que lo amara. ¿Cuánto tiempo pasaría antes de que Dios se llevara a Off de nuevo? Oyó pasos que se acercaban, pero no quería ver quien lo había encontrado. Ellos sólo pensarían que era un gran bebé llorón, y tendrían razón. Una mano suave se posó en su hombro y lo apretó con suavidad.

—Gun, vamos hombre, se está haciendo tarde. Necesito que vengas conmigo ahora. Debemos llegar a casa antes de que Gulf y Mew empiecen a preocuparse por ti.

Gun, se sorprendió al ver a Off de pie junto a él. Últimamente el hombre lo había estado evitando a toda costa. Estaba aún más sorprendido cuando Off se agachó a su lado y tiró de él en un abrazo. Sosteniéndolo más cerca, Gun notó cuán agradable olía Off era como el hogar.