28 de Abril

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Mi corazón sigue latiendo aún cuando él lo haya destrozado.

Estos días han sido una pesadilla, este diario no merece llevar escrito tantos días de crueldad, estos días no merecen ser recordador, nunca.

En el mundo existe tanta crueldad, somos crueles y a veces no nos damos cuenta y seguimos diciendo que la sociedad es cruel.

La peleas con mi madre nunca acabarán y la universidad sigue siendo una mierda. Los días grises no acaban y para mi nunca acabarán.

No he sabido ni he querido saber nada de él desde nuestra última conversación, no quiero verle, no quiero que sienta lástima por mi, no quiero volver a sentir el dolor, no quiero recordar... pero los recuerdos me traicionan todas las noche.

No le pienso obligar a mi corazón que perdone lo que me has hecho, no te lo mereces; y si lo haría, te encargarías de nuevo de ilusionarme, de curar mis heridas para luego abrir aquellas cicatrices que me ayudaste a cerrar.

Los días han pasado tal cual navajas por mi piel, lentos y dolorosos.

Estoy tan confundida, tan perdida, tan sola, no sé que hacer con mi vida, ya no he vuelto a sonreír, no tengo motivos y ya olvidé como hacerlo. El sentimiento de felicidad ha pasado a segundo plano y ahora el dolor a tomado su lugar, me está consumiendo y no lo puedo evitar.

Mis heridas las llevo en el corazón y la piel, mis únicos instrumentos son las navajas y el papel. Me hubiese gustado usar solo el papel, pero el dolor del alma es tan fuerte que el físico es el único que lo logra opacar.

En mi habitación las paredes guardan el dolor, el piso está empapado de lágrimas y sangre, y las almohadas ahogan gritos. Mi habitación guarda muchos secretos.


Estoy viviendo en el mundo de los vivos y de los muertos.

Un Diario Lleno De Heridas y Cicatrices.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora