Había pasado la noche en vela, y ahora que ya era por la mañana estaba muy cansada, pero hoy empezaban las primeras lecciones de las instrucciones de la Base de Arkala.
Así pues se despidió de Jandro, ya que éste debía marcharse para reunirse con el coronel, y ella llenó la bañera de agua caliente, puso sales frutales y se sumergió en un baño relajante. Tardó como media hora en salir de la bañera, se recogió el pelo en una coleta y se puso sus pantalones bombachos con la camiseta de la escuela y salió del hogar para dirigirse a la torre y reunirse con los instructores.
Cuando la vieron aparecer, todos empezaron a susurrar para que ella no les oyera, pero Khaella estaba demasiado cerca y se enteró de como la juzgaban sin conocerla.
-Buenos días. -Dijo ella con voz tímida.
-Buenos días jovencita. -Dijo el instructor más joven, que fue el único que no hablo de ella.
-¿Me podrías decir donde empiezan las instrucciones? -Preguntó Khaella.
-Claro, o... ¿Qué tal si te acompaño? Yo voy allí.
Khaella afirmó con la cabeza. De camino a la sala de instrucciones, hablaron un poco de que era demasiado joven como para tener que hacer la guía de la brujería oscura para aprender a combatirla. Ella se rió, en parte tenía razón.
-Tienes razón, pero... no debes juzgar sin conocer lo que hay dentro de la carcasa.
-Tu también tienes razón, y creo que he sido el único que no ha hablado a tus espaldas. -Respondió Aaron.
-Eso es cierto, pero no me preocupa que hablen de mi, ya que no me conocen. -Dijo Khaella con una sonrisa en sus labios.
Llegaron a la sala de destino, y se despidieron el uno del otro.
Al cabo de media hora empezaron las instrucciones.
-Bienvenida joven, me llamo Kross, y seré tu instructor y tu tutor para las practicas.
Khaella hizo una reverencia con la cabeza, y volvió a sonreír.
La clase empezó explicando las primeras normas de la Base.
-Bueno, para empezar... Voy a explicarte las dos normas inquebrantables para llevar a cabo la magia blanca. -Y así fue explicándole, dándole detalles y advertencias.
Al cabo de dos horas de explicaciones, la clase finalizó y Khaella había anotado muchos apuntes sobre lo explicado.
Salió de la sala y se encontró a Jandro espiándola, la felicitó por la atención que había prestado y la invitó a comer fideos instantáneos.
Llegaron al restaurante de los Yakishoba, un nombre algo peculiar, pero Khaella lo entendió cuando vio que los dueños del restaurante eran japoneses.
Comieron en medio de risas y bromas. Y finalmente Jandro le explicó sobre la directora.
-Bueno, Khaella, la directora está de nuevo en la EBA, ha pasado dos días perdida por los malhechores, pero ya se ha solucionado todo por ahora, así que tienes permitido echarte una siesta, y luego iremos de compras para que tengas ropa cómoda.
Khaella aceptó y se terminó sus fideos.
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KHAELLA - Mar de sangre -
ФэнтезиEn la aldea de Arkala, se estudia brujería blanca y negra. Khaella, una joven de 15 años, entra en la Escuela de Brujería Avanzada (EBA) y es dotada con un don del cual muchos carecen de el. Su misión será salvar a la princesa de la dimensión de los...