Yibo y Zhan relatan desde su propia perspectiva como fue su vida en preparatoria, como es que se gustaron y enamoraron.
Como de manera torpe empezaron a comprender que es el amor, cómo fue la entrega hacia otra persona en su primera relación sexual...
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Durante esos 4 meses trate les juro que trate de entender todo, pero me dolía, a pesar de que él dijo que nos hablaríamos diario yo sabía que algo cambiaría entre los dos.
Por fin nos graduamos y él se iba a ir en dos días, como cosa rara me dijo que me quedara con él en su casa, que su mamá se había ido antes para arreglar dónde se iba a quedar, obvio que acepte sabía que tal vez esa sería la última vez que estaríamos juntos.
Yibo—¿Zhan me vas a extrañar?,—¡Zhan por favor no me olvides!,— Recuerda no importa la hora pero no dejes de hablarme por teléfono.
Zhan no contesto sólo se acercó a mí y con sus ojos tan tristes sólo me beso, no se si fue mi imaginación pero fue el beso más cálido y lleno de tristeza que he recibido, pensé que eso sería todo pero él me empezó a dar pequeños besos en mis ojos, mejillas y mentón, se me quedo viendo y de repente se quitó la camisa que traía.
Zhan —No me puedo ir sin haber sentido el cuerpo desnudo de mi lindo Yibo.
No me lo dijo dos veces eso era lo que yo deseaba, esta vez lo hicimos con más amor del que se puedan imaginar.
Bese cada parte de él, quería recordar hasta el último detalle de su cuerpo, mi boca recorrió toda su piel, sus lindos pezones rosados los convertí en un rojo carmín, de repente el se apoderó de la situación y se puso sobre mí, el movimiento de sus caderas me hacía enloquecer, debo haber gritado de exitacion por qué el me tapo la boca con la suya.
Yibo—¡Oooh mi ZHAN,!,—¡Eres el mejor!....¡ Aaaaah sigue!....¡Zhaaaan!—¡Por dios estoy .....aaah!,—¡Aprietame más,....así....así!.....
Zhan—¡Aaaaaaah!,—¡Yibo...se que no lo digo mucho...Aaaaah...pero TE AMO!
No sé cuánto duramos pero ya agotadas todas nuestras energías nos recostamos en la cama, yo como un niño chiquito me recosté en su pecho, no hablamos por un rato, yo no podía hacerlo ya que se daría cuenta que estaba llorando.
