Estaba tan asustado, Cellbit...
No imaginé que me verías con tanto desprecio...
Con decepción... Nunca pensé que amarte dolería tanto y que el verte llorar haría mi corazón pedazos.
Mi intención nunca fue hacer de esto una mentira tan duradera, jam...
A veces cuando veo tu rostro me pregunto, ¿qué es lo que está pasando por tu mente cuando me ves? Cuando me sonríes genuinamente.
Abrazado a ti, me impregno de tu aroma, aquel que alivia mi malestar y acaricia mis dudas.
Pienso...
¿Cuánto más me permitirás permanecer a tu lado? Me dejas descansar en tu pecho y una vez más la misma pregunta se hace presente
- Cellbit- llamo tu mirar
- ¿Guapito?- respondes acariciando mi cabello
- ¿Me quieres?
Tus finos dedos se detienen... ¿cuándo fue que comenzó a surgir esa cuestión? ¿Hasta cuándo tu respuesta seguirá siendo la misma?
- Te amo, guapito... te amo- continúas trazando pequeñas caricias a lo largo de mi espalda
Suspiro
Sé que no puedes entender el motivo de mi duda, aún te sigues preguntando la razón de mi inseguridad
¿Y yo?
Ni siquiera intento decirte la verdad por temor a arruinarlo todo... sintiendo el miedo en mi sangre y en cada rincón de mi cuerpo
Supongo que esto es amor
¿Cómo llegamos a este punto?
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Roier
La primera vez que observé tus ojos a través del cristal, jamás imaginé que serías tú con quien estaría dispuesto a compartir mi vida entera.
Después de haber sufrido un desenlace tan cruel con Spreen, no creí que alguien estaría ahí para sanar mis heridas. Tus coqueteos y juegos poco a poco comenzaron a ser algo más que algo tan simple.
¿Recuerdas nuestro primer beso? Sí, aquel lleno de inexperiencia.
El sonreir en tus labios se volvió una de las sensaciones más adictivas que pude experimentar.
No se supone que sería así.
Mi objetivo aquí jamás fue enamorarme... pero un cambio de planes hace la vida mucho más divertida, y si es a tu lado, si estoy contigo... todo eso es mucho más importante que una misión de mierda.
