Mulan [ AkazaxKyojuro]

(❀ℭ𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬6❂)

- Orden, orden - hablo Douma tratando de no abalanzarse a golpear a todos los que estaban jugando y pelando.

- Yo quiero tallarines empanizados - comento un joven, riéndose mientras abrazaba a la persona de alado, con la intención de burlarse un poco de ese emisario amargado.

- Yo quiero camarones con salsa dulce - hablo el que estaba a su lado, con la misma intención que su compañero.

Todos comenzaron a reírse, observando cómo Douma se retiraba luego de que esté los fulminara con la mirada.

- Parece que el niño cara de arroz se quedó dormido - susurro un chico cuando vio a Kyojuro, este tenia la estatura algo baja, con los orbes bicolores, teniendo el ojo izquierdo color turquesa y el derecho de un color amarillo, con un fleco dividido a la mitad, hablo con su compañero que estaba alado de el - Hola Renjuro, ¿Tienes hambre? - dijo el azabache mientras retrocedía para recostarse en una carpa, Sanemi se acerco lentamente, posicionándose en el lugar donde estaba el Rengoku.

- Si, por que haré una ensalada contigo - Kyojuro tapo su cara con sus manos al ver cómo el peli-blanco estaba apunto de proporcionarle un golpe.

- ¡Soldados! - antes de que Sanemi golpeara a Kyojuro, Akaza llegó y hablo firmemente dirigiéndose a al frente para que le prestarán atención, el peli-blanco soltó a Kyojuro ya que no quería meterse en más problemas. Todos se posicionaron en una línea recta al momento de que escucharon la voz de Hakuji - se reunirán en rápido y en silencio todas las mañanas - Kyojuro observó como Akaza se despojaba de toda su vestidura que tenía en la parte superior de su cuerpo. Aquel chico tenía el cuerpo bien formando, unos tatuajes en línea en su cuello, hombros y pecho anchos, abdominales tonificados, el omega se quedó con la boca abierta, nunca había visto el cuerpo casi desnudo de alguien - Cualquiera que haga lo contrario responderá ante mi -.

- Que miedo - Sanemi hizo un puchero en sus labios, respondiendo con sarcasmo, queriendo retarle a su capitan.

- Shinazugawa - Hakuji tomo el arco y una flecha, para luego lanzar la flecha a un poste de madera - Gracias por ser voluntario, ahora baja la flecha - Dijo el de cabello rosa sonriendo levemente.

- Iré por la flecha niño bonito y eso será sencillo - dijo el peli-blanco gruñendo.

- Un momento -antes de que Sanemi se subiera al poste a tomar la flecha, Akaza lo detuvo llevando consigo una caja mediana de madera que le había entregado Douma de la cual saco dos cosas pesadas que estaba sujetados por unas cuerdas de cuero - Esto representa disciplina - el peli-rosado puso aquella cosa pesada en la mano derecha de Sanemi - Y esto representa fuerza - dijo el alfa de cabellos rosados poniendo esa cosa en la otra mano.

El chico de cicatrices fruncio el ceño al tener esas cosas pesadas en ambos brazos. Observó con detenimiento al poste, suspiro. Retrocedió un poco, flexiono sus piernas y dió un salto, una vez este se encontraba ya en el poste comenzó a moverse lentamente para no caerse, pero sintió su cuerpo resbalarse por el peso que traían en sus brazos e intento aferrarse con los dientes y piernas, pero lamentablemente cayó de espada en el suelo, sin ni siquiera estar cerca de la flecha.

Así continuaron, todos caían. Cuando a Kyojuro le llegó el turno para subir al poste, el omega cayó de trasero con solo estar unos pequeños segundos en el poste, el Rengoku se levanto adolorido sobando su parte trasera. Akaza miraba como cada uno caía al intentar alcanzar la flecha que estaba clavada en el poste de madera.

- Hay un largo camino por recorrer - murmuró el de cabellos rosado, suspirando con decepción e incredulidad mirando.

Hakuji tomo varios palos largos y delgados, los aventó a cada uno de los reclutas que estaban presentes, sujeto dos jarrones acomodandolos en su izquierda y derecha, agarro una vara, elevó con esta los dos jarrones y las quebró a tan solo segundos de haberlo  levantado.

Kyojuro se comenzó a moverse al sentir que un bicho se deslizaba entre su ropas, golpeando con la vara que tenía en las manos a las personas que estaban cerca de el. Tengen que estaba escondido no tan lejos de donde estaba el omega, se encontraba apretando los dientes y frunciendo el ceño al ver cómo el pelo-rosado se acerco a Kyojuro quitándole la vara que tenía en manos.

El alfa de cabellos rosados los llevo a un árbol que tenía siete círculos medianos dibujados en el tronco del árbol, a todos se les dieron un arco, una flecha y un fruto para que dispararán a los círculos, ninguno logro acertar, las frutas caían antes de que las flechas las atravesarán, Uzui que estaba en la la bolsa con flechas de Kyojuro agarro el fruto y lo atoro en la flecha de el Rengoku, Kyojuro acerco su mano a la punta de la flecha y antes de que lo sacara la fruta Akaza lo tomo del hombro provocando que el de cejas gruesas diera un grito ahogado.

Luego Hakuji los dirigio a un acantilado, este se puso una cubeta de madera con agua en la cabeza, tomo una vara y bloqueo con esta las piedras que lanzaban los soldados sin que la cubeta se cayera, al llegar el turno de el omega rubio con mechas rojas, le lanzaron las piedras para que lo esquivará pero la cubeta se cayó en su cabezaempapando su ropa y bloqueando su vista, provocandl que las piedras golpearan su cuerpo.

Todos pasaron muchas pruebas pero ninguna la superaron. En alguna de estas pruebas Tengen ayudaba a Kyojuro.

Al llegar la noche el alfa de ojos amarillos se recostó encima de una roca que estaba cerca del el campamento, esta desanimado, sabía que ellos no tomaban las cosas en serio, si seguía así no llegarían a ningún lado.

Al comenzar la mañana Akaza los guío por una colina, todos cargaban una vara cerca de la nuca, estos palos estaban atados con dos bolsas, que les ayudaban a saber cuánto peso podían cargar. El emisario que estaba en un caballo señaló a Kyojuro que estaba quedándose al último, el omega tambaleaba, intentaba estar de pie pero cayó por el peso que tenía en los hombros, Hakuji tomo la vara con las dos bolsas de Kyojuro y le dió su mano para que el Rengoku se levantara, Kyojuro sujeto la mano de Akaza y el peli-rosado se retiró mientras que el peli-amarillo estába caminando atrás de él.

En la noche el alfa de cabellos rosados se acerco a Kyojuro con el caballo de el chico - Empaca tus cosas y ve a casa, no sirves en la guerra - con eso dicho Akaza se retiró, el omega se fue a recoger sus cosas, antes de irse observó la flecha que estaba en el poste, no podía rendirse fácilmente.

Se ato las cosas pesadas que le habían dado en su primera prueba, acercándose al poste, flexiono sus piernas y se impulso, cayendo de de golpe al sentir que esas cosas lo enpujaba, en el suelo Kyojuro se levanto sobando su espalda baja, miro fijamente a las tiras de cuero que estaba apretando sus muñecas, subió de nuevo pero está vez al llegar al poste entrelazó aquellas cosas que están amarradas en su muñecas, sostenía el poste con sus piernas y la tira de cuero, ayudándolo a subir sin hacer demasiado esfuerzo.

Al amanecer, Kyojuro solo le faltaba poco para tomar la flecha, algunos de los soldados salieron de sus carpas, aplaudieron y gritaron el nombre del  omega, elogiandolo por lo que estaba haciendo, a este solo le tomo unos minutos para llevar y tomar la flecha. Akaza que se había salido de su carpa por los gritos, brinco del susto al sentir que una flecha pasaba a unos centímetros de el, miro en dónde había provenido la flecha y vio al omega arriba del poste, Kyojuro le sonrió y Hakuji le devolvió el gesto.

Akaza hizo que los soldados realizarán las mismas pruebas que había puesto los días anteriores, está vez todos se lo tomaron en serio y lograron todos lo entrenamientos que Akaza les había dado.