¿Recuerdan que les dije que la Toman compartía un miedo exagerado por Takemichi de mal humor?
Olviden eso.
El verdadero terror de la pandilla completa, sin excepciones, era ver a Kisaki y a Takemichi enojados mutuamente, porque, si bien se habían hecho amigos de una forma realmente peculiar, eso no quería decir que iban a dejar sus convicciones y propósitos sólo por eso, en pocas palabras, Takemichi quería salvar a su novia y Kisaki seguía interviniendo.
La situación se dio de la siguiente forma.
En el futuro Takemichi estaba hablando con Hinata en un parque cuando de la nada un sujeto que -supuso- era Hanma adulto les dispara tanto a Hanagaki como a la fémina junto a él, él sobrevivió sin embargo Hinata no lo hizo y eso le irritó en sobre manera.
Cuando volvió al pasado y enfrentó a Kisaki él sólo sonrió y negó todo, claramente estaba mintiendo y eso a Takemichi le molesto aún más, por lo que, en un acto infantil a sus ojos, decidió ignorarlo el resto de la semana mientras pensaba en una solución y quizás, aunque no es seguro, un castigo digno para su "amigo".
Es por ello que Takemichi justo ahora estaba sentado a un metro de distancia de Kisaki quien había intentado disculparse, no muy sinceramente, en lo que va de día.
- Por el amor a Satán, no puedes ignorarme para siempre, Takemichi - se escuchó la voz cansada de Kisaki-.
El aura que desprendía aquel rincón en el que ambos estaban sentados estaba haciendo estragos en el interior de todos, excepto por dos chicos que miraban aburridos la escena.
- Oh claro que puedo, ¡Y lo haré! - dijo el Hanagaki sin apartar la vista del Tamagochi con el que estaba jugando-.
- ¡Sabías que no pararía! -exclamó el moreno-.
- ¡Me prometiste que no lo harías, y a pesar de que intuía que no lo decías en serio, no creí que caerías tan bajo y romperías la promesa! -vociferó de vuelta lanzando el Tamagochi a sabrá Dios donde-.
- ¡Fue una promesa estúpida! ¡Además ya la habías dejado para cuando eso ocurrió!
- ¡Y sabes que precisamente por eso estoy poniendo tanto empeño en lo que estoy haciendo!
- ¡Tú y ella no eran nada! ¡Deja de sufrir por eso!
Y así la situación continuó, la Toman miraba y las apuestas empezaron a subir cuando Takemichi se lanzó hacia Kisaki sujetando su cabello en el proceso.
- Voy 100¥ a que Takemichi le rompe los lentes -le dijo Nahoya a Muto-.
- 100¥ más que Kisaki le patea las bolas -repondio en respuesta el más grande sin apartar la vista del conflicto-.
- Hecho.
En una pausa cuando ambos estaban físicamente exhaustos, Takemichi estaba sentado sobre abdomen de Kisaki inmovilizando al mismo en el transcurso, las miradas que se daban eran mortíferas, su discusión había escalado a una riña.
- 100¥ a que Kisaki se disculpa primero -susurró Hanma en medio de Nahoya y Muto, quienes ni se inmutaron y tan sólo aceptaron la apuesta-.
- ¡Es mi novia!
- Pudo haber sido mía -murmura el de lentes mirando hacia otro lado, la sangre del rubio hierve-.
- ¡Serás...! -su puño se levantó en el aire, el moreno se preparó para el impacto, sin embargo el mismo nunca llegó-.
El puño quedó sobre el pecho del rubio cenizo, sus ojos miraron con confusión a la persona sobre el.
- No sirve de nada golpearte -Takemichi se puso de pie-.
Jamás pensó que se volvería amigo de la persona que le ha hecho la vida imposible, y eso le estaba complicando las cosas, porque aún quería salvar a Hinata y Kisaki aún conservaba sus mismos ideales, pero luego de entablar conversación y una amistad de por medio vio que tal vez ellos no eran tan diferentes, y eso estaba preocunpándole.
No quería perder a Hina, pero tampoco quería arriesgarse a que algo se rompiera en su lazo con el moreno, pero si no resolvía los problemas con él no podría tener a Hina, y eso para él significaría perder a Kisaki.
Estaba entre la espada y la pared.
Igual que Kisaki.
Takemichi se levantó y empezó a caminar a la salida del templo. El moreno se quedó tendido en el suelo recapacitando, y llegó a una conclusión.
- ¡Agh! ¡Mierda! - se levantó de golpe y se apresuró en alcanzar al rubio-. ¡Takemichi espera!
El mencionado se giró y Kisaki se paró frente apretando sus puños a los costados de su cuerpo.
- Y-yo...-no era tan difícil, podía hacerlo, por supuesto que podía, es sólo que no sabía porqué lo hacía-. Lamento haber roto la promesa...n-no te prometo que la respetaré siempre pero...lo lamento.
Es cierto, se disculpa porque reconoce a Takemichi como un digno oponente, y un buen amigo.
Su primer amigo, podría decir. Hanma es un ¿Amante? Ni siquiera sabe que mierda son, pero el punto es Takemichi.
El de ojos azules sonrió, tomó una de las manos de Kisaki y lo llevó consigo a uno de las rocas que usaban de asientos en el templo.
- Ay el amor - se escuchó a Chifuyu exclamar a la par que caminaba en dirección a los otros dos-.
Nahoya y Muto por su parte miraban incrédulos la escena.
- Creo que me deben algo. -habló Hanma burlón-.
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· Los hanmas ·
أدب الهواة¿Cómo terminaron siendo amigos? Nadie lo sabía. ¿Cómo es que no se han matado aún? Todos querían saber lo mismo. Y es que "Los hanmas" como se llamaban, eran una mini pandilla de idiotas que siempre vivían metidos en un lío diferente todos los día...