HMG? BL (hiatus)

Capítulo 3

Coincidencia

Yoo Geon miró el interminable número de pisos en el tablero del ascensor. Tenía dos pasaportes en sus manos. El pasaporte verde sobre el pasaporte azul marino oscuro le resultaba muy desconocido. En cuanto se abrió la puerta del ascensor que subió al último piso, echó los pasaportes en la bolsa que llevaba.

En el pasillo había colgados cuadros famosos que quizá había visto alguna vez. Sacó la llave de tarjeta que había guardado en el bolsillo trasero del pantalón. Inclinó la tarjeta negra para con la luz del techo comprobar la habitación. En lugar de un número había una palabra: Special.

Cuando colocó la tarjeta en la puerta de madera con la misma palabra: 'Special', la cerradura se abrió emitiendo una pequeña notificación.

"Hijo de pu..."

La habitación de hotel que A había reservado era lujosa, en contra de la ligera intención de decir: "Por favor, consígueme una habitación". Yoo Geon observó el espléndido interior. Había cinco puertas visibles desde la entrada, además de la sala de estar con una ventana frontal.

Las pantuflas que habían sido acomodadas en la entrada eran innecesariamente anchas, caminó examinando el interior, a excepción del suelo y la iluminación, los muebles y decoraciones eran todos negros, dejó su bolso y se sentó en un sofá de cuero negro

"Metido en un ataúd".

Al decir esas palabras recordó que anteayer casi pudo haber quedado atrapado en un ataúd. Sin la ayuda del viento poco estable, el francotirador que le disparó habría hecho un agujero en medio de su cuerpo.

En cuanto apoyó el brazo en el respaldo del sofá con las piernas cruzadas, su rostro se frunció. Un dolor frío se extendió desde su hombro.

"... Ah".

La herida que atravesaba la parte posterior de su hombro le producía un cosquilleo como si quisiera anunciar su existencia. Aunque quitó el brazo del respaldo, el dolor seguía siendo el mismo. Arrastrándose con sus pantuflas, Yoo Geon rebuscó los analgésicos sacando las cápsulas turquesas de una bolsa de vinilo barato.

Tomó agua embotellada de la nevera para pasar la medicina y caminó acercándose a la ventana con vista panorámica e inconscientemente dijo:

"¿800 m?"

Solía medir la distancia inconscientemente cuando miraba a lo lejos. Era un hábito que no era necesario en la vida cotidiana. Sacudió la cabeza mientras seguía el largo río como si pasara una serpiente.

Corea al que volvió después de dos años, no ha cambiado mucho. Le dio la espalda al extenso centro de la ciudad. El cielo detrás de Yoo Geon se estaba nublando un poco.

Al entrar a la habitación, Yoo Geon puso el objeto que tenía en la mano bajo la almohada. Lo había traído del almacén antes de ir al motel. Tumbado en la cama, cerró lentamente los ojos y los abrió.

'Es un momento de descanso. Ya que estás en Corea, intenta salir con alguien. ¿No dijiste que quieres ser normal?'

Una voz burlona pasó por sus oídos. El tono sarcástico de A, que representa una parte considerable de sus estrechas relaciones humanas, le hizo cosquillas en los oídos.

'Dijiste que querías ser normal. Entonces, ¿por qué no descubres lo que hace la gente normal?'

La voz de A perduró hasta el final como si estuviera atascada en su mente. Yoo Geon finalmente se levantó de la cama.

°∘❉∘°

Todo fue sencillo al salir: tomar un taxi que esperaba delante del hotel y llegar hasta el club con coloridos carteles de neón. Pero Yoo Geon solo miraba a la gente haciendo fila durante diez minutos.