Día 7: Luz

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Subtítulo: La Amante del Vampiro

"Tradition is not the worship of ashes, but the preservation of fire." —Gustav Mahler.

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Izuku se detiene en el borde del bosque después de haber tenido una de las tantas prácticas de tiro con mosquete en el que obligan a tomar a todos los jóvenes cadetes que entran al ejército por tres años al terminar sus estudios básicos; y al final poder conseguir un trabajo digno en la fría ciudad 01 de la luz, donde la noche nunca llega desde que se enemistaron con los vampiros y las luces incandescentes mantienen a raya aquellas presencias eternas, más no inmortales.

El bosque de Midori divide a la ciudad de luces con el espacio que antes los vampiros usaban para cazar humanos y quitarles toda la sangre para venderla o alimentarse a falta de ingresos para hacerlo y conseguir sangre rea. Aunque eso al parecer ya no pasa, solo que la gente lo olvida y está penalizado acercarse al lugar más allá de estar unos cuarenta pasos del borde.

Izuku aprieta las correas del mosquete heredado por su padre, el cual  le había hablado del pensamiento imposible de entrar al bosque de Midori durante el invierno, pues lo frondoso de los árboles dejaba entrar poca luz solar. Aunque eso no importaba  si el asunto se trataba con las familias de la élite de los vampiros que podían caminar bajo la luz del sol, pero eso era improbable, aunque si por algún motivo ellos entraran en un frenesí sediento de sangre, todo sería una masacre, una mucho más grande de la que ocurrió hace 80 años, pero dado el hilo fino de las negociaciones que recientemente empezaron a tomarse después de casi dos siglos en guerra, eso no era posible desde que acordaron intercambiar donaciones por seguridad.

Ya llevan demasiados años en conflicto y las leyendas alrededor de esas criaturas inmortales no han dejado de propagarse desde el primer ataque que ya nadie recuerda si fue por parte de ellos o los humanos. Aunque la historia que no enseñaban a nadie, demostraba que fue culpa de los humanos, pero la mayoría de los humanos cree que fueron los vampiros.

Sin embargo, ambas historias hablaban de un tiempo en el que  las dos especies convivían de manera medianamente pacífica y los humanos brindaban pequeñas donaciones de sangre para mantener a raya ataques de sed de los vampiros que eran buena mano de obra nocturna contra enemigos humanos antes de que los humanos se aliaran totalmente. Sin embargo, tras ese primer conflicto y el asesinato de un vampiro real a la joven Iku, una noble japonesa de familia importante antes de que la era de la luz llegara a ellos, no se ha borrado de los discursos de odio de los extremistas que son cada vez más ignorados, porque la pacificación es más deseada que dejarse llevar por el odio, pues vivir con miedo y entrenando a niños como soldados desde muy jóvenes, era desalentador.

Además, no había mucho ocio y parecía que las comodidades empezaban a extinguirse al paso que iba la humanidad que estaba cada vez más histérica.

Izuku dejó de mirar al bosque para seguir su paso entre las calles de adoquines para llegar a casa, donde les pidieron ver las noticias porque iban a transmitir la llegada de la última familia real vampírica.

Izuku realmente no tenía que verla, pues ahí estaría su padre junto a su madre y él.

Hisashi era de la línea de sucesión de la familia de Iku que siempre estuvo empecinada en tratar la paz con los vampiros debido a la verdad del asesinato de la joven que fue modificado en su verdad, solo que el gobierno no estaba tan convencido de eso y como su padre aún no ha terminado de impartir le sus clases de la historia familiar Midoriya deja en suspenso la claridad del tema en Izuku. Sin embargo, no solo era Hisashi el que buscaba la paz con los vampiros, ya que Toshinori, el héroe de la humanidad que salvó a más de 30 personas durante un frenesí vampírico en la ciudad 09 de la luz; era otro negociante.

Week Que Tal Vez Nunca Termine. (TDDK Week2022) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora