Miedo

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Los personajes no me pertenecen, son de la gran Rumiko Takahashi. Esto es sin fines de lucro solo diversión por y para los fans.

Día 5 de "Siete días con Sweet" disfruten la lectura...

—O—

Habían pasado tres días desde que  Ranma fue por Akane a Ryugenzawa, recordar lo sucedido le provocaba un escalofrío por toda la espina, y es que la intrépida chica lo había puesto en un escenario que nunca creyó pisar. Hubo momentos en donde verdaderamente creyó perderla, ese tal Shinnosuke se le había confesado y ella quería estar a su lado y no con él, quien era su prometido a la fecha. 

El viaje de regreso a Nerima lo aliviaba, pero su corazón todavía se sentía un tanto herido. Cruzaba palabras con ella pero solo lo necesario, sentía que si tocaba el tema Akane podía cambiar de opinión y regresar a los brazos de ese tonto guardabosques. Sin embargo, la tensión entre los dos, sumado a la poca comunicación hacía que el ambiente estuviese tenso y tan cortante como el filo de una cuchilla. 

Su bonita prometida no había salido de la tienda en toda la mañana, ya era medio día y les tocaba pasar la noche otra vez en el bosque. Así es que Ranma fue por algo de leña para una fogata y también para cocinar los peces que pescó durante el alba. Sentía una responsabilidad enorme, debía regresar a casa con la chica sana y salva, darle alimento era parte de la tarea porque aunque no hablaban casi nada, no permitiría que ella pasara hambre. 

Lo más contradictorio era que pese a todo, sus pensamientos y corazón solo iban dirigidos a ella. Y recordar que había tomado su mano entre la suya cuando se alejaban de aquel lugar lo ponía demasiado nervioso, ¿Qué pensará ella de eso? se preguntaba, al tiempo que creía era normal al tener ellos un compromiso, solo que todo lo que sentía dentro de su corazón seguía allí y no llegaba a oídos de ella.

Algo cabizbajo y suspirando una y otra vez regresó a la tienda, pero Akane no estaba y eso le puso los pelos de punta. Alzó la vista para buscarla y la encontró rápidamente sentada en una roca cerca del río, botó aire de puro alivio y caminó a su encuentro. Pero mientras se acercaba se dio cuenta del pavor que le provocaba que ella se fuese sin decirle nada...

—Akane —la llamó. Ella lo observó por dos segundos y volvió a ver el río —¿Estás molesta conmigo? —preguntó inquieto.

—Un poco —respondió tan naturalmente que sintió pesar.

—¿Qué hice ahora, acaso no quieres regresar a casa o prefieres volver con él? —cuestionó con seriedad pero también dolido, todavía le molestaba el recuerdo de ese tal Shinnosuke.

—¡Por qué me preguntas, fuiste por mí y aquí estoy pero pareciera que eso no te importa en lo absoluto! —chilló con tono de reclamo, el azabache se sorprendió ¿Cómo podía pensar siquiera algo como eso? 

—No tienes idea... —susurró por lo bajo pero Akane lo oyó.

—Exacto, no lo sé. ¿Cómo podría? ¡Si no dices nada!

—Fui por ti Akane, fui hasta ese maldito bosque a buscarte y cuando lo hice no quisiste regresar de inmediato, luego de  todo lo ocurrido ¿Dudas de mí? 

—No dudo, ni siquiera sé a qué atenerme contigo —replicó poniéndose de pie.

—Ya basta, solo regresemos a casa ¿quieres? 

—Ranma ¿no lo ves? —preguntó ella con sus ojos vidriosos —Estoy aquí contigo porque... —en ese momento su pie se resbaló de la empinada roca haciendo que perdiera el equilibrio, por fortuna el chico era ágil y la sujetó tomándola de su pequeña cintura, estrechando así todo tipo de contacto.

Ambos quedaron viéndose con profundidad, los dos querían saber qué pasaba por la mente del otro así como lo que sentía su corazón. El cuerpo de Akane gritaba diciéndole que él era dueño de su amor mientras él se debatía en un mar de sentimientos de los cuales no sabía por dónde empezar. 

—Yo... —comenzó a decir él —Me importas Akane, no podrías dimensionarlo y cuando te fuiste a ese bosque y te encontré con ese guardabosques —hizo una pausa antes de continuar —en verdad creí que te quedarías junto a él —finalizó amargamente lo que no quería admitir.

—Y entonces ¿estás feliz de que viniera contigo? —preguntó ansiosa escudriñándolo para saber si al menos encontraba una respuesta en esos zafiros.

—Sí, pero no es suficiente —aseveró —lo que siento por ti es tan grande que a veces no sé como lidiar con esto, y tú me sacas de mis cabales. No quiero perderte, porque te amo —confesó abrazándola con fuerza, como si ella pudiese escapar de esos largos y fuertes brazos.

Decir "te amo" no era fácil, era un sentimiento muy potente que conllevaba acciones poderosas. Al fin lo oía claramente de sus labios, por su mente retumbaba una y otra vez, porque no sabía con exactitud si estaba soñando o si el hombre que la sostenía se arrepentiría más tarde. 

Sin embargo, su cálido aliento pegando cerca desu nariz, sus manos sujetándola firmemente para que no pudiese escapar le decían que no era otra fantasía. El corazón de Akane palpitaba rebosante al oír lo que siempre soñó, decirlo tan claramente y viéndola a los ojos mostrando la honestidad de su sentir se hacía realidad. 

Ese abrazo pasaría a formar el primero de muchos por venir, ella lo sorprendió con tímido beso, pero claro, no fue suficiente para él. Ninguno de los dos tenía experiencia en el arte de amar, eran unos novatos pero con sentimientos claros, ese tímido beso fue subiendo de nivel a medida que se acostumbraban al sabor del otro. 

Esa noche en esa tienda en medio de la nada, Ranma prometió que al regresar a casa haría oficial el compromiso, ya era hora de dejar atrás los miedos, porque no estaba dispuesto a titubear otra vez. 

Después de todo  a veces de los temores podemos sacar lecciones, y más sin son de amor. 

Fin 

Estimado lector, ya casi llegamos al final de este breve desafío. Mil gracias por seguir leyendo y dejando sus comentarios.

La imagen elegida es un clásico, del ova en donde Ranma toma de la mano a Akane luego de que ella eligiera a Shinnosuke en vez de a él. Golpe a su orgullo claramente, y bueno a partir de allí se me ocurrió este breve y decisivo shot.

Espero les haya gustado, feliz de leerlos siempre. No olvides dejar tu valioso voto en la estrella. 

Desde Chile una fan más de Ranma.

Sweetsimphony._ 

Siete días con SweetDonde viven las historias. Descúbrelo ahora