Soy Omega || Sungsun

Cap. 33

Al llegar la colegio Sunoo se encontró con Jake y Sunghoon. Shim dijo que estaban esperando a Jay pues este había ido a comprar leche de durazno para Shim.

Sunoo sonrió en su dirección con el ceño levemente fruncido. — Entonces, ¿ustedes están saliendo?

Pensó que Jake gritaría un fuerte "No, que te pasa, ¿estás loco? ni muerto." Pero en cambio el dijo. — ¡Sí! puta madre, ¿puedes creerlo? ni yo me lo creo, estoy que tiemblo, mira tócame. — tomó su mano y la puso sobre su muñeca con una mueca rara en su cara. — Aunque bueno, no es exactamente que estemos saliendo, en realidad.

Jay llegó entonces, apresurado, y quitó su mano como si fuera un vagabundo. Sunoo rodó los ojos divertidos. — Lo estoy cortejando, se lo pedí ayer, ¿que tal?

— ¿Me preguntas a mi? — el Alfa asintió, inflando el pecho con orgullo. Park era raro, ¿cómo a Jake le gustaba? — bueno, por mi bien, sean felices, de todas formas, no creo que tenga que darte un discurso sobre cómo convertiré tu cuerpo en puré si le haces algo a Jaeyun-ah, ¿verdad?

El Alfa rodó los ojos. — Hubiera preferido que me lo digas tú a que me lo diga él — señaló a su mejor amigo. —. "Si suelto una sola lágrima por tu culpa Sunnie va a batearte la cabeza hasta que quede un hueco en ella y te hará comer hormigas, y ni tu voz de mando o super fuerza de Alfa podrá salvarte porque el fue entrenado por un Alfa mayor." — imitó con voz chillona. — Esa información es útil, pero desalentadora.

— ¡Oye yo no hablo así!

Carcajeó. — Bueno, mentira no es.

— Ya, deberíamos ir a clases antes de que toque el timbre — intervino Sunghoon. Jay asintió y la pasó la leche de durazno a Jake antes de tomarlo de la mano y caminar con él hasta la entrada del colegio, donde más de un estudiante se les quedó mirando como si fueran una nueva atracción. —. Sunoo, ¿ya vienes?

Asintió antes de ponerse a un lado de Park, este evitó su mirada cuando giró a verlo y eso lo hizo sonreír mientras recordaba el evento de la noche pasada. Carraspeó para tratar de espantar la leve incomodidad que parecía querer asentarse sobre ambos y miró hacia la entrada, Jake se había parado a conversar con Jihye y Kai y Jay tenía su mano libre ocultando su rostro.

Entonces giró a ver a Sunghoon y frunció el ceño. — ¿Por qué estás sonriendo?

Park tropezó con una elevación de la vereda que no notó y luego tosió incómodo. — No estaba sonriendo.

— Si lo hacías, así, mira. — Sunghoon se giró y él sonrió a labio cerrado con los ojos virolos.

— ¡Yo no cruzo mis ojos así!

Carcajeó por la expresión ofendida del Alfa mientras este lo empujaba levemente con la cadera. Llegaron a la entrada y arrastraron a Jake, Kai y Jihye dentro del Colegio, antes de que Jihye dijera la última fase de su plan de escape.

Jay parecía un padre mientras retaba a Jihye. — Eres la presidenta del Consejo Estudiantil ¿y quieres hacer la cimarra?

La Alfa se cruzó de brazos. — He sido recta por casi todo el año, falta poco para que salgamos del colegio Jay, déjame vivir.

— Tu no quieres vivir, quieres lanzarte fuera del bote llamado vida.

La chica puso una mano sobre su boca, sorprendida. — ¿Cómo sabes? — Park la miró obvio. — Bueno pero no soy la única, todo adolescente se quiere tirar al mar.

— Que linda generación la nuestra.

Todos rieron, concordando.

Al llegar al salón Jake dejó un beso en la mejilla de Jay antes de despedirse y luego el Alfa se dirigió a su propia aula. Inevitablemente eso les había recordado a Park y él su beso de ayer y terminaron mirándose cuando sus amigos se dieron aquella muestra de afecto.