Capitulo 10

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-Pero mejor que vayamos primero a conseguir el dinero -Los tres empezamos a caminar todo derecho. Todo era tan diferente al mundo Muggle. Aquí todos usaban túnicas y sombreros puntiagudos como en los libros de cuentos de hadas. Movía la cabeza en todas direcciones mientras iban calle arriba, tratando de mirar todo al mismo tiempo: las tiendas ,las cosas que estaban fuera y la gente haciendo compras. Una mujer regordeta negaba con la cabeza en la puerta de una droguería cuando ellos pasaron, diciendo: «Hígado de dragón a diecisiete sickles la onza, están locos...». Yo paré mi caminar. Claro que estaba muy caro, en el supermercado estaba a máximo 7 sickles. 


Un suave ulular llegaba de una tienda oscura que tenía un rótulo que decía: «El emporio de las lechuzas. Color pardo, castaño, gris y blanco». Varios chicos de la edad de Harry y yo pegaban la nariz contra un escaparate lleno de escobas. 


-Mira Harry, es la nueva Nimbus 2.000, la más veloz -Lo hice acercarse y el también se pegó al cristal-

-Y para qué es o qué? -Yo le señalé lo demás que había adentro de la tienda-

-Esta, como puedes ver, es una tienda de Quidditch, un deporte mágico que consta de un juego en un estadio en forma ovalada con tres aros ubicados a cada lado y a distinta altura. En el juego intervienen dos equipos de siete jugadores cada uno: un Guardián, dos Golpeadores, tres Cazadores y un Buscador. Los tres tipos de bolas que intervienen son la Quaffle, Bludger y la Snitch Dorada -El abrió los ojos-

-Vaya, suena fascinante -Asentí y seguimos caminando con Hagrid- 


A{gunas tiendas vendían ropa; otras, telescopios y extraños instrumentos de plata que Harry y yo nunca habíamos visto. Escaparates repletos de bazos de murciélagos y ojos de anguilas, tambaleantes montones de libros de encantamientos, plumas y rollos de pergamino, frascos con pociones, globo scon mapas de la luna...


-Gringotts -Dijo Hagrid. Habíamos llegado a un edificio, blanco como la nieve, que se alzaba sobre las pequeñas tiendas. Delante de las puertas de bronce pulido, con un uniforme carmesí y dorado, había...-Sí, eso es un gnomo -Dijo Hagrid en voz baja, mientras subíamos por los escalones de piedra blanca. 


El gnomo era una cabeza más bajo que yo. Tenía un rostro moreno e inteligente, una barba puntiaguda y, pude notarle, dedos y pies muy largos. Cuando entraron los saludó. Entonces encontraron otras puertas dobles, esta vez de plata, con unas palabras grabadas encima de ellas. "Entra, desconocido, pero ten cuidado con lo que le espera al pecado de la codicia, porque aquellos que cogen, pero no se lo han ganado, deberán pagar en cambio mucho más, así que si buscas por debajo de nuestro suelo un tesoro que nunca fue tuyo, Ladrón, te hemos advertido, ten cuidado de encontrar aquí algo más que un tesoro".


-Como les dije en el camino, hay que estar loco para intentar robar aquí -Dijo Hagrid. 


Dos gnomos los hicieron pasar por las puertas plateadas y se encontraron51en un amplio vestíbulo de mármol. Un centenar de gnomos estaban sentados en altos taburetes, detrás de un largo mostrador, escribiendo en grandes libros de cuentas, pesando monedas en balanzas de cobre y examinando piedras preciosas con lentes. Las puertas de salida del vestíbulo eran demasiadas para contarlas, y otros gnomos guiaban a la gente para entrar y salir. Hagrid y Harry se acercaron al mostrador, por lo que yo también.


-Buenos días -Dijo Hagrid a un gnomo desocupado- Hemos venido asacar algún dinero de la caja de seguridad del señor Harry Potter y la Familia Wormwood-

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⏰ Última actualización: Jan 23, 2023 ⏰

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Mi primer amor- Matilda x Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora