YOU WERE THE LOVE OF MY LIFE || Larry S.

no sé dónde aterrizas cuando vuelas

En el marco del Teotihuacán popular, de supersticiones, y creencias, se dice que estando en la cúspide, de pie en el centro de la plataforma, si se pide un deseo, este seguramente se cumplirá; también es el lugar apropiado para recibir "energía cósmica".

*Mientras tanto en otra realidad*

CDMX, EL 16 DE JUNIO DEL 2022

Estos últimos conciertos en México habían sido una maldita locura, la energía del lugar era exactamente por lo que yo seguía haciendo música y programando conciertos, ver esos miles de rostros frente a mí coreando y gritando las canciones que yo creé era algo simplemente increíble y sorprendente. No quería dedicarme a hacer ninguna otra cosa, para esto había nacido.

Al principio incluso podía decir que tenían mucho miedo, a pesar de que tenía toda esa experiencia que los años y One Direction me había brindado. Pero ahora todo se siente mucho más ligero. Ojalá pudiera decir lo mismo sobre nosotros dos.

Anoche hice mi última llamada, esto de la distancia no es una cosa sencilla, es algo de hablar con él de madrugada antes de dormir sabiendo que él está despertando temprano y robándose horas de sueño solo para contestar mi llamada (2:30am a 8:30am hice mi tarea de conversión de husos horarios, eh eh ¿Que tal? A qué soy todo un máster.

Hoy es un día libre para hacer un poco de turismo, anoche entre todos decidimos ir a Teopihuicán, hay pirámides y se supone que a es algo jodidamente cósmico, una mierda así. Definitivamente será algo educativo, Harry siempre se queja de como ignoro todo lo que tenga que ver con historia y cultura y como siempre termino en algún bar o como esa boda en la que nos colamos, esa mierda fue bastante divertida, le diré a Harry que hagamos una de esas. Definitivamente volvería a casarme con él una y otra vez.

Nos llaman a desayunar y bajamos todos, Matt dice que nos preparemos para salir del hotel a las 3:00 de la tarde. Regreso a mi habitación para darme un baño, esperando que me haga despertar completamente. Estos días han sido una maldita gran locura. El primer concierto fue todo un maldito espectáculo. No puedo esperar para volver y ni siquiera me he ido, es simplemente algo inigualable.

En mi maleta solo quedan cinco mudas de cada cosa. Helen dijo que iba a venir a decirme cuál era el de hoy, pero se está tardando y yo ya soy un hombre adulto y creo que puedo manejar la situación y tomar buenas decisiones.

—¡Louis tenías que esperarme, ese conjunto es para el show de mañana!— voy saliendo de mi cuarto y ya me están gritando. ¿Por qué son así?

—Este está increíble, es fresco y es el único conjunto que tengo en par. Será bueno tomarme unas fotos con él, a Harry le gustará. Además ya me lo puse, que flojera cambiarme. Vamos, se hace tarde.

—¡Y llevas los tenis blancos!

—Si, se van a ensuciar más fácil y le demostraré a Harry que puedo subir una maldita pirámide, no es la gran cosa.

Tenía un boleto en la mano que me habían dado en la entrada. Tenía una pirámide dibujada, se veía bonita, la fecha y un folio. Lo voy a guardar en mi cartera y le pediré a Harry que haga algo con el. Usualmente los manda a hacer llaveros o cosas de esas manualidades. Son bonitos.

—¡Y llegamos! a la emblemática pirámide el sol con sus 238 escalones y una altura de 65 metros.— exclamó de forma bastante energética la guía que nos daba el recorrido.

No, ni madres, yo no subo eso ni a patadas.

—Woolsey, cargame— le dije, dándole mis brazos estirados, yo podría subir esa cosa, es solo que eso me dejaría demasiado agotado y no pienso gastar energías que puedo ahorrarme. Soy un hombre rápido, no es escalador experto.