Capítulo 3

11 2 0
                                    

El clima cambió muy rápidamente, el clima aquí en Murder era todo un caos, si hoy el día era soleado, mañana estaría granizando, era como si hubiesen averiado el clima, y a decir verdad prefería soportar los extraños climas del pueblo y no la mirada acusante que me daba Brie justo ahora.

—¿Qué demonios pasa contigo? —pregunté por lo bajo para que la maestra no nos escuchara —todo el día has estado ignorándome

—"Con gusto chocaría una y otra vez contigo, lindura" —imitó la voz de aquel chico rubio de hace medio día —¿enserio Lexy? Ni siquiera sabes quien es ese chico

—Cálmate histérica, no eh cruzado palabras con el

—Bien, bien olvidémonos del misterioso chico que evidentemente cayo en los encantos de las Fell

—¿Encantos de las… Fell? ¿Tú también estas con eso?

—Mira Lexy, ese chico no me dio buena espina —se acerco más a mi, ignorando mi segunda pregunta y susurro —aléjate de el

—No puedo alejarme de alguien a quien no conozco, así que deja de hacer dramas Brie

La clase termino y Brie seguía con su drama hacia aquel chico desconocido, que por cierto jamás lo había visto en el pueblo, ya que en el pueblo todos conocían a todos y a ese chico, nadie lo conocía.

Brie seguía —por alguna extraña razón— enojada conmigo, así que las pocas horas que estuve en el instituto, las pase sola en las gradad, viendo a Brie pasar el día con Scott, si con Scott, con el mismo chico al que siempre a odiado y lo a tratado de un idiota hormonal, pero aún así, allí esta coqueteando con el la muy maldita.

Decidí alejarme de las gradas para no seguir viéndolos, así que caminando lo más rápido posible de allí, me dirigí a la salida para irme de una vez por todas a casa, quería ahogarme con mi almohada, había tenido un maldito día pésimo, casi me asesinan, discutí con mi hermana, vi el cuerpo sin vida de Chris, discutí con Brie y ahora ella le coqueteaba al chico que me gustaba, solo faltaba que una paloma me defecara encima.

—¿Ya viste? Encontraron otro cadáver a la orilla del lago —murmuraba una chica —el pueblo ya no es seguro

—Dicen que hay otro en el interior del bosque

—¿Creen que sea el?

—No es posible, el vivió hace un siglo, una persona normal no vive tanto —disimuladamente, opte por sacar mi teléfono y fingir que hablaba con alguien, si, quería escuchar más —El degollador de Murder esta muerto

—¿Cómo explicas las matanzas? Es el mismo patrón, lo eh investigado y coinciden

—Quizá sea un imitador

—Lo que sea, debemos avisarle a los de la asamblea

—¿Crees que sea necesario?

—Nos enfrentamos a algo grande, a un asesino descontrolado, nuestros chicos corren riesgo aquí

Murder Hill tenía una historia sangrienta muy rica, se dice que hace un siglo existió en este pueblo anteriormente llamado Sunny Hill, un asesino en serie muy peligroso, se podría decir que teníamos a nuestro propio destripador, pero claro, el degollador de Sunny Hill, como fue apodado, se valía por degollar a sus víctimas hasta vaciar su sangre hasta la ultima gota, para luego dejar sus cuerpos sin vida en lugares públicos, muchos dirían que era algo muy estúpido ya que dejar en evidencia sus crímenes no era inteligente, pero hay esta el error, durante el siglo XX el degollador de Sunny Hill, asesinaba sin piedad, pero su trabajo era impecable, ni un solo rastro dejaba en sus víctimas, algo que hasta el día de hoy—en realidad hace un mes—se volvió a ver, los pueblerinos de Murder Hill, susurran y murmuran sobre el degollador, pero lo cierto es que el degollador murió a finales de 1947. Lo extraño es que nunca encontraron su cuerpo sin vida, por ello es que los miembros de la asamblea—que era “secreta” por supuesto—creen que quizá se trate de la misma persona, pero yo pienso que es una copia del antiguo degollador, sea lo que sea, Sunny Hill perdió toda su vida y desde entonces, tras tantos asesinatos, el pueblo adopto el nombre de Murder Hill.

Peligrosa tentación [En curso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora