El olor a miel y chocolate invadieron sus fosas nasales, era reconfortante, de joven solía venir a menudo a casa de KyungSoo y comer junto a su abuela. Se encontraban sentados en la mesa, con el plato de comida servido, JongIn lo observó con detenimiento y al primer bocado no pudo evitar soltar una lágrima. Recordó el funeral de la abuela Do, y como KyungSoo pasó los siguientes meses llorando desconsolado, pero ahora ahí estaba frente a él, con una tierna sonrisa en el rostro y hablando de las cosas más simples de la vida. Reflexionó acerca del tiempo, de lo rápido que pasa, de los que se van de nuestro lado.
—¿Qué sucede? ¿No te gusta la comida?—preguntó la mujer en tono triste, JongIn dio un trago amargo y negó con la cabeza.
—¡No, no! No es eso—explicó—, el sabor de su comida es muy familiar al de una persona que quise mucho. Me ha traído muchos buenos recuerdos.
—Hijo lamento escuchar eso, estoy segura que esa persona está muy cerca de ti todo el tiempo.
—No tiene ni idea.—murmuró con una sonrisa y llenó su boca con un segundo bocado, Maddie estaba en completo silencio, disfrutando la maravillosa comida que tenía al frente— ¿Te gusta mucho no?
Ella asintió.
—¿De dónde vienen?—cuestionó KyungSoo. Ya había terminado su porción, y lo único que quería hacer era interrogar lo más que pudiese a sus nuevos invitados. Muy en el fondo sabía que tenían algo extraño, pero no era para nada atemorizante, más bien, podría decir que se sentía ligeramente atraído.
—Londres.
—Canadá.
Tanto Maddie como JongIn dieron una respuesta completamente diferente, se miraron por unos segundos, KyungSoo frunció el ceño y dándole un vistazo a su abuela se encogió de hombros.
—Quiero decir, venimos de lugares diferentes, es que trabajamos para la misma empresa. —dijo Maddie después de tomar casi por completo el vaso de jugo— Nos han mandado a una investigación de campo, quieren abrir una sucursal cerca.
—Ya veo. —frunció sus labios y miró a JongIn fijamente— ¿Son pareja?
La abuela de KyungSoo lo miró seriamente y dándole un pequeño toque en el hombro se disculpó por el atrevimiento de su nieto, JongIn sonrió nervioso y sintió como una oleada de calor se extendió por todo su cuerpo, no podía evitar pensar en su esposo celoso, lo extrañaba mucho.
—Oye, ¿lo has visto a él y me has visto?—soltó Maddie alzando una ceja, las tres personas en la mesa la miraban con atención— Obviamente no, tengo mis estándares muy altos.
La señora Do se tiró una carcajada acompañada de unos aplausos, parecía que había escuchado la frase más divertida de toda su vida. KyungSoo por su lado, parecía feliz con la respuesta que escuchó. La noche avanzó lentamente, los cuatro charlaban sobre la ciudad, sobre trabajo y también sobre la escuela de KyungSoo, la señora Do ofreció el cuarto de huéspedes a Maddie, y le sugirió a JongIn quedarse con su nieto, tenía en el sótano una cama inflable para él.
—Te juro que si le haces algo, te asfixiare con mis manos.
—Oye, es mi esposo del que estás hablando.
—No. Estoy hablando de un adolescente de quince años que apenas está por experimentar su primer amor con tu versión joven. No lo arruines por tu propia cuenta. Buenas noches JongIn —le recordó Maddie, cerró la puerta de la habitación de golpe, dejándolo solo en el pasillo del segundo piso.
Ella tenía razón, no podía darse el lujo de pretender que todo funcionaba según lo que ya había vivido, las cosas podían cambiar, incluso para peor.
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Back To You.
FanfictionKim JongIn tenía una vida tranquila, aunque siempre pensaba en el pasado y las cosas que haría si pudiese cambiarlo. Un inesperado encuentro lo llevó a cometer el mayor error de su vida y se dio cuenta que todas las historias, cómics y películas qu...