Capítulo 3

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—¿Hasta cuando será el día en el que dejaremos de pasar cosas desastrosas como esta?.— río Evie al entrar en su habitación que compartía con Mal, entrando junto a la última mencionada

Ambas jóvenes reían juntas y soltaron sus manos al estar dentro de la habitación, ambas estaban empapadas de agua a causa del incidente que Uma había provocado en el baile real, la mismísima que había logrado escapar de la isla de los perdidos en una oportunidad e también usó el libro de hechizos de Mal para hipnotizar a Ben con un hechizo, hechizo que fue roto por un beso de la pelimorada.

Aún así Mal luego del beso no sintió nada, solamente funcionó milagrosamente a pesar de que esta dudará de sus sentimientos, observo a Evie la cual se quitaba los tacones y su tiara hecha por Dizzy. Sonrió al verla tan radiante a pesar de que estuviera empapada de agua de mar.

—Quien sabe, no es primera vez que nos enfrentamos a este tipos de cosas.— río un poco dándose media vuelta —¿recuerdas el día de la coronación?.

—Si, Dios, hasta podría jurar que Maléfica es mucho peor que Uma ya que ella lanzaba fuego y talvez nos podría comer con esa gran boca de dragón.— murmuro Evie riendo más volteando a ver a Mal que estaba de espaldas —¿Te ayudo con el vestido?.

—Si, por favor si no es molestia, E.— Mal le sonrió y sintió como Evie se ponía tras suyo, la peliazul bajo lentamente el cierre de la puerta de atrás de su vestido

Al fin podría estar con ropa más cómoda. Fue el único pensamiento que apareció en su cabeza, en cuanto Evie termino de bajar el cierre de su vestido, la pelimorada dejó caer la prenda por completo quedando solamente en ropa interior negra.

—Muchas gracias, E.— dijo volteandose pensando que la chica que ojos marrones se había ido por su parte, pero no. Ella siguió ahí, está vez quedando frente suyo

Mal se puso nerviosa al instante al haber rozado por accidente su nariz con la de Evie, quedó extrañada al notar que esta se le quedaba mirando atenta, sintió como la analizaba e detallaba con la mirada de arriba abajo.

No supo que decirle a su mejor amiga en ese instante, ya que la peliazul tomó la barbilla de Mal suavemente y la acarició, tacto que a la oji-verde le agradó pero se extraño un poco por la acción de esta.

—No es nada...— habló Evie sonriendole un poco

—Evs...— murmuro la pelimorada viéndola fijamente intentando ocultar sus nervios

—Mal... tú cuando besaste a Ben... quiero decir...— susurro Evie pensando un poco —¿Tú sentiste algo de verdad?...— pregunto esta mirandola

—Solo sentí la necesidad de salvarlo de ese hechizo... luego de eso no sentí nada más...— respondió Mal mirandola, tenía que ser sincera con Evie, no podía mentirle, últimamente lo que sentía por Ben ya no era lo mismo, quizás ni siquiera sé enamoró de él en verdad

Ese sentimiento de que le faltaba algo seguía dentro de ella, se engañaba así misma, aún si las cosas estuvieran bien con Ben eso no cambiaba el hecho de que la pelimorada no estaba siendo sincera con sus verdaderos sentimientos en ese momento, en la isla podría decirse que a pesar de estar en un lugar oscuro sin lujos, lo único que le gustaba en ese sitio era estar con Evie, pasar tiempo con ella a solas, de cierta forma ella... había vuelto a tener esos sentimientos que alguna vez tuvo en la isla por su mejor amiga, esa atracción.

—Entonces... no sentiste amor del todo en ese beso...— preguntó Evie siguiendo mirando a su mejor amiga fijamente

—No...— negó sincera mordiendose levemente el labio inferior, por alguna razón sentía esa tensión nuevamente, tener a Evie cerca no ayudaba a controlar sus impulsos ocultos por años —Evie... ¿Tú sigues sintiendo cosas por Doug?...

El silencio se hizo presente por un momento, la peliazul seguía mirando a la oji-verde, sus pupilas se habían dilatado como las de Mal, la más mayor acarició suavemente el labio inferior de su dragón morado, Evie se había dado cuenta de la mirada que Mal le dedicaba, ya no era la misma de antes, era diferente, en ellos solo veía unos brillos los cuales nunca había visto cuando la pelimorada miraba a Ben, su mirada era tan única que provocó un leve cosquilleo en su estómago.

—Con él no me siento satisfecha.— murmuro Evie con sinceridad acercándose más al rostro de Mal sin pena

Su respiración se había vuelto más pesada a medida que rozaban sus labios y narices, la descendiente de Maléfica sonrió sin poder evitarlo y se acercó más al rostro de Evie acortando la distancia, cuando iban a unir sus labios la puerta fue abierta abruptamente, por lo que ambas se separaron rápidamente y observaron al visitante sin aviso por la habitación.

—Evie, te estuve buscando por todos lados, a muchos les gusto los vestidos que hiciste para el baile real.— comentó Doug con una sonrisa aunque notó como Mal estaba solo en ropa interior y brasier, lo cual confundió al chico que estaba a punto de preguntar que era lo que sucedía ahí, pero fue interrumpido por la hija de Regina Mills

—Pudiste habermelo dicho por mensaje, pero gracias por el aviso Doug.— habló Evie con tranquilidad como si nada había estado a punto de pasar en la habitación

—Si bueno, los noticieros quieren entrevistarte, vamos Evie, es tu oportunidad para que tu negocio sea más conocido.— Doug intentó tomar la mano de ella, pero esta lo evadió dejando un minúsculo roce e salió de la habitación, últimamente las cosas entre ellas y Doug no habían estado bien, incluso tuvieron una mini discusión cuando la descendiente de la reina malvada llegó devuelta a Auradon después de los acontecimientos en la isla

—Vete adelantando, ya te alcanzo.— dijo ella y Doug algo extrañado por la acción de Evie haciéndose el desentendido le hizo caso

Luego de eso Mal miro sorprendida a Evie por como ella evitó a Doug con la elegancia que la caracterizaba desde que la conoció, por su parte la joven princesa villana observó a Mal con una pequeña sonrisa ladina.

—Evie...— murmuro Mal pero luego torció sus labios en una mueca, en señal de que quería reír allí mismo

—Vuelvo en un rato, M. Nos vemos.— Evie le guiño el ojo y seguido de esto cerro la puerta con suavidad

La oji-verde se sentó lentamente en la cama y luego una risilla llena de felicidad y satisfacción salió de sus labios, se recosto en la cama y siguió riéndose sin poder evitarlo de la emociones que sentía, en este caso reía de esa manera tan risueña porque Evie indirectamente le haya dado a entender tanto por la cercanía anterior, como también el como evadió a Doug que algo pasaba entre ellas, algo diferente pero correspondido.

Cuando Mal soltó un suspiro tranquilo mientras dejaba mostrar una gran sonrisa tranquila y emocionada a la vez, por fin entendió un poco que nunca fue Ben.

Siempre fue Evie y siempre lo será.




















If Only | Mevie ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora