If Only | Mevie ✓

Capítulo 6

Todo era perfecto, como un sueño hecho realidad, Mal jamás se había sentido tan feliz de haber recibido ese beso de Evie, el tacto tierno pero a la vez suave de sus labios la tranquilizaban.

Claro que...

Despertó de ello volviendo a la realidad.

—¿Mal?.— alguien chasqueo sus dedos frente a ella y la pelimorada se sobresalto, ella volteo a ver a Ben quien llegó a su lado hace tiempo

—¿Ben?.— murmuro ella desorientada y luego notó los binoculares que traía en sus manos, abrió los ojos al darse cuenta que todo lo bonito que había pasado solo era un traicionero sueño creado por su propia conciencia por no haber dormido bien estos últimos días en los que se la pasaba vigilando a Uma luego del incidente del baile

Se miro a si misma y también a su alrededor, estaba en la estructura en el castillo viendo el océano y traía puesto irónicamente un vestido, como una típica princesa de los cuentos de hadas.

Cayendo en cuenta que su vida era diferente a lo que soñaba despierta.

—¿Que ocurre?.

—¿Que ocurre de que?.— preguntó la pelimorada viendo al chico

—Vine aquí a verte y te pregunte que que era lo que hacías, pero no me respondiste nada hasta no tercer llamado.— explicó Ben observandola

—Oh si... yo... estoy viendo algún indicio de tentáculos en el mar...— respondió sin más arrugando su nariz frustrada e intento ver con los binoculares el océano, pero Ben le quitó el objeto

—Mal no te tienes que preocupar por eso.— habló el descendiente de Bestia viéndola —Hay guardias vigilando el océano.

—No creo que sea suficiente, sería más facil si me convirtiera en dragón ahora mismo para ver más allá que con estas cosas.— respondió la chica refiriéndose a los binoculares

—Traere más guardias si con eso te sientes segura, no puedes estar todo el día aquí vigilando si hay algún indicio de Uma por el océano.— respondió Ben —Y creo que si Uma tuviera algo en mente ya lo sabriamos.— el muchacho intentó convercerla y la chica solamente soltó un resoplido

—¿De verdad enviaras a más guardias aquí?.— preguntó Mal mirando al joven rey y este asintió

—Si es lo que te hace sentir más tranquila, lo haré.— murmuro el chico tomando la mano de su pareja —Ahora sigueme necesito mostrarte algo.— le sonrió dulcemente

—¿Otra sorpresa más?.— Mal río un poco mientras negaba —No te cansas de hacer eso ¿verdad?.— siguió resignada a Ben, porque después de todo, sabía que el chico aún así le seguiría donde este tipo de detalles

—Nunca me cansaré.— Ben le sonrió a esta y la oji-verde solo intento dedicarle una sonrisa, aunque fuera forzada

—Ben ya te dije que no es necesario que me des más regalos... además necesito hablar contigo sobre lo nuestro...— ella saco el tema del que quería hablar con su pareja hace meses, pero este no la escucho y negó

—Luego hablamos de eso, primero quiero mostrarte la sorpresa que te tengo.— respondió el chico sonriente y Mal solo soltó un suspiro pesado

—Esta bien.— se dignó a decir ella mientras una pequeña mueca aparecía en su rostro

La pareja real camino durante unos minutos, que parecían largos para la pelimorada, ella tan solo se quedaba pensando del porque tenía esos sueños recurrentes estando despierta, esos tipos de escenas que tenía sobre ella y Evie, no le molestaba, pero le dolía que no fuera real, lo real aquí de todo esto más allá del sueño, era que con el tiempo de verdad su atracción hacia Ben se fue desvaneciendo estos meses, ya no lo quería de esa manera y cada vez que la descendiente de Maléfica intentaba hablar con él sobre su relación, este solamente le decía que estaba ocupado y hablarían después, conversación que nunca jamás hubo entre los dos, como ahora que el muchacho castaño evadió el tema con la excusa de la sorpresa que quería mostrarle.