Just the two of us

¿Música?

Narra Alisson

Lunes 26 de febrero.

El jueves fue la cena de mi padre y desde esa noche no veo a Bil.

Pero hoy tenemos instituto y esta tarde tengo clases con Lili, así que lo más seguro es que la vea.

—Mocosa de mierda, llegamos tarde —dijo mi hermano entrando a mi habitación.

—¿Puedes esperar? Me quedan solo los zapatos

—En dos minutos te quiero subiendo al coche, te espero en la puerta —respondió cerrando.

Rápidamente terminé de ponerme los zapatos y anillos, agarre mi mochila, bajé y salí corriendo de casa.

Mi hermano estaba en la puerta ya esperando con el coche.

Por el camino hablamos de que este viernes 2 de marzo había una fiesta para dar inicio a un nuevo mes en casa de Luke, un amigo de mi hermano.

Llegamos al insti y justo sonó el timbre , no me daba tiempo a ir con el grupo como cada mañana así que fui corriendo a mi taquilla y directamente a clase.

Me tocaba ciencias con Chloe.

—No has venido antes, ¿todo bien? —dijo cuando me senté.

—Si, es que justo he llegado y el timbre ha sonado así que no he ido a buscaros. —respondí.

—Pensábamos que estabas con Billie.

—No la he visto, ¿No estaba con vosotros?

—No, quizás no ha venido, pero es raro porque ella siempre viene, este sitio es su distracción.

—Señoritas, dejar de interrumpir mi clase —dijo la profesora llamándonos la atención a mi y a Chloe — A la próxima iréis con en director.

Ninguna de las dos dijo nada y comenzamos la clase.

Me quedé pensando donde podría estar Billie, poco después se me ocurrió pedir ir al baño para buscarla.

—Señorita Amber— dije llamando la atención de la profesora.

—Dime Williams

—¿Puedo ir al baño?

—Por supuesto —respondió.

Salí de clase y lo primero que hice fue ir al parking y efectivamente, el coche de Billie estaba, eso quería decir que ella también.

Por un momento me puse a pensar que podía estar en el campo de fútbol, pero al llegar solo estaban los de cuarto grado haciendo educación física.

Después me acordé de que el día que nos castigaron a ambas ella estaba en una sala de baile besando a Nina, así que pensé que podría estar ahí bailando.

De camino a la sala de baile pasé por la de música, y una melodía que sonaba en ese instante me obligó a parar y quedarme en la puerta.

Era Billie tocando el piano y cantando.

La canción terminó y comenzó a recoger sus cosas, cuando se levantó me vio en la puerta y se quedó quieta.

—¿Cuanto llevas aquí? —dijo.

—Suficiente para haberte escuchado —respondí entrando en el aula.

Las ventanas estaban abiertas y la puerta se cerró del impulso de la brisa del aire.

—¿Has oído algo?

—Toda la canción Eilish —dije.

—Ni se te ocurra decir ni una sola palabra, o yo hablaré de tus diseños.

—¿Como sabes eso?

—Cuando fui a tu habilitación el otro día los vi, así que, ya sabes.

—¿Me amenazas?

—¿Te sientes amenazada? —dijo acercándose a mi.

Yo también me acerqué a ella hasta llegar al punto en el que nuestras bocas estaban a milímetros.

—Te dije que no te librarías Williams.

Seguidamente me besó, y no como hacía normalmente, ese beso tenía deseo.

Billie agarró de mi cintura y me subió encima del piano mientras seguíamos con el beso.

Por falta de aire nos separamos y nos miramos por un segundo.

—¿Puedo? —dijo.

—Hazlo —respondí.

Volvió a besarme y noté como su mano iba recorriendo todo mi cuerpo hasta llegar a mi zona.

Metió la mano por la falda del uniforme, seguidamente por mi ropa interior. Comenzó a jugar con mi zona hasta que por fin se decidió.

El contacto de sus dedos con mi interior provocaron un gemido en mi, uno por el cual Billie sonrío al saber que era ella la que lo provocaba.

Pero eso no iba a quedar así, yo también me podía jugar.

Billie estaba muy pegada a mi, así que aproveche y sin que se lo esperara comencé a tocar su muslo como podía ya que ella estaba de pie, y cuando menos pensaba que lo haría, llegue a su zona y sin necesidad de jugar un poco para que aguantara las ganas, metí mis dedos provocando que ella acelerara su movimiento.

Ahora el único sonido en esa sala eran nuestros gemidos y nuestros dedos entrando y saliendo.

Llegó un punto donde ninguna podía más y sin esperarlo nos corrimos a la vez, pero eso no fue todo.

Seguidamente Billie comenzó a besar mi cuello, después se agachó, volvió a jugar un poco con mi zona, después alzó su mirada a mi.

Asentí con la cabeza sabiendo que quería y sin pensárselo se adentró, segundos después pude notar como su lengua y mi zona hacían contacto.

Puso una mano en mi espalda y aceleró el movimiento con su lengua provocando que arquee mi espalda.

—Dios —dije.

Poco después, cuando ella seguía sujetándome de la espada volví a correrme.

Después de eso ella salió de mi falda y me besó nuevamente.

Esta chica es increíble.

Cuando nos separamos ella subió al piano conmigo y nos quedamos sentadas como si nada hubiera pasado.

Decidimos volver a clases aunque ya era hora de comer.

El resto del día terminó bien, comimos , fuimos a clases, me ayudó a darle matemáticas a Lili y después me fui a casa.

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Como ya sabéis no estoy muy acostumbrada a hacer estas escenas, por el simple echo de que no es que me salgan muy bien, pero quería poner algo diferente ya que en cada historia lo intento, gracias por leer y espero que estéis bien . 🤍