Vicio 2 .Lyanno & Myke Towers.

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📍 San Juan, Puerto Rico

- Myke ¿Qué tal tus vacaciones de un día? - bromeó Bryan en la silla frente a mí.

- ¿Mucho le extrañaste? - le lance un beso y él un bolígrafo con que estaba jugando y luego me mostró el dedo del medio.

- Vacaciones o no pero si que chicho cabrón - río Wa a mi lado, le seguí y chocamos las manos.

- Cabrones - Bry nos miró mal.

- ¿Aún no a curado la herida de tu corazón? - dijo Myers al lado de él sonriendo.

- ¿Tú también? - lo tomó de su camisa levantándose de su silla dispuesto a golpear su cara.

- Ay, no ¡Bry, no lo hagas! - fingió estar asustado Myers.

La puerta del despacho de Don Edgardo se abrió de repente.

- 15 años después y siguen siendo los mismos pendejos de siempre - Don Edgardo entró negando repetidas veces.

- Tenemos que haces ésto más divertido, patrón - dijo Wa.

- Un día Bry de verdad los matará si siguen bromeando con Sofía - de sentó al frente en su gran silla.

- Gracias - dijo Bry.

- No a mí - dije.

- Serás el primero - afirmó Don.

- Tienes 7 vidas, es un gato - referenció Myers.

- Bueno al menos que quiera matar a su... cuñado.

Todos me miraron confundidos.

- ¡¿Se van a casar?! Ya era hor - preguntó Myers quien recibió un codazo fuerte de parte de Bry.

- No - del bolsillo de mi mahón saqué la prueba de embarazo y la coloqué encima de la mesa.

Los tres se acercaron a ver lo que decía la prueba.

Recibí felicitaciones de Myers y Wa pero Bry tomó la prueba entre sus manos mirándola bien.

- Myke - dijo el Don, lo miré - Co-rré.

Bry grito fuerte y se levantó sacando su arma de la parte delantera del borde de su pantalón y correa.

Reí y me levanté para salir corriendo del despacho escuchando el sonido de las balas a mi espaldas.

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LYANNO

📍 Caracas, Venezuela

El doctor terminó de examinarme y apuntó algo a su computadora.

- ¿Ya puedo manejar? - mirándolo.

- ¡Edgardo! - reprochó Flor.

- Ma, no pasa nada. Estoy bien, seguí todo el tratamiento al pie de la letra, ya puedo caminar solo, lo hago bien normal como todos los demás, puedo ponerme la ropa solo, ya está hecho ¿Qué más quieren aplazar mi recuperación? Doctor... - lo miré suplicando - Vea le prometo que ya no seré un loco que hace las cosas sin pensar, seré más precavido está vez.

El se quito sus lentes colocando toda su atención.

- ¿Seguro que estás bien?

- ¡Si!

- Jumm - asintió y volvió a colocarse sus lentes y volver a ver su computadora.

- ¡Quieres callarte ya y esperar lo que dirá el doctor! - mamá dijo entré dientes.

- Diablo - giré los ojos y me senté en la silla frente a su escritorio.

Luego de unos minutos por fin habló.