Segunda parte de "Nada es Gratis". Tienes que leer primero la primera parte para entender está secuela.
los personajes no son de mi autoría. Pertenecen al juego "Genshin Impact".
Crédito de la portada a /Chalseu_D en Twitter.
La historia es +18, a...
Al ya estar en el suelo, Xiao vio como Tartaglia se llevo las manos a su rostro, pudo ver cómo partes de la máscara caían en pedazos.
Xiao pudo por fin, ver su rostro.
Definitivamente era él, era Tartaglia, pero con algo muy llamativo y tenebroso que Xiao no pudo pasar desapercibido.
La máscara dejo ver uno de sus ojos.
El ojo que se podía ver estaba completamente negro, oscuro, totalmente corrompido por el Abismo.
Xiao dió unos pasos atrás, ver su ojo de esa forma le provocó escalofríos.
Su nuca quemaba de la ansiedad, transpiraba del terror.
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Una vez que conoces el horror todo cambia, y el Adeptus había estado cerca del horror más de una vez. Y aunque se quiera olvidar, el resto de sus días lo recordará. El horror quedó incrustado en su cerebro, y el puede taparse los oídos pero el sonido sigue ahí, los gritos siguen ahí, no se callan. Aunque mire para otro lado, estará allí, recordándole todo aquello que no desea recordar.
Y lo que acabó de ver, era claro y definitivo: Tartaglia estaba totalmente corrompido por el abismo.
Es imposible deshacerse de la corrosión.
Tartaglia en el legado del mal se puso de pie, y alzando su cabeza hacia el cielo, apretó los puños con fuerza y descargo una avalancha de poder Hydro y Electro.
Xiao fué más rápido, gracias a su estilo de pelea chino y a los años de guerra que lleva encima. Y dió un salto tan alto que por poco lo agarra la avalancha.
El Adeptus de nuevo cargo energía elemental a sus piernas para deslizar un ataque descendente, y caer con todo su cuerpo arriba del corrompido.
Al caer encima de Tartaglia, el pudo ver cómo su cabeza rebotó estruendosamente contra el suelo.
Haciendo que su máscara se quiebre en pedazos, dejando expuesto completamente el rostro del Fatui.
— ¿Pero qué...? — Xiao no podía creer lo que estaba viendo en este momento.
Uno de los ojos de Tartaglia, cómo ya sabemos, estaba completamente negro, consumido por el abismo.
Pero su ojo izquierdo...
De su ojo izquierdo era el que todos conocemos, con su color azul apagado, pero de el no paraban de caerle lágrimas.
Era evidente, aquí se hizo presente el 1% de esperanza que había.
Tartaglia aún conservaba un poco de su humanidad en su alma.
Es el duelo entre la luz y la oscuridad, dónde el corazón de Tartaglia es el campo de batalla.
La humanidad es como es. No se trata de cambiarla, sino de conocerla. Existe en todos nosotros un fondo de humanidad.
— ¡FATUI, REACCIONA! — Xiao tomo el primer impulso de correr hacia él.
