ANIMALOS

CAPÍTULO 7. " ¿Quien Es Amanda? "

Hoy es un día soleado los pajaritos cantan y en el cielo no hay ninguna nube gris. Linda se levantó muy animada y emocionada, salió brincando de su cama gritando de alegría y rápido fue a buscar a su hermana Rita a su cuarto.

Linda: Despierta, ¿sabes que día es hoy?

No obtuvo ninguna respuesta de su hermana por más que tocó la puerta, volvió a tocar la puerta y al no obtener ninguna respuesta, entró a su cuarto. El cuarto de Rita estaba muy desordenado a Linda no le importo y fue directo a su cama y se puso a saltar de la emoción, gritando de alegría.

Rita: ¿Que te pasa?

Linda:¿Si sabes que día es hoy no?

Rita: Mmmmmm, no se viernes. Linda al escuchar la respuesta de su hermana esbozo una pequeña sonrisa y dijo:

Linda: No, en primer lugar hoy es miércoles y es un día muy especial por que hoy es nuestro cumpleañooooos.

Rita: ¿y?

Linda: Te parece si invitamos a todos nuestros amigos a que vengan a nuestra fiesta.

Rita: No creo que nadie venga, en primera ni tenemos muchos amigos y en segunda han de estar muy ocupados haciendo cosas más importantes que ir a fiestas.

Linda: Bueeeeeno, no hay nada que perder, asi que levántate. (Diciendo esto levantó las cobijas dejando expuesta a Rita. La tomó del brazo y la arrastró hacia la tina donde la baño.

(Rita no puede bañarse por sí misma). Mientras Linda tallaba a su hermana noto que empezó a sollozar, pero Linda no le tomó importancia, al terminar con una tolla seco su carita de su hermana.

Linda: Que bonita eres.

Rita: No digas tonterías. Tu también eres muy bonita, por que técnicamente tenemos la misma cara, somos gemelas. Linda al escuchar eso sonrió y emitió una pequeña risita que incómodo a Rita.

Después de bañar a su hermana, Linda se baño y se arreglo, al terminar fue al almacén y sacó una canastita con invitaciones, tomó a su hermana de la mano y salieron a la calle.

Caminaron un buen rato buscando a sus amigos.

Linda: Esta muy bonito el día no es así. Su hermana no le contesto. Siguieron caminando agarradas de la mano, hasta que vieron a Margarita.

Linda: Hey Margarita, espera.

Margarita: Hola niñas ¿como están?

Linda: Muy bien, ¿sabes que día es hoy?

Margarita: Mmmmm, miércoles.

Linda: Si, pero además es nuestro cumpleaños.

Margarita: Enserio, felicidades. Abrazo a ambas, mientras las felicitaba.

Linda: Te invitamos a nuestra casa, por que abra una gran fiesta ¿Vienes?

Margarita: Lo siento, no voy a poder ir, tengo que hacer mi tarea.

Rita: Pero si tu no vas a la escuela.

Margarita: Perdónenme pero me tengo que retirar. Diciendo esto se marchó.

Rita: Ves te dije que nadie vendría a nuestro cumpleaños.

Linda: Oh, vamos todavía falta ir con Oso a preguntarle.

Rita: Luego a quien le quieres ir a decir, Oso no va a venir y tu sabes el porqué, mejor no perdamos el tiempo y ya vámonos que ya está atardeciendo.

Linda: Tal ves, si tengas razón.

Ambas se fueron a su casa, y al llegar Linda se puso a decorar la sala y sacó del refrigerador un pequeño pastel de chocolate, al terminar de acomodar todo llamo a su hermana.

Rita: ¿Y ahora que quieres?

Linda: Vamos a cantar las mañanitas.

Rita: Para que, si ya te he dicho muchas veces que los cumpleaños son solo un día mas (ella noto que en el pastel había 3 velitas, le incómodo un poco, pero con su actitud de siempre le preguntó el por qué sólo había 3 velas).

Linda: A caso no es obvio, las velitas nos representan, una es por ti, la otra es por mi y la tercera es para Aman...

Rita: ¡CALLATE!¡NO REPITAS SU NOMBRE!

Linda: ¿Por que no?, es nuestra hermana y aunque no cumple el mismo día que nosotros, la verdad ya no me acuerdo cuando cumplía años, solo se que hay que festejarlo también. Dijo esto con una débil sonrisa y la voz a punto de estallar en llanto.

Rita: No, no es cierto, ella nunca existió, sólo es un producto de tu retorcida imaginación.

Linda: ¡Claro que existió! Pero tu no te acuerdas de ella.

Rita: Sabes que, mejor me voy a mi cuarto y no me molestes en todo el resto del día. Se dirigió corriendo a su cuarto y al llegar azotó la puerta y cerrando la con llave.

Linda se quedó sola, en una sala muy grande y solitaria, su rostro reflejaba una gran desolación y desconcierto.

Linda: Pero... Ella si existió, me rehusó a creer que solo sea un producto de mi imaginación, de ser solo eso, entonces...

... Como pudimos escapar. Al terminar de decirse esto, se dejó caer al piso y rompió en llanto.