CAPÍTULO 12

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Eran las 5 de la mañana, todavía despiertos, pero muy cansados. Y aún así, Seb me tenía rodeada con su brazo mientras me daba besos por la espalda y el hombro.

SEB: ¿Por qué no me dijiste que sabías hablar Rumano?

T/N: Porque no preguntaste - se rio - Hay muchas cosas que no sabes de mi

SEB: Pues quiero saberlo todo de ti - dijo entre beso y beso - todo

T/N: ¿Y de ti, hay algo que todavía no sepa?

SEB: Sabes casi todo, aunque puedo hablarte de mi familia si quieres - la familia era un tema delicado

T/N: Cuéntame todo lo que tu quieras contarme

SEB: Quiero que lo sepas todo de mi - se colocó de lado apoyándose en el codo y yo hice lo mismo mirándole - La verdad no es mucho. Nací en Rumanía, y a los 8 años mi madre, Georgeta, encontró trabajo en Viena, así que nos mudamos allí. Cuando cumplí los 12 años, nos volvimos a mudar, esta vez a Nueva York. Mi madre conoció al ahora mi padrastro, Anthony. Y todo lo demás ya lo sabes - se me quedó mirando con una sonrisa - Cuéntame algo de ti que no sepa

T/N: Tengo o tenía una vida sencilla. Vivía sola, pero cerca de mi madre y mi hermano. Mis pasiones son escribir como bien sabes, luchar... Y en 2 meses comprobaré si actuar también es una pasión. Así era mi vida, sencilla hasta que me encontrasteis

SEB: Doy gracias todos los días por haberlo hecho - me acarició la mejilla y me besó - ¿Algo más que quieras contarme? ¿Cómo por ejemplo, ese Rumano tan perfecto que hablas?

T/N: Hablo 19 idiomas, más o menos - sonreí

SEB: ¿Más o menos?

T/N: Si, el Alto Valyrio y el Dothraki no los cuento - le dije en broma mientras se reía. La verdad es que ahora mismo no quería contarle nada más

SEB: ¿Qué te apetece desayunar?

T/N: Nada. Y la verdad, debería volver a mi habitación. Gala debe estar preocupada y además me dejé el móvil en mi habitación. Estará histérica

SEB: No, no lo estará - entrecerré los ojos - Antes de subir anoche, Fui donde estaban Gala y Tom y le avisé de que estarías conmigo. Supuse que querías que tu amiga no se preocupara por ti

T/N: Gracias por eso - incluso con el calentón de anoche, se preocupó y se acordó de avisarla por mi. Ni yo me acordé

SEB: ¿Qué quieres de desayunar entonces? - sonrió

T/N: Lo que pidas está bien, siempre y cuando haya café

El desayuno llegó pronto. Las horas que eran, la gente aún estaría durmiendo. Salimos a la terraza a desayunar mientras veíamos el amanecer. Estábamos ya los dos recostados, yo encima suyo, tapados con una manta viendo como asomaba el sol por el horizonte. Me sentía en ese momento inmensamente feliz. Esto es lo que siempre quise. Y solo tengo 2 opciones. Retirarme después de esta fantástica noche y despedirme de este maravilloso hombre que hacía que mis días fueran mejores, o confiar en el 100%, contarle todo, abrirme a él y que sea él quien decida si quiere estar conmigo. Ya que si tomo esta segunda opción, es porque yo si decido estar con él. Y si lo hago, será para siempre

Eran ya las 7 de la mañana y nos habíamos despedido ya varias veces. Estuve a punto de salir por la puerta cuando me agarró de la mano y me llevó de nuevo a su pecho, abrazándome.

SEB: ¿Por qué siento que cuando salgas por esa puerta, esto no se va a volver a repetir?

Al oír esa pregunta salir de su boca, se me paró el corazón. Me separé de él y acaricié su cara suavemente.

SIGUE TUS SUEÑOS (SEBASTIAN STAN Y TU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora