¡por favor haré lo que sea! ─ au jenlisa

27.

Una castaña con mejillas regordetas se encontraba ahí, en medio de la noche terminando de recortar unos papeles para dar por finalizado aquel proyecto escolar que le había dado tantos problemas en su vida en menos de unos meses.

Una playlist llena de boleros sonaba en la cálida habitación de Jennie. Después de todo a Seulgi le gustaban, y ella estaba en la habitación de Kim ayudándole a ordenarla.

Era su love lenguage, le ayudaba a limpiar mientras la más baja terminaba el trabajo.

Sus padres estaban en su habitación y tenían la confianza de que Jennie no haría escándalo ni nada indebido y habían empezado a acostumbrarse a ver a Kang frecuentemente en su hogar. Así que estaban pasando un buen rato juntas.

─¿No crees que es mucho trabajo Jenn? ─Preguntó mientras levantantaba unos papeles arrugados y los metía en una bolsa para basura.

─Valdrá la pena, Seulgi. Además sabes que aún tengo algo de sentimientos por Lisa. Esto me va a ayudar a poder darle fin a todo o tal vez abra una nueva brecha. ─Sonrió mientras cortaba más pedazos de papel.

La mayor la vió algo preocupada con miedo a que fallara o pasara algo, pero dicidió confiar en la palabra de Jennie así que le dedicó una suave sonrisa.

─Está bien, Jenjen. ─Se acercó y le dió un suave beso en la cabeza mientras seguía limpiando. ─Bajaré a ver si hay agua, tengo sed ¿Te traigo algo de la cocina?

─Agua también por favor.

─En seguida regreso. ─Y el sonido de la puerta cerrándose fue lo último que oyó.

Ella estaba decidida, terminaría eso de una vez por todas y podría empezar una nueva etapa. Y si había una muy pero muy pequeña posibilidad de que perdonara a Lisa, aún la quería mucho, pero quería enfocarse y quererse más a ella primero.

Jisoo le había asegurado que le avisaría a Lisa, así que todo estaba listo.

A lo largo de las semanas se había topado a la rubia en más de una ocasión, pero ésta siempre la ignoraba, así que hacía lo mismo. También la había visto convivir con Yeji en más de una ocasión pero parecía incomoda, así que se sentía algo aliviada de que no se viera con ella todavía.

Tenía planeado todo, estas semanas le habían ayudado a sanar un poco y pudo de alguna forma comprender a Lisa. Pero también entendió que valía mucho más que ello.

Toc toc

─Pasa Seulgiiii.

─Aquí está tu agua. ─Dijo mientras pasaba a la habitación.

─No necesitas tocar todo el tiempo.

─Me gusta respetar tu privacidad. ─Replicó mientras asentaba aquel vaso en el escritorio. ─Ve a descansar, te esfuerzas mucho, si quieres puedes decirme que falta y con gusto lo hago.

─Ay eres un ángel. ─Dijo para luego soltar un gran bostezo y estirarse. ─Mañana le agrego unos cuantos detalles no te preocupes ¿Te gustaría dormir de una vez? Apagaré todo.

─Claro, iré por el colchón inflable ¿Dónde lo tiene tu madre? ─Preguntó con total inocencia.

─¿Colchón? ─Mustió confundida mientras ladeaba la cabeza levemente.

─Sí, el colchón ¿Dónde lo tienen?

─No tenemos. ─Dijo aún confundida mientras empezaba a guardar todo lo que había sacado antes y también apagando la música.

─¿Cómo?

─Seul, ibas a dormir aquí conmigo. ─Dijo con una pequeña sonrisa para sentarse en su cama.