General jeon. KookV

quédate conmigo.

Se despertó un poco asustado por los pequeños sollozos que se escuchaban, volteó a ver a su general y vio que se encontraba despierto.

Rápidamente se incorporó y se acercó a chercarlo.

—General, ¿sucede algo?.—dijo viéndolo muy preocupado por las notables lágrimas de este.

—S-siento mucho calor...—Extrañado, toco su frente y rápidamente se puso en alerta.

Corrió a su escritorio y tomó una toalla y sirvió agua en un recipiente, para así acercarse al general.

Remojo la toalla en el agua para así después ponerla en la frente de su general.

El contrario cerró sus ojitos por el frío contacto con su piel.

—E-esta frío...

—Lo se, trate de aguantar ¿si?.—Dijo acariciando su mejilla izquierda con su mano libre.

Duro máximo veinte minutos así, hasta que con su termómetro vio que la temperatura bajó.

Soltó un suspiro pesado y checo la hora, eran las cuatro y media, tenía máximo una hora para dormir.

—Puedes...¿puedes dormir conmigo y hacerme mimos?.—Los ojitos del general  vieron los suyos con súplica.

Claramente debía negarse, pero debía de hacerlo si su corazoncito de pollo no lo dejaba razonar.

Se subió a la camilla y lo atrajo a sus brazos, para así empezar a hacerle mimos, mientras el contrario secaba sus lágrimas en su cuello.

Fue cuestión de minutos para que los dos cayeran en brazos de morfeo puesto que uno estaba cansado por que interrumpieron sus horas de sueño, y el otro por la anestesia.

-horas después-

—Tae, cariño.—Escucho mientras su cuerpo era movido suavemente.

Abrió lentamente sus ojitos y vio a su hyung seokjin con ojos cansados, mientras trataba despertarlo.

—¿Que?, ¿qué sucede?.—dijo parándose asustado.

—Nada, solo que no dejas que el general jeon se levante.—frunció el seño y rápidamente volteo hacia arriba de su cabeza, el general jeon se encontraba apresado entre sus piernas y brazos.

Con un sonrojo salvajemente rojo, lo soltó y se alejó.

—L-lo siento.—dijo haciendo una reverencia de 160° hacia el general.

Volteo inconscientemente al reloj que se encontraba en su pared y se asustó, eran las 11 de la mañana y tenía una junta muy importante con el director park jimin a las doce y media.