LOS SEIS REINOS: VALENCIA

CAPITULO 1. ÁRBOL DE SAUCE

Era uno de los mejores días en la historia de toda Valencia, hoy cumpliría sus 8 años el más grande de todos los hijos de Estefan, el rey del pueblo, lo que casi nadie sabía en ese momento es que ese día se volvería la peor de las pesadillas en la vida de los Storm... y todo a manos de los cazadores.

Se acercaba la noche y pronto llegarían los reyes y príncipes de los pueblos cercanos, todos los habitantes de Valencia se encontraban en la fiesta, y Estefan, el rey no se quedaría atrás, después de todo el cumpleañero era Matteo, el próximo gran rey de Valencia.

Su madre Elizabeth se encontraba arreglando a su pequeño para ese gran día, mientras a lo lejos estaba Tyler, un niño de 6 años con un cabello blanco como la nieve y unos ojos turquesas característicos de cualquier joven perteneciente a la familia Storm.

-Tyler, ayúdame a vestir a tus hermanos - Dijo Elizabeth con prisa ya que pronto llegarían todos los invitados. -

-Si madre -Tyler sonrió y cargo a los mellizos de un lado iba Milo de cabello negro, orejas puntiagudas y unos ojos azules, mientras que del otro lado se encontraba Millisen la única niña Storm totalmente contrario a su mellizo con un cabello rubio y grueso acompañado de esos dulces ojos turquesa, ambos contaban con 4 años de edad, solo que Milo sería más grande por solo 17 minutos.

La puerta se abrió de golpe y entro Estefan mirándolos

-Todo está listo en la parte de abajo y quería revisar que así fuera en la parte de arriba - dijo Estefan para acercarse y acomodarle la pequeña corbata -tan elegante como tu padre - menciono Estefan con una sonrisa mirando a Matteo y después dirigir su mirada a Tyler y los bebés -espero que ustedes también estén listos.

Tyler asintió rápidamente mientras veía a sus padres sonriendo

-Si padre ya todo… -Se detuvo el pequeño cuando escucho golpes junto a quejidos en la parte de abajo del castillo- pa...padre - apenas pudo susurrar Tyler entrecortadamente.-

-Tomen a sus hermanos y escóndanse en la habitación dorada ahí nadie entrará -dijo Estefan deteniendo una flecha que llegó desde la parte de abajo antes de que está se clavase en la espalda de Elizabeth.

Matteo y Tyler asintieron con la cabeza y se corrieron  mientras jalaban a los mellizos hacía ese gran oficina con puerta de una madera rígida que solo se encuentra en el bosque oscuro, pero justo antes de entrar una flecha se clavo en el brazo de Tyler.

-Ma..Matteo… -Dice Tyler antes de caer completamente desmayado frente a la puerta.-

-NOO... TYLER - Grito Matteo poniéndose sobre sus rodillas para intentar ayudarlo. -

-Mis niños... no... -Salió Elizabeth del cuarto y se dirigió hacia los niños, justo antes de sujetarlos una flecha se clava en la pierna de Matteo y otra en el cuello de ella - no - susurro Elizabeth poniéndose de rodillas para luego arrastrarse en el suelo para llegar hasta sus hijos y terminar desmayados junto a esa puerta de madera.-

A lo lejos una voz gruesa se escuchó y aquel chico de cabello corto se acercó a Estefan.

-El trabajo está casi terminado solo falta terminar con… -Aquel cazador traga saliva mirando a Elizabeth- Con la reina… -

-Bien a ellos llévenlos a una parte del bosque cómoda, y a ella la llevarán al lugar que quedamos, ya saben, a un lado del río de las sirenas. -

-Si, mi rey - los cazadores cargaron a los pequeños y a la reina Elizabeth hasta llegar al lugar recostando a los pequeños sobre unas mantas. Los cazadores se dirigieron hacia un gran campo de girasoles dónde estaba Elizabeth sin percatarse que la pequeña Millisen estaba detrás de ellos caminando como podía y recargándose en los árboles para no caer -Todo listo mi rey. -suspiro el jefe de los cazadores en ese momento. -

-Bien... ¿trajeron la daga? - dijo el rey sosteniendo a Elizabeth en sus brazos.-

Mientras que al campo de girasoles llegaba millisen, tomo un girasol en su mano y acaricio sus pétalos, todo estaría bien si ella hubiera mantenido su mirada en los pétalos de ese gran girasol, después de que la daga fuera entregada a las manos de Estefan, justo cuando Millisen levanto la mirada su padre clavo la daga en el pecho de Elizabeth

-no… Mi… -Comenzó a jalar aire con la boca mientras sus ojos azules brillaban cada vez más y un gran grito salió de su boca aturdiendo a los cazadores y a su padre, fue un grito tan fuerte que todos los girasoles volaron sobre ella mientras corría hacia el cuerpo inerte de su madre, lo sostuvo en sus brazos abrazándola mientras dejaba caer una lágrima en el pecho de ella.-

-aléjate de ahí millisen - se acercó su padre tomándola en sus brazos para llevársela lejos con sus hermanos, camino mientras que a los pies de Estefan los girasoles se marchitaban y junto al cuerpo de Elizabeth caía la lágrima de millisen haciendo que un pequeño árbol de sauce empezará a crecer, esa fue la noche en que todos comenzarían a conocer a los cuatro monstruos de Valencia...

los hermanos Storm