Dicen que las personas que disfrutan cuando están solas son raras o antisociales. Tambien dicen que las personas a las que les gustan las cosas oscuras o de terror son extremadamente raros o que están trastornados, he escuchado mi vida entera que etiquetan a las personas solo por su apariencia o por su forma de ser o solo por sus gustos.
Jamas me ha gustado juzgar a las personas porque he estado en muchas situaciones en mi vida en las que es a mi a quien juzgan sin conocer o sin saber nada de mi. He conocido a personas que sin explicación alguna me han tenido lastima, me han tratado con odio, personas que sin conocerme me han tratado con mucho cariño, algunas personas a las que les doy igual o me pasan desapercibida, otras me han tratado como si fuera una estrella de cine.
No importa donde este, siempre hay personas a las que no les agrado, otras me tienen miedo u otras a las que simplemente si les agrado.
Desde que tengo memoria por alguna razón siempre me he sentido infeliz, no importa que hubiera tenido muchos amigos, unos padres que siempre me demostraron su amor, hermanos que a pesar de todo siempre estuvieron ahí para mi y yo para ellos.
Crecí en una familia muy adinerada, en Canadá, desde que tengo memoria siempre quise alejarme de todos, así que cuando cumplí los 18 años mis dos mejores amigos y yo nos mudamos a un pueblo llamado walferdange en Luxemburgo a estuadiar en "Universität Luxemburg" (universidad de luxemburgo).
Harry y Colin son mis personas favoritas en la tierra, desde que nos conocimos hace 5 años en un exclusivo internado en Vancouver llamado Shawnigan Lake, somos inseparables, tenemos mucho en común, los tres tenemos los típicos padres que solo se preocupan por mantener buenas apariencias ante el mundo, siempre darle lo mejor a sus hijos con la mejor educación, mejores autos, viajes a donde quisieramos pero jamas se preocuparon de nosotros como personas, siempre procuraron mantenernos lejos de ellos con muchas actividades académicas, profesores particulares de francés, italiano, mandarín, alemán y cada idioma que creyeron que sería necesario aprender, clases de violín, piano y saxofón, entrenadores personales y muchas otras cosas mas, ya que son personas muy importantes.
Los tres crecimos con la típica presión de nuestros padres, siempre quisieron prepararnos para ser personas importantes en el futuro
Mi papa es el mayor accionista en una famosa industria de quien sabe que, honestamente jamas entendí su trabajo, mi mama una famosa e importante diseñadora de modas. Los padres de Harry son dueños de mas de 50 hoteles en América, y por ultimo pero no menos importante estan los padres adoptivos de Colin, su mamá es editora en una famosa revista muy reconocida en Estados Unidos y dueña de una de las más importantes editoriales en el mundo y su Papá es un importantísimo senador.
Estábamos hartos de ser el centro de atención, de ser los buenos adolescentes que todos querían que fuéramos, y sobre todo porque cada cosa que hacíamos salia en la prensa por lo que vida privada era lo que menos teníamos.
Nuestros padres se vieron decepcionados cuando ni siquiera intentamos entrar a alguna prestigiosa universidad de Canadá o Estados Unidos, después de graduarnos los tres hicimos la promesa de permanecer juntos siempre, después de todo desde que nos conocimos siempre nos apoyamos entre nosotros. Hicimos lo que tres los amigos aventureros harían.
El día después de la graduación fuimos al enorme estudio de mi padre en casa, el tenia una hermosa esfera de cristal sobre su elegante escritorio en la que estaba esculpida la figura del globo terráqueo, decidimos que uno de nosotros tres escogería al azar un país para escapar de nuestro mundo, Harry la hizo girar, los tres cubrimos nuestros ojos, Colin contó hasta tres y sin mirar la detuve con mi dedo índice, los tres reímos nerviosos, nos descubrimos los ojos y vimos que mi dedo estaba justo sobre la pequeña figura del mapa de Luxemburgo.
Fue así como decidimos el rumbo que tomaríamos, investigamos una universidad a la cual ir y no nos importo que no fuera muy famosa o reconocida, nuestros padres estuvieron de acuerdo con nuestra decisión después de unos días de súplicas, así que también conseguimos el apoyo financiero de nuestras familias, antes de irnos definitivamente, nos compraron a cada uno un lujoso apartamento, ya que no querían que viviéramos en cualquier lugar y menos compartiendo habitaciones con adolescentes desconocidos que no fueran de nuestra clase. Al principio no estábamos de acuerdo porque nunca nos gusto ver de menos a nadie, luego lo pensamos bien y aceptamos la propuesta de nuestros padres.
