Valentina de 15 años se intenta esforzar día a día para poder lograr sus sueños y metas pero eso no es todo, ella oculta su más desdichada desgracia que sufre cada semana, día, en cada miserable segundo. Un infierno con el que convive... pero que m...
La garganta no me dejaba en paz, la tos cada vez era más desagradable, sin duda alguna me molestaba mucho estar tosiendo pero a ella?
Lucia: para de toser de una vez no?
Ayyy nunca cambiará su manera de ser ni aunque me esté muriendo...es triste pero real. Allí estábamos ella y yo en un mazda negro rumbo hacia el hospital... sentía que me desvanecía poco a poco según pasaban los segundos. En cuento llegamos, me llamaron al instante y me subieron en una silla de ruedas la cual iba empujando una celadora, me hicieron una radiografía viendo a ver si encontraban donde estaba esa chincheta... sin lugar a duda sentía un mal presentimiento, estaba muy cansada. Pero en ese mismo instante...no era el mejor tiempo para pararse a descansar...
Doctora: Llévensela de inmediato a ponerle una vía y hacerle una PCR...y pónganla en una camilla.
Lucia y yo nos miramos con la misma cara de miedo.
En cuanto terminaron de pincharme una vía y yo dar negativo en la PCR, me pusieron en una camilla.
Doctora: podría salir la mami un momento? :)
Esa mujer se le iba la cabeza diciendo esas cosas, sin lugar a duda esa mujer no se acerca a ser mi madre ni de broma, pero entiendo que como me acompaño y de más todos allí pensaron que sería mi madre. Lucia se levantó sin protestar y sin contradecir así que supongo que no le sentó mal que le dijesen eso. En cuanto Lucia salió estuve intentando escuchar lo que decían, y cuando vi que sacaba el teléfono con preocupación me empezó asustar mucho... Un doctor bastante joven se acercó a mi con una enfermera.
Doctor: Hola Valentina, como te encuentras?
Valentina: Bueno regular...
Enfermera: nosotros queríamos hablar contigo y hacerte unas preguntitas...
Yo no se como lo hicieron pero yo notaba que la tensión se me bajó del todo cuando escuché eso.
Valentina: s-si claro
Lucia terminó la llamada y volvió a su antigua posición sentada a mi lado, saludando antes de sentarse a ambos sanitarios.
Doctor: Bueno Valentina, me han dicho que has ingerido una chincheta
Valentina: ujum
Me empezaron a preguntar cosas comunes como mi fecha de nacimiento, mi dni, los nombres de mis papás...pero, me hizo una pregunta...la cual no tenía ganas de responder y a la vez me puso muy nerviosa.
Doctor: Ingeriste esa chincheta queriendo?
Valentina:...no...fue sin querer...
Entiéndalo si hubiese dicho que si a saber que me hubiesen hecho, a lo mejor me mandaban al psiquiatra o algo mucho peor... A día de hoy creo que hubiese sido mejor eso que vivir este infierno de cada día...
Doctor: Bueno Valentina, te cuento lo que la doctora le contó a tu mamá
Y otra vez con la misma historia, esa mujer no es mi madre! Pero quien le iba a rechistar a un médico que me está diciendo que me pasa.
Doctor: encontramos la chincheta.
Valentina: O entonces eso es fantástico no?
Doctor: la verdad es que no, encontramos la chincheta en tu bronquio izquierdo...necesito que no te muevas bajo ningún concepto, y que no tosas...
...la tos dejo de cesar hace un buen rato, desde que me hicieron la radiografía...pero...me asuste mucho más de lo que ya estaba... no entendía porque mis lagrimas rozaban en esos instantes mis mejillas...si yo no sentía nada...
Valentina: p-pe-pero e-eso no es tan g-gra-grave...no?
Enfermera: no queremos decirte más pero para qué te hagas una idea...puedes llegar a morir si esa chincheta se desplaza...
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