Autor:0_jordinio_
Una historia de Pokémon Self Insert. Así que me estaba divirtiendo en un bar a punto de probar suerte para ligar con una chica bonita y luego ¡bam! estoy en la ruta 1, corto como la mierda y de alguna manera con la edad de doce otr...
"Eh..." murmure tontamente, mirando con los muy abiertos la escena frente a mi
¿Cómo no iba a hacerlo?
Momentos después de mi caminata hacia Ciudad Verde, me encontré con una escena de total devastación. Un cráter negro humeante y chisporroteando audiblemente en medio de la carretera. Y para acompañarlo, las formas caídas de cientos de pequeñas aves con plumas rojas en las alas y plumaje marrón.
Al menos sabía cuando estaba en la línea de tiempo. Debo de estar un poco atrás de Ash Ketchum. Eso fue a la vez emocionante y preocupante. Por un lado, no tenía planes de dormir afuera sin equipo de acampar, así que definitivamente me dirigiré al centro Pokémon, el problema era que esta noche era obviamente donde los tres títeres del Team Rocket harían su primer intento de robar Pokémon.
Por otro lado, mi mente instantáneamente se centra en el echo de que habría un Charmander libre camino a Ciudad Vermillion en alrededor de una semana o dos.
No me llevo mucho tiempo tomar una decisión. Lo siento Ash, puedes ser mi personaje favorito y tengo una gran debilidad por ti, pero no puedo dejar pasar esta oportunidad de conseguir un Charizard para mí.
Avanzando con cuidado de alrededor de los Spearow caídos que cubrían el camino, tuve que contener un silbido. Maldita sea, esta fuera el verso del juego, Pikachu estaría como en el nivel 40. Lo digo por que habría cientos de pequeños cabrones derribados.
Por pequeño, me refiero a enorme. Estos Spearow eran todos del tamaño de un halcón.
Después de algunos pasos cuidadosos pasé los pájaros caídos y el cráter, cuando estaba a punto de continuar mi camino. Excepto que mis ojos desviaron hacia una sola forma caída en el frente del cráter, por delate de la banda de pájaros
Se veía un Spearow, humeante y un poco chamuscado, pero con una hinchazón muy familiar en su cabeza. Hice una mueca con solo mirarlo, no era de extrañar que le guardará tango rencor a Ash. Yo también querría patearle el trasero si me lanza en la cabeza una piedra del tamaño de un puño.
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No es que llegaría muy lejos, fíjate. Con la fuerza de su loco trasero, podía tirarme al suelo con una sola mano sin esfuerzo.
Debería ocuparme de mis propios asuntos y seguir adelante. Excepto que este pequeño pájaro fue la cuada de una de mis mayores molestias en Pokémon. Pidgeot nunca regreso. Si este tipo se hubiera ido, no habría ninguna razón para que Ash dejara a Pidgeot.
Y necesitare a todos los pesos pesados que pudiera conseguir considerando que estaba planeando tomar a Charmander para mí.
Por no mencionar....
No importa lo que digan los fanáticos de Red, sabía a ciencias cierta que Ash entreno bien a sus Pokémon. Muchos afirmaron que no gano la mayoría de sus insignias, pero puedo refutarlas fácilmente a todas, excepto tal vez Sabrina.
