Pokémon: Versión Jordinio

capitulo 25

Encontrar la entrada al Monte Luna, o al menos una de ellas, fue realmente sencillo. Todo lo que tenía que hacer era seguir el rastro que Graveler dejó colina arriba y me encontré frente a un camino de piedra que conducía a una pequeña y estrecha entrada a la cueva, tal vez solo el doble de alto que yo en tamaño y ancho.

Acampé afuera por un rato y liberé a mi Pokémon. Mantuve a Rattata, Poliwhirl y Chansey conmigo, mientras enviaba a mis tres voladores Pidgeotto, Fearow y Beedrill a buscar por la zona.

Por lo que recordaba, la piedra lunar gigante no estaba realmente dentro de la montaña, sino en una cueva en medio del bosque en un terreno llano, no lejos de un arroyo bastante grande.

Así que los envié a buscarlo mientras me preparaba para esperar un poco.

Después de diez minutos de espera, me di cuenta de que estaba jodidamente aburrido. Claro, podía entrenar y no hacerme mucho daño, pero después de un tiempo se volvió repetitivo.

'Necesito conseguir algunos videojuegos.' Gemí por dentro. Me senté en una tumbona plegable, con un brazo sobre mi rodilla mientras apoyaba la barbilla en la palma de mi mano y miraba a mi Pokémon. Necesitaría un generador portátil, un televisor y más si quisiera relajarme cuando esté fuera de la ciudad, pero lo haré en serio. Porque joder, simplemente sentarse cuando no está entrenando. El mayor entretenimiento que tengo es Internet en mi teléfono, pero no estoy exactamente familiarizado con los sitios web de este mundo.

No he tenido tiempo ni para una puta paja desde que llegué a este maldito mundo.

Chansey tarareaba alegremente para sí misma mientras jugueteaba con algunas agujas de tejer y tela rosa. Los agarré con mis provisiones para acampar en Ciudad Verde, y por mi vida no tengo idea de lo que está haciendo. ¿Tal vez un sombrero?

Rattata estaba descansando junto a mi silla, felizmente acurrucado contra mi pierna y Poliwhirl estaba... entrenando. Mientras observaba al tipo de agua humanoide fornido subir y luego bajar, subir y bajar, subir y bajar y repetir más repetir y luego repetir de nuevo, no pude evitar quedar impresionado con su diligencia para entrenar. Realmente disfrutó de las flexiones de brazos, hombre.

Tendré que ver si le hago la rutina más difícil. Y vea si puede usar el mismo tipo de energía que usa para Mega Punch con sus piernas, tal vez conseguir Mega Kick de esa manera. Entonces puedo ir a enseñarle kick boxing Mauy Thai. Nota para mí mismo, haz que haga sentadillas también, no puedes permitir que se salte la pierna el día. Una vez lo hice durante un tiempo. Ancho de pecho con flacas patitas de gallina. No era un buen día para darse cuenta de eso.

Suspiré y miré alrededor de nuevo, buscando algo que hacer. Mis ojos recorrieron los árboles, una bandada de Pidgey en el aire, y luego el único Paras sentado justo afuera de la entrada de la cueva. No nos había molestado en absoluto una vez que ni siquiera mostré una reacción.

..Estuve tentado de conseguirlo. Un tipo de insecto y hierba sería genial para algunas batallas. Y todos los ataques de esporas serían asombrosos. Pero... simplemente no quiero un Pokémon que en realidad es solo un zombi siendo utilizado como marioneta por un maldito hongo.

Mis ojos se dirigieron a la cueva y la tenue y oscura extensión que podía ver dentro de ella. Como era de día, no era demasiado difícil ver en él, pero cuanto más profundo se hiciera, más oscuro estaría.

Antes de darme cuenta de lo que estaba haciendo, me puse de pie. Rattata se sentó y me miró confundido mientras los otros dos interrumpían sus actividades y también me miraban. "Chansey, ¿puedes vigilar el campamento?" Pregunté, luego asentí con la cabeza a los otros dos, "Quiero ir a ver esa cueva un rato con Rattata y Poliwhirl". Agregué, caminando hacia mi mochila y metiendo la mano en el compartimiento de herramientas, sacando la linterna que venía con los suministros para acampar.