Escucho a lo lejos que me llaman, pero estaba tan agotada que solo quería seguir durmiendo, pero el sonido se volvió más y más cercano, hasta que sentí un mano en mi rostro sobando mi mejilla.
-Luna, despierta, vine ayudarte.
Espera ese ¿es Marcos? Que él hace aquí y yo ando en mis pijamas, que vergüenza.
-Luna, vamos arriba
No me quedo más remedio y me tape con la sabana de pies a cabeza automáticamente.
-Buenos días, Marcos ¿Qué haces aquí?
-Al fin dormilona, vine ayudarte con las cajas, que claramente parece que te mudaste hoy mismo.
-Lo siento por el desorden, no me acostumbro y a veces duramos una semana y tenemos que volver a mudarnos.
-Bueno, pero esta vez no es así ¿no?
-En definitiva, no será así, parece ser a largo plazo
-¿Puedes quitarte la sabana para verte?
-Es muy temprano estoy desarreglada, despeinada y mi boca tiene mal aliento.
-Nada de eso me importa, por favor.Acto seguido me siento en la cama y comienzo a bajar lentamente mi sabana y lo veo a él todo sonriente con un poco de ojeras desde la otra esquina de la cama. El solo estuvo ahí sonriendo y admirándome, ni se cuanto tiempo paso, solo sé que estuvimos ahí con la chispa que sentimos al tocarnos.
-¡Luna! ¡Ayúdame a limpiarme! – mi hermanito grito desde el otro lado de la puerta que se encontraba en el baño.
-Oh Dios, lo siento tanto ¿me das un segundo?
-Si claro ve, te espero.
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Sunday's Song's
Storie d'amoreKaraoke, surgimientos de nuevos amores, chica nueva en la cuidad y mucha pasión por la música. Es una breve y corta historia de una chica que aprende a expresarse mas allá de la música.