Capitulo 1

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"¡Kyaa!"

Bell se vio envuelto en la oscuridad cuando alguien lo empujó con fuerza hacia un callejón. Sus manos se dirigieron inmediatamente a los cuchillos enfundados en su espalda, sólo para caer derrotado cuando se dio cuenta de que su "atacante" era sólo una chica bonita demasiado ocupada riéndose para sí misma como para asaltarlo.

"¡Fufufu! ¡Deberías haberte escuchado! ¡Kyaa! ¡Qué belleza!"

Habría preferido un asalto siendo sincero.

Esto era una tortura.

Bell suspiró. "¿Quién eres tú?"

La chica se limpió una lágrima de la comisura de sus ojos y le sonrió alegremente. "Quién soy no es importante. Lo importante es que necesito tu ayuda".

¿Joven doncella? Sí.

¿Necesita ayuda? Sí.

Si Bell no tuviera ya a Aiz Wallenstein, esto podría haber sido el comienzo de algo hermoso.

Sin embargo, nunca fue alguien que rechazara una mano necesitada. Lo llevaba en la sangre. Incluso si se suponía que iba a hacer un rápido mandado en el mercado para comprarle a Mikoto las zanahorias que había olvidado comprar antes. Realmente no quería perderse una de sus increíbles cenas.

"¿Con qué te puedo ayudar?"

De ser posible, su sonrisa se amplió aún más.

"¡Necesito dinero!"

"..."

"..."

Bell miró por encima de su hombro hacia la concurrida calle.

Así que esto era un asalto.

Supuso que podría haberse vestido de forma menos sospechosa con la capa demasiado grande que llevaba sobre los hombros. Pero ni siquiera parecía llevar un arma encima, ni sintió el aire opresivo que seguía a un aventurero de primera clase. Seguramente sólo uno de ellos sería lo suficientemente valiente como para asaltarlo a estas alturas de su carrera.

La verdadera cuestión es por qué un aventurero de primera clase querría asaltarle. Todos ellos ganaban mucho más dinero que él y no era precisamente un secreto bien guardado que su familia estaba en la ruina.

El chico de pelo blanco entrecerró sus ojos de rubelita mirando a la chica con confusión.

"Uhh..."

Suspiró.

"Necesito dinero para comprar ropa".

"Llevas ropa".

"Llevo una capa".

"..."

"..."

"Oh."

"..."

"... Oh."

Las mejillas de Bell se sonrojaron mientras desviaba la mirada.

¿Está desnuda ahí debajo?

Rápidamente, Bell asintió con la cabeza y empujó todo su monedero hacia sus brazos.

Mikoto podía vivir sin zanahorias.

Intentó escapar lo más rápido posible, pero la misteriosa (y desnuda, no podía olvidar que estaba muy desnuda) chica estiro su mano y lo agarró del brazo.

"¡Bup, bup, bup! No he dicho que sea lo único que necesito, ¿verdad?". Ella soltó una carcajada, sacudiendo la cabeza con una sonrisa poco disimulada.

Clairvoyance (Traduccion al Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora