Día 87

283 43 7
                                    

Esposito: Hola, querida esposa mía.

¿Cómo se encuentra mi esposa?

Esto es adictivo.

Esposita: Hola, adorado esposo mío.

Yo me encuentro muy bien.

¿Cómo está mi querido esposo?

Esposito: Estaba pensando en nuestro futuro.

Y como ya estamos casados, puedo darte adelantos.

Decidí que te pediré matrimonio formalmente cuando sea el momento indicado.

Esposita: ¿Y eso será...?

Esposito: No lo sé, solo lo sabré.

Y tendremos la boda que no tuvimos.

De preferencia en una capilla más linda, sin manchas de humedad en el techo.

Esposita: Me gustan más los jardines, quiero un jardín.

Esposito: Esa es la actitud, señora Ivashkov.

¿Te quieres cambiar el apellido tú o me lo cambio yo?

Esposita: ¿Por qué uno de nosotros debe cambiarse el apellido?

Esposito: Porque es más bonito.

Esposita: Eso es muy cierto.

Te lo debes cambiar tú, el apellido Mikaelson pasó mil años sin descendencia y soy la única que tienen.

Esposito: Bien, llegado el momento me lo cambio.

Pero... Si hay otro descendiente Mikaelson tú debes cambiarte el apellido.

Esposita: Hecho.

Oye, no han pasado ni tres meses desde que me comenzaste a hablar y estamos casados, ¿No vamos muy rápido?

Esposito: Somos los primeros en hacer esto, no tenemos muchas personas para compararnos.

Como te contaba, pensaba en los hijos.

Esposita: Yo también.

Pediré una cita de planificación familiar, ¿Me quieres acompañar?

Esposito: Punto 1: claro que te acompaño.

Punto 2: No te estoy pidiendo hijos ahora.

Punto 3: Tú le pones el nombre al primero, del segundo me encargo yo.

Esposita: Me parece justo.

O no tanto si tomamos en cuenta que yo seré quien deba dar a luz.

Te ofrezco un solo hijo.

Esposito: Eso lo veremos.

Te amo, Hope.

Esposita: Te amo, Adrián.

Lo haremos muy bien tú y yo.

¿Qué tal si voy a tu casa hoy y cenamos con tu madre?

Dame la lista, yo llevo las compras.

Esposito: Si, ¿Qué es lo peor que podría pasar?

Muchas cosas malas, pero eres mi esposa, ¿No? Debo acostumbrarte a que siempre te equivoques.

Esposita: Un consejo para el futuro, querido.

Yo nunca me equivoco.

Nos vemos en un rato.

Esposita se ha desconectado.

Esposito: Dile eso al pollo relleno que terminó siendo rollo de carne.

Repito: tendré que acostumbrarme, ¿No?

Tengo mucho tiempo para hacerlo.

El Primer Mensaje {Hope Mikaelson}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora