Capítulo 7 - Sin Aprendizaje

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No hay mayor error que pensar en la salida del túnel aún cuando apenas se está ingresando en el, y es que las advertencias y relajación mundial ya sea por hartazgo o por menospreciar seres que son invisibles ante nuestros ojos, no hemos aprendido que todo cambia, mutación por supervivencia, el virus de Sars-Cov2, desde sus primeros hallazgos en noviembre de 2019 hasta esta mitad de año 2022 ha dejado huella en cada rincón del mundo, en cada territorio conocido por el hombre, y algo que ha remarcado es que cada cierto tiempo se adapta a las condiciones existentes, como la inmunidad por infección natural, por vacunación o híbrida, sea cual sea el caso, es un virus que llegó para quedarse y que a ojos optimistas, en diez años pasará a ser un "resfriado común"... pero olvidamos y no prestamos atención que estos resfriados, también suelen ser mortales.

El campo médico somos los "únicos" que podemos decir que estamos acostumbrados a los altos y bajos picos casi cada cuatro a cinco meses, denominados "oleadas" y además de que la narrativa sigue siendo la misma desde el día 1 "es como una gripe" hoy se presenta una variante nueva, incluso se han planteado cambiarle el nombre a "COVID-22" esto debido a que ya es otro virus, ya no es el mismo COVID-19 aparecido en Wuhan, ya no es ni si quiera la primer variante británica o alfa, ni tampoco queda casi rastro de la virulenta Delta, ómicron que apareció en Sudáfrica en noviembre de 2021 (justo dos años después) siendo supuestamente la puerta a la fase endémica y fin de la pandemia, resultó ser el inicio de lo que viene.

Es cierto, ómicron genera enfermedad más leve, pero insisto, no deja de ser mortal, no deja de generar contagios y propagación, sumado al relajamiento, el esparcimiento es máximo, llegando a registrar millones de contagios semanales y las personas ya lo ven como algo "normal" cosa que puede ser cierta, pero normal no significa acertado. La variante presenta sub variantes, es decir como si fueran hijos de la ómicron madre, con la peculiaridad que evaden los anticuerpos creados por infección natural o vacunas, la pesadilla del reinicio comenzaba con BA.4 nombre dado a esta variante detectada, cosa que provocaba en varios países quinta, sexta y hasta séptima ola de contagios, los conciertos y eventos masivos se estaban replanteando realizarse, y en varios países se volvió obligatorio nuevamente el uso de mascarilla en espacios interiores, mientras que en otros simplemente se ignoró la medida y "ya no existe" ya tienen gripe solamente, COVID es cosa del pasado según ellos.

Brotes repentinos de fiebre bubónica, ébola, la misteriosa hepatitis infantil, e incluso algunos casos de Marburgo, pone en alerta a la población que supuestamente COVID sigue siendo su principal preocupación, hasta que pronto la viruela del mono comenzó a tener presencia en casi un centenar de países y si, pese a tener una cantidad muy baja de letalidad actual, la propagación está ahí, que en lugar de detenerse o siquiera descender, sigue incrementando los casos, lo que hace que la OMS y el resto de expertos convoquen a una reunión de emergencia para determinar que riesgo darle a otra posible pandemia.

La frase de la piedra sigue estando más latente, pues BA.4 arrasaba en China y Corea del Norte sin tregua, irónicamente al resto del mundo parecía importarle poco o nada esta propagación desmedida, y es que no se ha entendido que entre mayor casos ocurran, mayor probabilidades de variantes habrá, lamentablemente ocurrió al poco tiempo, la variante BA.5 aparece y se vuelve aún más contagiosa que su predecesora BA.4, ahora son dos enemigos poderosos que pueden catalogarse como COVID-22 ya que incluso la sintomatología tiene algunas diferencias notables, una de ellas es la diarrea que la anosmia no era recurrente por lo cual se podía identificar la infección más rápido, pero no se había aprendido nada de lo ocurrido en estos casi tres años ya, porque pese a la indiferencia mostrada, era obvio e inevitable que esa BA.5 se volvería dominante y se expandiría por el mundo, por lo cual nosotros ya estábamos mentalizados de que había que tener todo listo y esperar otra ola al menos dos meses.

COVID-19 Primera líneaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora