Prologo

28 6 0
                                    

— ¿¡QUÉ QUIERE QUE HAGA QUÉ!?

Jimin se levantó de la silla frente al escritorio sin poder creer lo que le decía el director.

— Jimin, ninguno de los dos desea ver un error en la nota de tu conducta, sabes que te estimo mucho y también valoro que seas tan buen estudiante, pero recuerda que esta escuela es reconocida por su excelencia académica y conducta de nuestros egresados. Me conlleva a mi ser responsable de ver si puedo o no mejorar el más mínimo error de un estudiante tan brillante como tú. No desearía que por algo así, termines afectado a tal punto.

— Pero, pero — Jimin respiró, se sentó y acomodó la corbata de su uniforme para sonreí nervioso — Director Kim. No puede darme una condición como esa, estoy en último año y necesito concentrarme para el Suneung.

— Y yo lo entiendo Jimin. Pero realmente es la única condición que puedo darte, no creo que otros directores pensaran siquiera en darte una condición, la situación iría directo a tu historial sin pensarlo dos veces. Estoy siendo piadoso contigo, Jimin y estoy dándote la posibilidad de enmendar esto con algo tan sencillo, y lo reitero para que recuerdes que no solo yo estoy siendo beneficiado.

— Hacer eso no sería nada sencillo, director, por favor, tal vez...

— ¿No sería sencillo? — Namjoon interrumpió al menor.

Jimin pasó saliva, sabía bien que no estaba permitido hablar sobre el tema frente a Namjoon y sin embargo, ahí estaba él, metiendo la pata por tercera vez en dos días.

— Bueno, quiero decir... usted sabe... que su hijo... Yoongi, es un poco... extrovertido — Jimin miró a Namjoon y luego bajó la mirada, repitiendo esto por dos veces más.

Pero antes de que Namjoon pudiera responder, la puerta de la oficina fue abierta de golpe, provocando que los dos presentes en la habitación miraran en dirección a esta.

— ¿¡Extrovertido!? solo dilo como es, idiota, soy un maleducado y busca problemas, eso es lo que querías decir ¿¡verdad!?

Min Yoongi había aparecido dándole un patadon a la puerta.

Los dos botones de la camisa abiertas, la corbata suelta, las mangas remangas y claro, su revoltoso cabello negro. Jimin hizo una notoria expresión de asco cuando sus miradas cruzaron.

El menor caminó hasta el rubio y lo miró desde arriba como si fuera un insecto. Un pequeño, vanidoso y egocéntrico insecto, si así lo veía él.

— D-director, lo siento mucho, Yoongi estaba pegado a la puerta, no creí que quisiera entrar de esa manera y me distraje unos segundos — Nayeon, la secretaria de Namjoon, apareció por el pasillo escusándose con una expresión de cachorro perdido.

— Ahh, no te preocupes Nayeon, yo me ocuparé del asunto — Namjoon comenzó a masajear su cien con los ojos cerrados tratando de mantener la calma — Yoongi, toma asiento, por favor.

— Deberías tranquilizarte un poco, Min — Jimin dejó de observar a Yoongi y acomodó el saco que llevaba puesto — Y respeta a tus mayores, no soy "idiota", soy hyung para ti.

Pero Yoongi lo ignoró por completo y solo se dirigió a su padre con mala gana — Oye, viejo, estás loco si piensas que este IDIOTA me dará clases particulares o lo que sea.

— Yoongi, no me digas viejo y-

— Viejo — dijo el menor de los tres y se sentó de mala gana en la silla que estaba al lado de la de Jimin.

— Si no me haces caso tendré que enviarte al internado de Daegu — habló firme — estas desperdiciando tu potencial, hijo, estas a un año de graduarte, es mi última decisión.

— ¿Me estás amenazando? — Preguntó Yoongi indignado.

— Disculpe, pero yo todavía no he aceptado — Jimin habló estresado.

Mierda, ¿Por qué lo metían en un lio entre padre e hijo?

— Entonces, todos sabrán que estuviste fumando y consumiendo alcohol dentro de la institución, para después, en estado de ebriedad, golpear a uno de tus compañeros.

Yoongi hizo una expresión en forma de "Oh" al escuchar eso y rio — Mira que modales tienes, estudiante estrella — Yoongi miró al mencionado sonriendo de forma burlesca.

Jimin solo rodó los ojos y suspiró tratando de ignorarlo. Lo último que quería era otra infracción por agarrarse a golpes con el hijo del directo frente al director.

— Acepto, pero si Yoongi no se toma esto en serio, yo no tendré la culpa, Namjoon.

— ¿Y quien te ha dicho que eh aceptado esta tontería?

— El internado te esta esperando si no te tomas esto con seriedad Min Yoongi, además de eso, la desaparición de tu guitarra y tu privacidad te dicen hola.

— Te voy a demandar — entrecerró sus ojos tratando de empezar una discusión.

— No puedes demandar a alguien por meterte a un internado — Jimin carraspeo su garganta y miró a otro lado, es que se escuchaba tan ignorante y seguro de lo que decía que no podía evitar corregirlo.

¿Cómo mierda pudo estar con él?

— ¿Y tú que? Solo haces baile sincronizado en la piscina de la escuela, apuesto a que la mini ropa de baño que usas se te mete entre las nalgas.

— No es baile sincronizado, niño, es natación y al menos YO hago deporte, solo mírate — Jimin rodó los ojos aborrecido.

— Si, me veo todas las mañanas en el espejo, estoy como para chuparse los dedos sin la necesidad de hacer deporte, mi genética es perfecta, es una lastima para ti, idiota.

Ambos tenían fuego en sus ojos mientras se miraban con rabia, definitivamente no durarían ni un día en la misma habitación. O eso es lo que pensaba Nayeon, quien miraba preocupada y asustada desde la puerta toda la situación.

— ¡SUFICIENTE! — Gritó Namjoon. Todavia no podía entender como se caían tan mal si sus familias eran tan cercanas — Salgan de la oficina, Jimin luego conversaré contigo sobre los horarios y materias.

—Claro, profesor — Jimin sonrió dejando de lado todo el problema con el menor — aun que no me siento a gusto, gracias por la consideración — hizo la reverencia al levantarse y se dispuso a retirarse, no sin antes, detenerse un momento y barrer con la mirada a Yoongi para seguir con su camino.

— Lo viste ¿verdad? — Yoongi lo señaló mientras se iba.

— Tengo que seguir con mi trabajo, hijo, por favor vuelve a clases y no empeores esto.

Yoongi se levantó de mala gana y se fue sin despedirse.

Namjoon se acomodó en el respaldo de la silla y cerró los ojos, necesitaba descansar unos minutos de todo el escandalo que recurrentemente su hijo le daba. ¿Era correcto lo que había hecho? realmente no lo sabía, pero debía intentarlo. Quien sabe si su hijo cambiará con esto o empeorará más, solo estaba esperando lo mejor de la situación.

 Quien sabe si su hijo cambiará con esto o empeorará más, solo estaba esperando lo mejor de la situación

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
FANCY BOY || YOONMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora