40. Cover ups

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El semestre de primavera avanza rápidamente, lo que significa que la graduación del castaño se acerca, al igual que la boda.

"¿Cómo me veo?"

La chica da una vuelta frente al espejo de tamaño completo que esta en la habitación, haciendo que los delicados holanes de tul y encaje vuelen a su alrededor. "Me gusta el movimiento— que piensas de—" detiene en medio de una vuelta, sonriendo y acomodando un mechón de pelo detrás de su oreja. "¿Chuuya...?"

"Te ves," el chico está reteniendo sus lágrimas por completo. "te ves perfecta, Ane-san."

Están en su oficina en Tokio, en uno de los salones vacíos. El horario laboral ha terminado, así que están solos.

"¿De verdad?" se gira, examinando la silueta en el espejo. "Quería encontrar un vestido que lo hiciera llorar, pero..." la chica divaga. "siempre quise hacer mi propio vestido."

"Si no llora cuando te vea, yo lo haré llorar."

Kouyou resopla, jugando con una de las mangas. "Esto— comienza a sentirse real."

Chuuya asiente, acurrucándose en uno de los sillones de la esquina. "Solo faltan cuatro semanas desde ahora, ¿cierto?" Kouyou asiente, y sus siguientes palabras son difíciles. "Mamá me llamó ayer."

El pelirrojo se pone rígido pero no tiene ninguna reacción mayor— porque puede asegurar que su hermana esta esperando por eso. "¿Lo hizo?"

La chica asiente, y parece culpable. "No he hablado con ella desde..."

Antes del juicio. Ninguno de los dos lo ha hecho. "¿Ella...?"

Kouyou asiente. "Quiere asistir."

Chuuya se muerde el labio. Sus emociones hacia su madre durante esos años... se han vuelto complicadas, por decir algo. "Si la quieres ahí, deberías pedirle que vaya." dice, encogiéndose de hombros, tratando de actuar como si no le importara.

"Chuuya..." niega Kouyou. "Después de todo, tu—"

El menor la interrumpe. "Es tu boda, ¿si? No es sobre mí ni nada de eso."

Kouyou frunce el ceño profundamente. "Lo sé, pero es una circunstancia especial—"

"Y también es uno de los días más importantes de tu vida," responde encogiéndose de hombros. "Si la quieres aquí, está bien."

La chica se queda en silencio durante un momento, y luego se mira en el espejo nuevamente. "No lo sé..." suspira pesadamente. "Creo que me siento mal por no quererla ahí." y se abraza así misma. "En realidad no puedo separarla del resto."

Chuuya no la culpa.

"Entonces no la invites. Después de todo..." se encoge de hombros. "Ninguno de los dos le debe nada."

Kouyou asiente lentamente, girándose para encararlo. "Se divorció de él. Terminó hace seis semanas."

Chuuya no esta seguro de si esta sorprendido o no— pero eso lo hace sentir mejor.

"Ahora," la chica se gira para que su hermano pueda ayudarle a bajar el zipper, "¡es momento de vestirte!"

El ojiazul gruñe un poco, caminando detrás de ella. "¡En verdad creí que habíamos dejado de disfrazarnos!"

"¡Me prometiste que me dejarías vestirte como yo quisiera! ¡Y eres mi hombre de honor!" la chica se quita las mangas, sacándose el vestido cuidadosamente para colgarlo. "Además, no puedes intentar hacer eso conmigo— yo ya conozco tu secreto."

What's your name?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora