Mycroft aprieta sus manos contra el pecho de Greg clavando sus uñas dejando la piel de su pareja un poco enrojecida, echa su cabeza hacia atrás tratando de despejar su cabello húmedo de su frente, aprieta sus ojos y siente que su garganta se llena de saliva acumulada tanto que está cae en forma de hilo por su boca abierta, el suspira y grita mientras sus caderas saltan con parsimonia sobre la pelvis de Greg, siente su cuerpo mojado de sudor y sus músculos cansados por el esfuerzo, siente las olas de placer haciendo ruido en su ser y siente las manos de otro hombre apretando su cintura dolorosamente, mañana dejara marcas y eso le gusta.
Toda la habitación está en llamas, hace calor porque es medio día pero también porque hay dos cuerpos envueltos en medio del sexo, unidos de la forma más erótica posible.
Greg observa a Mycroft con adoración tanto como su cerebro fundido por el placer le permite; cada peca diminuta es perfecta en su amado, cada centímetro de piel y el puede tocar todo lo que ve. Sus manos son exploradoras y viajan al abdomen de Holmes, es blando y no hay abdominales, eso lo enloquece, ama la piel que parece sobrar haciendo bulto en el vientre de Mycroft quien se llamará si mismo gordo pero Greg le dirá que es hermoso.
Greg está sentado gimiendo el nombre Mycroft cada estocada que da contra el hombre de su vida. Mira por el hombro de Mycroft y puede ver sus piernas largas acomodadas para poder hacer lo que está haciendo, también observa su espalda curveada y sexi.
Greg juega un poco más con sus manos y lleva sus dedos hasta la entrada de Mycroft la cual está tomando toda su longitud y toca, después se atreve e inserta uno de sus dedos. Mycroft grita cuando el estiramiento extra manda un temblor a su cuerpo, quiere correrse en medio de tanto placer pero primero desea que Greg lo acaricie hasta que el aire le falte.
—Greg... Tu
Un jadeo tras otro obstruyen su habla pero Greg es amable el sabe lo que Mycroft necesita y no lo obligará a suplicar, al menos no está vez, así que toma con su mano libre el miembro de Mycroft comienza con movimientos de bajo hacia arriba haciendo pequeños círculos cuando llega a la punta.
Están jadeando palabras que tal vez al final ni siquiera recuerden. La voz de Greg es gruesa porque es más ronca, y la de Mycroft un poco más aguda pero al mismo tiempo tan varonil.
Lestrade siente el cosquilleo subiendo por toda su zona erógena, se va a correr y lo hace, con fuerza y un grito que no esconde, aún así sigue tomando a Mycroft con movimiento errados. Todavía está navegando entre su orgasmo cuando su pareja aprieta su interior y se corre también dejando toda su esenciasobre el pecho de Greg e incluso dos débiles gotas han aterrizado en su mentón.
Ambos están agotados entre respiraciones cortadas y sus corazones acelerados Mycroft se mueve y cae a un costado de Greg, soltando un gemido dulce al liberar el miembro de su pareja sintiendo como el líquido caliente se desliza por sus muslos lentamente.
—Te amo Myc —Exclama Greg con una voz diminuta
—Yo también Gregory
Una hora después por fin han acabado de bañarse, los días se quedan desnudo y Greg abraza a Mycroft por la espalda frotando su erección contra los muslos de Mycroft, Mycroft no quiere pensar que tal vez el baño no sirvió de mucho cuando Greg mete uno de sus dedos en si entrada sin aviso.
—¿Todavía sientes mi semen saliendo de ti? ¿O debería volver a repetirlo?
—Greg...
—Quiero follar de nuevo, quiero tenerte debajo mío mientras te beso y te obligo a mirarme en medio de tu orgasmo
—Si, si por favor
—Desearía estar casado contigo
Todo su juego de toqueteo se desvanece apenas Greg dice eso, Mycroft se tensa con una creciente emoción eléctrica.
—¿Casarnos?
Greg siente de inmediato el sobresalto de Mycroft y desea haberse quedado callado
—Lamento, haberlo mencionado es solo que recordando nuestra plática de la semana pasada tú dijiste que te gustaría una boda, tal vez lo tome como una señal errónea y lo pensé demasiado
—Me gustaría casarme eso es seguro querido
Los ojos del pelirrojo brillan con estrellas en ellos, Greg no tiene corazón para esperar hasta su aniversario para pedirlo así que camina hasta su abrigo colgado en el perchero y de la bolsa saca una pequeña caja de terciopelo rojo, Mycroft casi está saltando de la emoción. Greg da un paso al frente y se arrodilla ante el otro hombre.
—Myc, hemos recorrido un camino juntos tan extenso y tan difícil que a veces me cuesta creer que llegamos a este punto de eterna felicidad. Ya pasaron dos años desde nuestro pequeño incidente que nos enredó para ser lo que somos ahora y no puedo pensar en más que amarte una vida entera y es por eso que quiero preguntarte si ¿Me haces el honor de poder ser tu esposo?
—Si, si, si, infinitamente si
Mycroft se inca también y abraza a Greg con fuerza, siente que el mundo le ha dado todo lo que ha pedido al fin y no puede estar más agradecido.
—Lamento si mi propuesta no fue tan romántica Myc
—¿De que hablas? Es la mejor propuesta del mundo, tu y yo desnudos después de tener sexo increíble, es un sueño
—Tu eres un sueño
Mycroft y Greg se casaron en marzo con la primavera floreciendo sobre Londres.

ESTÁS LEYENDO
Hogar (Mystrade)
FanfictionGreg comete errores porque es humano. Mycroft tiene miedo a perdonar.