Ve a buscar una nueva belleza,
olvídame, que no quiero seguir
sintiendo tu dolor ajeno.Que retiene mi
energía y se enreda en tu
cabellera.Olvídame, querido, que no sentí
las mariposas en mi interior desde
un tiempo alejado del hoy.Olvídame,
por favor, amor que tus
besos sabor
a miel, los olvidé ayer.Que sin ti ya no me duele este
pecho que espera por un amor
sincero, un abrazo que no duele,
un calor que no se siente.La sensación de éste pecho
que duele por un amor
que no se espera, que
no abunda, ni que llega en
primavera.Querido, olvídame. Que mis
brazos ya no duelen, mis
piernas no sienten y
las estrellas cesan.Ay, amor, que sin ti ya no
duele el alma que no descansaba
muriendo en el fondo de
tus delirios.Déjame pellizcar ese corazón,
lleno de mentiras y anhelos que
lastiman, que pican, que
llegan y te tumban en una
colina.Olvídame que ya no hay
miedo a perderte.Perderse en llanto y
melancolia.Olvídame, que este amor
ya se desvanece junto a las
orillas del mar, a el miedo
a perderte y el corazón
lleno de mentiras.Mis brazos ya no temen. Ay,
por favor, que ya no duele, no
existe el miedo a perderte.De pies a cabeza, no
soporto tus nuevos antojos
al buscar belleza, belleza
de un extraño amor.Vas de corazón en
corazón, buscando brazos
dónde llorar, reir y falaciar.
Hablar entre delirios y
rebuscar verdades dónde
no se encuentran vida
existente.Mi corazón ya no
le teme a ese olvidó a
la belleza innata.