CASTIGAME//taekook

55. semi final pt.2

Taehyung se sentó en la sala de espera por horas con su mochila en su regazo mirando a un punto en blanco con pensamientos asaltando su cabeza. Si pasa a un estado catatónico, ya no podrá escucharlo y la posibilidad de que despierte será cero. En estado vegetativo los pacientes tienden a despertar en 4 semanas, jungkook había pasado en ese estado 7 semanas. Se había pasado de ese número de días, en los que podía despertar. Una vez pasadas las 4 semanas, las capacidades cerebrales empeoran, incluso si despierta.... tendrá problemas para caminar y moverse normalmente por el proceso natural de los músculos al no utilizarse: se atrofian. Empiezan a adelgazar. Y casi siempre tienen problemas cognitivos, problemas del habla, retrasos mentales incluso. Jungkook nunca sería el mismo, aunque despierte.

Por eso cuando taehyung iba y movía sus piernas de arriba, abajo una y otra vez para detener el proceso pero aún así, sucedía tarde o temprano. También se creaban unas heridas dolorosas en las partes del cuerpo de jungkook por la presión de la cama en su espalda, estando en la misma posición por mucho tiempo. A jungkook no se le han creado todavía y taehyung siempre que iba lo colocaba en distintas posiciones con ayuda de las enfermeras para que no se le crearan. A veces, con la fuerza mental suficiente tomaba su cuerpo inerte con cuidado, lo sentaba y tae se sentaba en la cama. Luego con sumo cuidado, como si fuera a romperse, lo apoyaba en su cuerpo. Apoyaba su cabeza en su pecho y abrazaba su cintura, el calor que desprendía su cuerpo.... insuficiente pero aún ahí.

Y se quedaba dormido en esa posición. Se acalambraban todos sus músculos y se le dormía la pierna pero siempre deseaba quedarse en esa posición más tiempo. No podía hacer eso tan seguido porque tenía mil cosas inyectadas en él, un tubo para comer, otros tubos para medicamentos e hidratación de las que taehyung no tenía ni idea.

Aprovechaba cada segundo en el que podía estar en esa posición con él. 

Y ahora sentado en la sala de espera, no sabía si podría volver a moverlo y abrazarlo de esa forma de nuevo. La vida de nuevo le demuestra.... que siempre puede ser peor. La situación en la que estaba al estar en estado vegetativo ya era difícil y nunca se dió cuenta de lo afortunado que era de a veces escucharlo decir algo, bostezar o mover sus dedos. A veces sentía como su mano apretaba la suya.

Ahora lloraba como un niño en la estúpida sala de espera, con los pasillos que se habían  echo familiares. Odiaba conocer la clínica tan bien. Odiaba que sabía exactamente donde doblar, que ascensor tomar, con quien hablar y cuanto tiempo le tomaría llegar a la pieza.

Odiaba que este lugar fuera familiar. Mientras estaba sentado en la sala de espera en las sillas color azul, sin brillo por la cantidad de tiempo que la gente pasa sentada en ellas, en contraste con las paredes blancas resplandecientes que reflectaban la luz fría en ellas, haciendo todo el lugar con esa misma sensación: frío.

No podía cambiar la luz de la pieza de jungkook, pero se trajo una lámpara que puso en la mesa al lado de él, que tenía una luz cálida. No quería que la sensación que tenía en esa sala de espera fuera la misma en su pieza.

El papá de jungkook dejó el centro de rehabilitación. Con todo lo que estaba pasando con su hijo, ya no tenía ganas de beber. Sólo quería trabajar para poder pagar las cuentas de la clínica. Tenía la tentación pero no el tiempo. Era un caso extraño, pues cuando cosas malas pasan en tu vida siempre recurren a la bebida para aliviar el dolor. Taehyung siempre pesó que así era, sin embargo, ahora se da cuenta. Se da cuenta de que no es importante si algo es malo o bueno para recurrir a ese método de escape, es más bien el impacto que crea.

Lo que le pasa a jungkook es desastroso, pero quizás el papel que tiene este suceso en la vida de su papá, jungsu, es distinto. No necesariamente va a escapar, quizás le puso los pies tan firmes en la tierra y le pegó una gran bofetada en la mejilla, diciéndole: despierta, tu familia te necesita. No corras, no huyas. Quédate y ayuda.