MI PEQUEÑA 🥀 [DIEGO HARGREEVES]

El pequeño Número Cinco

De verdad era él, Diego, pero estaba diferente, había crecido como era obvio y pasó de ser un adolescente lindo y algo tierno a ser un hombre realmente guapo.

-Diego..- Me levanto de la silla y los dos nos acercamos poco a poco hasta darnos un fuerte y largo abrazo.

-Te extrañe-Susurra en mi oído y un escalofrío recorre todo mi cuerpo, me puse nerviosa tan solo por eso.

-Yo tambien te extrañe, Diego- Una lagrima recorre mi rosotro, no saben cuánto me alegraba de verlo, no separamos de ese gran abrazo y me quedo mirándole.

-Porque me miras así?-Pregunta el moreno.

-Oh, disculpa es solo que estoy muy feliz de volver a verte- Dije haciéndome la distraida.

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Nos encontrábamos en el salón, Luther había convocado una especie de "reunión familiar", Allison estaba sentada con un vaso de alcohol, Klaus se encontraba en el pequeño bar de atrás, Diego miraba hacia otro lado algo molesto y yo estaba en el sillón sentada junto a Vanya deseando que alguien empezara a hablar de una vez, Luther es quien lo hace.

-He pensado que podríamos hacer un funeral, en el patio de la casa al atardecer, en el lugar perferido de papá- Habla el rubio y todos lo miramos.

-Tenía un lugar preferido?- Pregunto aunque no me importara demasiado.

-Si, bajo roble- Responde Luther.
-Siempre se sentaba allí conmigo ¿Con vosotros no?-Vuelve hablar.

-¿Habrá comida? ¿Té, galletas? Los sándwiches de pepino nunca fallan-Habla Klaus llegando con un cigarrillo en la mano y sentandose entre Vanya y yo.

-No y apaga eso, sabes que papá no dejaba fumar aquí- Le contesta Luther.

-¿Esa es mi falda?-Pregunta Allison.

-Oh, si, la encontre en tu cuarto, es algo anticuada pero me mantiene fresquito allí abajo- Responde Klaus y yo solo reía.

-Escuchen, hay cosas mas importantes que resolver- Interrumpe el rubio.

-¿Como que?-Pregunta Diego.

-Como en la forma en la que murió- Responde Luther otra vez.

-Y allá vamos- Dice Diego harto del tema.

-Pero no lo entiendo, dijeron que fue un paro cardíaco- Hablo yo esta vez, también estaba un poco harta de el tema.

-Según el forense-Dice el grandullón.

-¿No es el experto?- Digo de nuevo, la conversación me parecía absurda.

-En teoría-Responde

-¿En teoría?- Lo imita Allison.

-Solo digo que algo debió pasar, la ultima vez que hablé con él se oía raro.

-Oh, Quelle surprise!- Dice Klaus haciendo gargaras con el alcohol que tenía en la boca.

-¿Raro?-Pregunto yo y intercambio miradas con Diego.

-Estaba intranquilo- Insiste el rubio.

-Luther, era un viejo paranoico que estaba perdiendo la poca razon que le quedaba- Habla Diego levantandose de la silla y yo lo observaba atentamente.

-No. El debió saber que algo debía pasar- Habla Luther y resoplo, estaba siendo algo pesado.
-Por eso necesito que hables con papá- Habla nuevamente pero esta vez dirigiéndose a Klaus.

-No puedo llamar a papá sin más y decirle: "¿Puedes dejar de jugar a tennis con Hitler y escucharme un momento?"- Bromea Klaus y yo río, eso había tenido gracia.