y te vi [uzuzen]

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— Si claro te voy a llamar, tu sabes que eres especial para mi— Tengen hablaba por su celular mientras conducía hacia su casa, habia ido a hacer un  "trabajo" de la universidad en grupo, oh bueno, así le diría a su prima si pregunta.

Como ya era noche no se preocupó mucho en ver si había gente alrededor porque nadie salía a esas horas, por lo menos en donde vivía.

— Si si, un besito— sonrió nervioso, era una de sus citas quien al final no fue un choque y fuga como el pensaba. No es tampoco que le agradaba romper corazones de bellas chicas.

Miró la pantalla de su celular para colgar pero un fuerte golpe lo hizo reaccionar haciendo parar el carro. Oh no.

De repente sintió como si un balde de agua fría hubiera caído en él, pudo escuchar un pequeño grito y de repente ya no vió nada por la ventana, entonces decidió bajar para esperar lo peor.

Lo que vió fue a un, lo que parecía ser, un niño. Asustado se acercó mas para ver si lo conocía porque él conoce a todos los vecinos que vivían allí, pero a este jovensito no pudo identificarlo.

— Lo maté— dijo con un rostro de terror imaginando todo el desastre que armaría y provocaría con su familia y pero aún, ir a la cárcel.

Trato de calmarse respirando lentamente y pensando— Mierda ¿Ahora que hago?— miró hacia la nada— Lo correcto, darme a la fuga—.

Rápidamente abrió la puerta del carro y se sentó prendiendo el motor— ¡Pero si estoy en frente de mi casa!— solo quería lloriquear, pensaba que hoy todo saldría bien.

Miró por ultima vez al "niño" desmayado y entró a la casa, aunque sea le quedaba una opcion: recurrir a su amigo Kyojuro, porque contarle a Makio causaría un alboroto.

Entró al cuarto de servicio viendo al mayordomo en un profundo sueño, lo mejor era no despertarlo a la fuerza.

— Pssst, Kyo ayudamee— le dió unas palmaditas en la cabeza para que pueda despertar— Oyeee, creo que mate a alguien—.

— ¿E-Eh? Joven Tengen— el rubio empezó a abrir los ojos viendo al albino con una cara de terror— Ya ya, mañana me encargo de todo... ¡¿QUEEE?!—.

Tuvo que ponerle su mano en la boca para que su prima no se despierte, mientras que vió en los ojos del mayordomo pidiendo una explicación— S-Sigueme—.

Kyojuro se encontraba examinando el cuerpo del jovensito quien seguía inconsciente, mientras que Tengen trataba de explicar lo que pasó.

— ¡Te juro que este niño se apareció de la nada, es tan chiquito que ni lo pude ver, yo solo estaba estacionando el carro y...— no pudo continuar ya que el mayordomo le tiró una cachetada.

— ¡Calmese!— Rengoku estaba enojado y nervioso, pero mas enojado por la irresponsabilidad del otro— Tenemos que llamar a una ambulancia, por lo que veo todavía tiene pulso—.

— ¡¿Acaso quieres que todos aquí de enteren?!—.

— ¡Pero no podemos moverlo!— gritó bajito el de puntas rojizas.

— Cómo que no— el albino lo cargó facilmente ya que como era un "niño" no pesaba mucho— Si lo llevamos a la clínica ¿Podemos dejarlo afuerita? AY— sintió otra cachetada.

— ¡Deja de decir estupideces joven!— abrió la puerta del auto y acomodó el asiento de atrás para que este libre.

Luego de acostar al chico, Tengen prendió el auto junto al Rengoku en el asiento derecho y se dirigieron a la clínica mas cercana.