#01
Hayden Miller.
Hay batallas que por más que queramos nunca podremos ganar... Fue una realidad que asumí desde el primer momento en que supe que ya nada tenía sentido. Me perdi tratando de buscar algo que jamás encontraría, era como estar encerrado en tu propia cárcel porque tu mente te domina. Te absorve. Te consume. Hasta dejarte sin nada.
Pasaron tres años. Tres años dónde lo único que hice fue encerrarme en mi propio mundo. Sacaba malas calificaciones me hacían bullying y recibía malos tratos por parte de todos mis compañeros. Siempre me sentí diferente y en el fondo me merecía todo lo que me hacían. Haci crecí todos estos años alimentando mis miedos mis inseguridades , comencé a sufrir de ataques de pánico y ansiedad. Trataron de darme ayuda psicológica pero nunca fui. Haste que....
Empecé a drogarme era la única cosa que me hacía sentir en paz. Liberado. No debería justificar mis acciones pero en ellas encontré un refugio.
Me internaron en un centro de rehabilitación dónde pase Doce meses. La razón fue por una sobredosis dónde casi pierdo la vida. Desde ahí todo empeoró más y más.
Pero...¿Cuánto más podría vivir así ? Tenía que tomar una decisión.
Solamente una que acabara con todo esto definitivamente.
¡Estaba harto!
¡Dolido!
¡Agotado.!
¡Frustrado.! Ya no podía más.
Entre al baño y me mire en el reflejo del espejo. Mi aspecto era deteriorado casi nunca me daba hambre,estaba muy delgado tanto que se veían los huesos de mis costillas tenia ojeras y moretones por todo el cuerpo. Mi cabello rubio natural lucía reseco y muchos mechones caían por todos lados.
Respire hondo. Camine uno pasos más hasta que que me me caí. Con una mano me apoye del suelo y con la otra del lavamanos dejando caer unas tijeras. Intenté levantarme pero no pude. Ya no quería.
Todo paso muy rápido.
Fue cuestión de segundos.
Le pondría un final a todo.
Porque ese día intenté acabar con mi propia vida.
...................
Creemos que la muerte es la mejor salida a nuestros problemas. Que de esta forma el dolor se irá y nada podrá hacernos daño.
Pero...¿Será eso posible ?
Desperté. Abrí mis ojos lentamente hasta ver mínimos rayos de luz.
Tenía la garganta un poco seca y me sentía débil.
Quise levantarme pero ni eso podía era como si cada músculo cuerpo no reaccionara. Me dolía hasta el alma.
Tenía puesta una bata azul y una sábana blanca que llegaba un poco más arriba de mi ombligo. Todas las paredes eran blancas. Estaba acostado en una camilla. Mi muñeca izquierda estaba vendada y en mi brazo derecho tenía una vía intravenosa.
La puerta se abrió y mi hermana estaba allí. Quedó con la mano pegada al pomo sin decir una palabra. Traía su cabello rubio recogido en una coleta. Físicamente teníamos rasgos similares solo que ella tenía los ojos verdes como mamá y los míos eran un tono azul grisáceo.
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Almas Perdidas
RomanceHayden Miller es un joven vive inmerso en su propio mundo de dolor. Su corazón se verá envuelto en la incertidumbre al enamorarse de dos chicos y enfrentar una ola de secretos que estarán por revelarse. ¿Podrá afrontar todo lo que se viene? Y el in...