(EN PAUSA) The Rainbow Room - Fanfiction Peter Ballard

IV- Demonio

Todxs sabemos que Peter es algo inestable y la prota tampoco lo es tanto, como ya vimos en el cap anterior. Solo escribo como YO creo que reaccionaría el personaje, NO estoy normalizando estás conductas y las advertencias están, así que espero que no haya comentarios negativos porque sobre aviso no hay engaño, baais.
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Peter caminaba de un lado a otro señalando cada uno de los errores que había cometido esa noche y el por qué debería arrepentirme de ello, todo sonaba serio pero el sueño que sentía y el querer reírme de todo no me dejaba prestarle mucha atención. Creí que su regaño sería diferente a los demás, que está vez, él sentía algo más que enojo, pero al ver que me reprendía solo por haberme salido de mi habitación en la madrugada, me causó frustración y aburrimiento. Después de un rato comencé a sentir, que Peter no sonaba muy convencido de lo que decía o más bien, él trataba de entender si realmente estaba molesto por mi imprudencia nada más. Ya que repetía y repetía lo mismo, una y otra vez.

-Si Brenner se entera, hará que maten a Tushman, y te castigaría a ti  ¿te das cuenta de la gravedad de lo que hicieron? -preguntó Peter mientras yo estaba recargada en mi cama con mis codos a los lados mirándolo y mis piernas seguían afuera sin tocar la superficie del suelo-.

-Papá no se va a enterar porque tú no le dirás nada. Ya relajate. -dije volteando los ojos y recostandome por completo haciendo que mi bata subiera hasta mis muslos, descubriendo mis rodillas-.

Vi como dejo de caminar de un lado a otro y se detuvo frente a mi cama solo observando fijamente un momento esa zona hasta que finalmente suspiro derrotado, se recargó en la pared y cruzo los brazos.

-¿Te divertiste? -preguntó alzando la ceja. ¿De verdad no estaba molesto? Eso me hacía enojar a mi-.

-De hecho, si -reí recordando a Daniel-. -Hacía tiempo que no me reía tanto. -Busqué algún indicio de celos en su mirada pero no encontré más que seriedad absoluta-.

-Me alegro por ti. -sonrió de lado-.

¿¡Qué!?

-¿Qué quieres decir? -dije confusa mientras me sentaba recta en la orilla de mi cama-.

-Si, es decir, me alegra que hayas comprendido tan rápido. -explicó resaltando el "tan rápido"-. Es bueno que te olvidaras de tu absurda fantasía entre nosotros, ya era algo molesto lidiar con ella.

Auch.

-¿Era molesta? -dije riendo con sarcasmo y levantándome. Eso había dolido pero no iba a demostrarlo-. Porque no recuerdo que me hayas apartado en el cuarto de servicio cuando traté de besarte. -dije con cinismo. Tenía que decirlo todo ahora, el alcohol me daba las agallas que
después no tendría-.

-Por lo que veo, tampoco recuerdas que estamos en una prisión que nos asesinaría si nos hubieran visto, cualquier ruido fuerte y nos habrían descubierto, ¿o es que la ebriedad no te deja razonar? -mencionó apuntando a su sien. Peter buscaba herirme, era claro, pero su comentario causó lo contrario, me emocionó un poco-.

Hasta ahora solo había escuchado excusas tontas o eso me reiteraba yo. Un beso no habría causado un ruido fuerte, pero algo más si, me provocaba intriga el preguntarme qué era lo que Peter pensaba que haría ruido. Lo observé con atención, parecía querer decir algo más, sus ojos estaban clavados en una parte de la habitación, sus manos pasaban por su cabello continuamente, por lo que su peinado impecable había desaparecido. Noté que en la habitación solo se apreciaba su agitada respiración indicandome que estaba desesperado.

Deberías aprovechar eso.
Si, tienes razón.

Comencé a encaminarme hacia él sin quitarle la mirada de encima, sintió el peso de mis ojos sobre los suyos provocando que mirara en mi dirección, escaneó mi cuerpo e hizo tambalear mi objetivo pero seguí, y en cuanto llegue a él toque con mis dedos la mano que tenía a su lado, se reincorporó esperando a que hablara.