Amor incompleto

2.1K 301 771
                                    

Advertencias: esto es puro fenglian

εїз ・・・・・・・・・・・・・・・・εїз

Feng Xin estaba recostado contra su auto policial. Una chaqueta negra de cuero que con grandes letras blancas en la espalda indicaban que era policía. Estaba ya entrada la noche y estaba algo cansado. En una mano tiene café con leche caliente, aguado y de mala calidad, en la otra un emparedado a medio comer. Probablemente su esposo ya tuvo que haber llegado, pero francamente, prefiere comer en la gasolinera que compartir una cena fría y silenciosa con Mu Qing.

De todas formas, las horas extras son buenas y a pesar de que el café es asqueroso, los emparedados son caseros y el queso se le derrite en la boca haciendo que, por un instante, la vida valga la pena.

Levanto la vista y miro por un instante el cielo negro, nublado y distante. No era una noche estrellada sino fría y aburrida, igual que todas. Lentamente, Feng Xin deja de comer y deja el café sobre el capó del auto. Saca su celular con calma, como si no quisiera ser demasiado rápido ni impulsivo.

Feng Xin ha decidido resolver este asunto con la paciencia y no con las emociones. Es una decisión seria. Abre WhatsApp y mira fijamente el mensaje que ha dejado escrito sin enviar desde hoy a las seis de la mañana.

Mu Qing, tenemos que hablar.

Luego de varios años de matrimonio, él ya no puede más.

Terminar todo este mundo que construyeron ambos parece ser doloroso y angustiante, pero extrañamente, se siente liberador. Después de todo, ellos dos ya no son los mismos.

Cuando se conocieron eran jóvenes llenos de sueños, apasionados y estúpidos. Pero hoy, ya a sus treinta años son adultos que dolorosamente, sean convertido en desconocidos. No hay más charlas infantiles hasta las cuatro de la mañana y el sexo es tan malo que hace que las pajas sean gloriosas. Pero más allá de eso, cada uno ha tomado caminos distintos. Mu Qing lo consume su éxito laboral; Feng Xin solo es un policía más.

—Vamos. Envíalo.

Feng Xin se exige así mismo.

No es que le tenga miedo a la soledad del divorcio, ni mucho menos a vivir en un sucio departamento de soltero. Le tiene miedo es a la cantidad de cosas que le tirara Mu Qing en la cabeza cuando llegue a casa.

Acerca el dedo al botón enviar y da una profunda respiración—Solo envíalo.

Agente Xin hay un 9831 en la Concordia 567, piso 20-A.

Feng Xin pega un brinco. Su dedo se aleja rápidamente del botón y toma el parlante para responder a la centra. —Voy en camino, estoy a un par de kilómetros.

Tiro el celular dentro y apuro el emparedado y el café a su boca y arranco violentamente, colocando la sirena que anunciaba su llegada. Un 9831 era una situación de violencia. Generalmente se usaba para indicar un intento de homicidio, robo o violación.

Feng Xin supo que tendría que usar su arma ese día y la adrenalina le lleno la sangre. Manejo rápidamente por las calles pasando el tráfico y en ese momento, solamente un pensamiento vino a su cabeza.

"Si salgo vivo, enviare ese mensaje. Arrestare a ese hijo de puta y luego me divorciare. Tomare mis cosas y me iré a dormir a la estación."

Cuando Feng Xin llego a la dirección noto que toda esta situación estaba desbordándose. El aroma a fuego, humo y plástico quemado inundo su nariz. Un grupo de personas curiosas miraban angustiadas como gran parte del piso veinte del edificio estaba quemándose.

Feng Xin tomo el parlante —Envíen bomberos y una ambulancia, es probable que haya heridos.

Rápidamente entro al edificio, desenfundado el arma. Por protocolo cuando había un incendio no podía usar el ascensor así que tuvo que subir veinte pisos por escaleras, tan rápido que sintió que estaba a punto de vomitar su muy reciente cena. Cuando llego al piso veinte empujo la puerta y entro en el pasillo lleno de fuego y humo.

Paciente MariposaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora