Capítulo 50

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Te he comentado qué me desconcertó encontrarlo aquí- continuó Jungkook- sabía que Ho-Seok abandonó la Casa del Lago porque no soportaba convivir con los recuerdos de Marta.  Era demasiado doloroso para él, sin embargo, aquí estaba el jardín de Marta convertido en el jardín de Ho-Seok. Tarde un tiempo en desentrañarlo pero solo existe una explicación posible- Jungkook torció los labios con amargura y luego miró a Jimin- ahora ya sé qué quiso comunicarme simbólicamente Marta...y aquí entras tú y no solo tú sino también la posibilidad de lo que podríamos compartir.  Martha trato de decirme que abriera bien los ojos para no dejar escapar la oportunidad- Jungkook miró alrededor y volvió a poner la mirada en Jimin- Ho-Seok  recreó el jardín de Marta porque se dio cuenta, como me ocurre a mí ahora, de que no es posible darle la espalda al amor.  Uno no ama por proponérselo, no es así cómo funciona, pero una vez que se ama se hace para siempre. Por más que se aleje, poniendo leguas de por medio, no puede dejarse atrás porque permanece con uno en el corazón y en la mente. Pasa a integrar el alma.  Ho-Seok recreó el jardín por la misma razón que Marta lo creo antes, como expresión de su amor por ella y en reconocimiento del amor que ella le había dado. Marta todavía estaba con Ho-Seok cuando él murió, lo sé con la misma certeza de que ahora estoy aquí contigo. Los dos siguen en este jardín, su amor, el amor compartido creo este lugar y mientras subsista su amor su amor perdurará por siempre.

Jungkook volvió a sonreír y esta vez con un gesto de modestia.

- Los Alfas de mi familia, por ejemplo, por más que intentemos evitar el amor, cuándo nos alcanza ninguno de nosotros lo ha reuhido. Para nosotros es duro y más aterrador que cualquier batalla, pero sí algo he aprendido de mi familia es que rendirse no está en nuestro vocabulario. El amor es el único camino para ser feliz. Aparte de ser testigo de los efectos del amor en mi familia, también aprendí mucho de Ho-Seok y Marta, el amor existe sin más, no pide permiso, lo único que pide, lo único que exige, es aceptación. Pero esto conlleva un compromiso absoluto. Uno puede admitirlo en el fondo de su corazón o rechazarlo, pero no hay otra opción-  durante un largo momento miró y observó los grandes y relucientes ojos de Jimin- tú me  preguntaste que era el amor, cómo era, pues bien te ha estado rodeando durante semanas, ¿lo has sentido?

- Sí, es una realidad que produce temor, terror a veces, pero es tan maravilloso y resplandeciente- Jimin inspiró hondo.

Jungkook inclinó la cabeza para besarlo.

- ¿Has tomado ya una decisión?¿ vas a aceptar el amor o no?- le susurro Jungkook  con los labios pegados a los suyos.

- Ya sabes que sí - Jungkook le dio un beso suave .

- Cuando llegue el momento te lo preguntaré, y entonces me lo dirás- le dijo Jungkook.

- ¿Porqué no ahora?- preguntó Jimin.

- No es el momento adecuado.

- ¿Cuándo será?- alcanzó a articular Jimin mientras que Jungkook le daba otro beso.

- Pronto- con el próximo beso, el Alfa le dejó claro que eso era todo lo que lograría esa noche.

De todos modos, pensó Jimin, él le había explicado lo suficiente y con eso se daba por satisfecho.  Se contentaba con dejar que él lo despertara poco a poco hasta dejarlo flotando.

Tomados de la cintura, Jimin con la cabeza apoyada en su hombro,  regresaron con pasó sosegado por el jardín impregnado de perfumes, de nuevos brotes y de una eterna promesa de amor, hacia la casa, la cama, el amor que ya compartían.

***

El paso de los días no hacía más que aumentar la tensión. Jonás se la pasaba casi todo el tiempo en la mansión y su padre acudía a verlo dos veces al día como mínimo,  incluso su institutriz parecía nerviosa.  Lo único que rompió la monotonía, el tedio, la inquietud, eran las respuestas que llegaban de los otros coleccionistas.

 Educando un Omega Donde viven las historias. Descúbrelo ahora