Realmente no tenía la certeza de qué número de competencia era esta. Había quedado tantas veces en segundo lugar que comenzaba a perder la cuenta de cuántos habían sido mis intentos por obtener aquel glorioso primer lugar.
Mi mirada yacía perdida observando a la multitud vitorear frente a mí, mientras entregaban el trofeo al primer lugar.
Suspiré con pesadez mientras la ganadora se colocaba a mi lado: Lalisa Manoban.
Una chica tailandesa recién integrada a la escuela de danza. No llevaba ni un año aquí y comenzó a llamar la atención de todos por su «Talento Nato en el baile». Si tan sólo supieran que es una maldita fastidiosa que no piensa en otra cosa que no fuese bailar, las cosas tomarían otro rumbo.
Intenté hacer el esfuerzo por esbozar una sonrisa cuando Lalisa me la brindó, sin embargo, no pude.
No podía responder con los mismo sentimientos ni con la misma amabilidad, pues ella era la que se estaba robando la atención de todos; «El segundo lugar es el primer lugar de los perdedores» pensé.
El brazo de Lalisa aferrado al mío provocó que me sacara de mis pensamientos. Estaba a punto de espetar cuando el aliento de ella rozó en mi oído provocando que me estremeciera.
—Nos tomarán una foto— Susurró.
Su voz había sonado más ronca y profunda de lo normal. Mis piernas flaquearon un momento y asentí torpemente sonriendo para la fotografía.
La fotografía estaba hecha, sin embargo, Lalisa no soltaba mi mi brazo.
—Lalisa— Dije seria.
—Dime— Respondió fingiendo inocencia.
—Suelta mi brazo.
—No lo haré. Seguimos frente al público y formamos parte de la misma academia. Se supone que deberíamos ser amigas—Respondió con tranquilidad mientras me sonreía.
Me encogí arrebatando mi brazo del de ella.
La premiación había terminado ya. No tenía motivos siquiera para permanecer aquí, por lo qué comencé a caminar en dirección a los pasillos de la academia.
Las competencias solían llevarse a cabo en el gimnasio de la academia. De cierta forma, se podría decir que estaba estudiando la universidad, pues realizábamos prácticamente las mismas cosas que en otras carreras, salvo, que ésta era mucho más fácil si sabías bailar.
Tragué intentando deshacer el nudo en mi garganta.
Me frustraba no poder ganarle ni una vez a Lalisa desde que llegó aquí. Antes de que ella llegara, yo era la prodigio con talento nato y ahora se lo atribuyeron a ella sólo por ser unos años menor que yo.
No me percaté del momento en el que las lágrimas comenzaron a brotar de mis ojos. Me sentía tan impotente sobre ésta recurrente situación que comenzaba a joderme mi estancia aquí. No había ni una sola persona que no buscara a Lalisa Manoban cuando ingresaban a la academia.
Entré en una sala de práctica vacía.
No había estado nunca en estos lugares de la academia, pero agradecía estar aquí. Era silencioso y muy grande.
Me recargué en la pared deslizándome hasta llegar al suelo dejando la placa de segundo lugar a mi lado.
—Nadie se fija en el segundo lugar...— Pensé en voz alta.
—Yo sí— Me sobresalté al escuchar la voz.
Me hice pequeña subiendo mis rodillas hasta mi pecho mientras limpiaba con velocidad mis ojos y mis mejillas. No podía permitir que me viera en este estado.
—Eres una bailarina increíble, Jennie— Se recargó en el marco de la puerta.
Me encogí mirándola por el espejo que yacía frente a nosotras. Recorrí su cuerpo de arriba abajo con la mirada.
—Pero no más que tú. De ser así, me notarían— Confesé.
—Yo te noto— Dijo suavemente entrando mientras cerraba con seguro la puerta—. Eres magnífica, Nini. Lamento que los demás no logren verlo.
—Y si sigues aquí, menos lo harán— Respondí a la defensiva.
Se hincó frente a mí y tomó mis mejillas. Me sonrió. Ella y su maldita sonrisa que derrite corazones.
—Yo no quiero irme. Quiero seguirte viendo y si practico demasiado es para no perder la beca. Fue una condición que me pusieron si me aceptaban— Acarició mi mejilla.
—Yo... no lo sabía...— Dije apenada desviando la mirada.
—Claro que no lo sabías. Se supone que es un secreto. No es como vaya por la vida diciendo que soy becada, sabes cómo comenzarían a tratarme— Asentí.
—Lo siento...— Susurré.
—Olvidémoslo, no te preocupes. ¿Estamos bien?— Asentí—. Ahora, si me permites— Se levantó extendiendo su mano hacia mí—. He estado practicando un nuevo baile, ¿te lo muestro?
Asentí tomando su mano para levantarme. Solté su mano cuando estuve de pie, sin embargo Lalisa volvió a tomarla.
—Necesito a otra persona, espero no te moleste ser mi pareja— Negué.
—Está bien, Lalisa.
—Lisa, dime Lisa— Asentí.
Se soltó de mí un momento y buscó en su mochila un reproductor que luego conectó a la bocina de la sala de práctica.
La música era de un tono demasiado sensual para mi gusto, sin embargo, no me perdería el momento para ver a Lisa realizar aquellos pasos, pues nunca la hacía visto bailar de manera erotica, por decirlo de alguna manera.
Lisa volvió a acercarse a mí, sin embargo, había algo diferente en su mirada y mostraba una sonrisa llena de picardía. Mentiría si dijera que no me parece nada atractiva, pero la verdad resultaba todo lo contrario.
Bajó el cierre de su sudadera quedando sólo en top mostrando sus ligeramente abdominales marcados. No pude evitar recorrerla con la vista mientras mordía suavemente mi labio.
—¿Algo que te guste?— Respondió coqueta amarrando su cabello.
—No, no, o sea, sí, pero, agh— Frustración al tope—. Olvídalo.
Se acercó más a mí comenzando a invadir mi espacio personal. Mis vellos se erizaron al sentirla tan cerca. Las manos me sudaban un poco y el nerviosismo de tenerla a milímetros de mí me provocaba querer huir de allí, pero mis piernas no respondían.
Tomó mi cintura pegándome más a su cuerpo. Tragué suavemente desviando la mirada. Se acercó a mi oído.
—Déjate llevar, Nini...
Su voz sonó tan profunda que podría desfallecer en cualquier momento. Su voz ronca sobre mi oído me provocaba unas ganas de callarla con mis labios sobre los de ella.
Lisa sabía que ya mantenía el control sobre mí y mi cuerpo y eso le encantaba. Amaba llevar el ritmo de la situación y provocarme hasta caer rendida ante ella, sino es que ya lo estaba.
Comenzó a mover sus caderas sobre mí. Solté un pequeño jadeo por la impresión y pude observar su sonrisa de satisfacción.
La odiaba, pero, ¿por qué me encantaba tanto?
Coloqué mis manos sobre sus hombros siguiendo el ritmo de la música y de sus caderas.
El ambiente estaba comenzando a subir de temperatura y ambas lo sabíamos, pero ninguna hacía nada por detenerse y la verdad es que yo no quería detenerme.
Giró mi cuerpo pegando mi trasero contra ella mientras sus manos se colaban por mi estómago. Gemí suavemente al sentir sus largos dedos recorrer la superficie de mi abdomen mientras movían sus caderas contra mi trasero.
Eché mi cuerpo hacia atrás hasta donde el cuerpo de Lisa me lo permitía mientras subía mi mano hasta su cuello para aferrarme de él.
Lisa no tardó en dejar un beso sobre mi mejilla. La miré de vuelta y como pude, me puse de puntillas para atrapar sus labios con los míos.
Un jadeo de sorpresa se ahogó en nuestros labios, demorando unos segundos para que siguiera el beso. Detuvo sus movimientos mientras subía una de sus manos hasta uno de mis pechos.
Gemí como respuesta ante lo que Lisa había hecho separándome un poco de sus labios. Respiré con un poco de dificultad mientras sentía sus dedos acariciando el borde del pezón sobre el top.
Encajé mis uñas en su nuca por la posición en la que nos encontrábamos y volví a soltar un gemido en el que sólo ella y yo lo escuchamos.
—Lisa...— Jadeé
—Dime, Nini— Susurró con la voz ronca.
Me di la vuelta y rodeé su cuello con mis brazos para volver a unir nuestros labios.
Aferró mi cintura con sus dedos encajándoles suavemente mientras comenzábamos a caminar en busca de una superficie.
Mi espalda chocó contra la pared.
Lisa comenzó a bajar sus besos hasta mi mandíbula. Suspiré entrecortado al sentir su saliva sobre mi piel mientras encontraba camino hasta mi cuello. Eché mi cabeza hacia un lado para brindarle un mayor acceso mientras enredaba mis dedos en los pequeños vellos que salían de su nuca.
—Lili...— Jadeé cuando sentí su lengua recorrer una parte de mi cuello.
Me tomó por los muslos cargándome mientras encaja sus dedos en ellos. El roce de su piel con mis muslos desnudos por el short hizo que mi cuerpo se estremeciera. Enredé mis piernas en su cintura mientras ella seguía logrando sacar jadeos de su nombre desde mis labios.
Se separó un momento y volvió a mirarme. El deseo en sus ojos estaba penetrandome y la lujuria invadía mi cuerpo. Mi centro comenzaba a palpitar al verla de esa manera. Tan agitada, con los labios hinchados. Se veía tan jodidamente sexy.
La acerqué bruscamente por su cuello de nuevo hacia mí y atrapé su boca con la mía en un beso desesperado. Movía mis labios con los de ella hasta que Lisa pidió acceso de su lengua a mi boca. Sin pensarlo, se lo conseguí provocando que un gemido se ahogara en mi garganta cuando su lengua rozó la mía.
Mordí su lengua suavemente sintiendo cómo Lisa se aferraba a mis muslos, sonreí en medio del beso y me separé por la falta de aire.
—Te necesito...— Supliqué en un susurro.
—¿Qué necesitas?— Susurró en mis labios.
—A ti, Lisa. Hazme tuya...
Dicho esto, me bajó al suelo y se quitó su sudadera haciéndola una especie de almohada. La puso en el piso y volvió a tomar mi cintura mientras me cargaba suavemente para recostar mi cabeza sobre la prenda. Se colocó entre mis piernas y me miró bajo las pestañas antes de comenzar a besar mi abdomen mientras desabrochaba mi short.
Me aferré a lo que pude del cabello de Lisa al sentir sus labios en mi ya sensible abdomen. Éste se contraía cada vez que sentía la boca de Lisa explorar cada centímetro de esa zona.
Comenzó a bajar mis short junto con mi ropa interior mientras me veía a los ojos por debajo de las pestañas. Terminó por sacar las prendas y apreté las piernas intentando cubrirme con las manos.
—Déjame verte— Ordenó mientras se ponía de pie quitándose sus pants.
Mi mente se quedó hipnotizada ante aquella situación. Obedecí ante su demanda quitando mis manos. Sonrió relamiéndose los labios mientras me dejaba ver sus bóxers negros.
Mordí mi labio escaneándola.
Sus brazos ligeramente marcados me hicieron soltar un suspiro. «¿cómo es que no lo había notado antes?»
Seguí mi mirada por sus brazos notando cómo se marcaban las venas de éstos y sus manos. Apreté las piernas al caer mi vista en sus largos dedos. «¿cómo se sentirá tenerlos dentro?» Pensé mordiendo mi labio.
—¿Terminaste?— Asentí lentamente mientras volvía a mí. Se acomodó entre mis piernas cuando las separé. Las tomó elevándolas hasta ponerlas sobre sus hombros.
Gemía aferrándome a su espalda cuando sentí su sexo húmedo con el mío.
No supe en qué momento se había desecho de su ropa interior por estar pensando en sus dedos.
Lisa comenzó a mover sus caderas suavemente sobre mi sexo caliente. Podía sentir como nuestros fluidos se combinaban entre la fricción provocando un sonido entre ambas. Encajé mis uñas en sus hombros mientras seguía con el vaivén entre nuestros cuerpos.
De vez en cuando sus labios mayores se abrían paso entre mis pliegues debido a la fricción y eso me enloquecía.
—Lili...— Gemí.
Comenzó a aumentar el ritmo en sus movimientos. Estaba comenzando a enloquecer, pues era maldita experta con eso. Mordí mi labio. Necesitaba que continuara así, de esa manera.
—Sí, sigue moviendo las caderas así...— Gemí—. No te detengas, Lili— Jadeé.
Recargó sus brazos a los costados de mi cabeza y se apoderó de mis labios una vez más mientras el movimiento en sus caderas seguía en aumento.
No sabía cuánto más podía resistir. El nudo en mi vientre estaba comenzando a hacerse presente y mi estómago se contraía cada vez más mientras mi respiración yacía agitada.
Lisa aumentó más el ritmo comenzando a golpear ligeramente nuestros cuerpos. Gemí su nombre un par de veces más hasta que el clímax invadió mi cuerpo dejándome con las piernas temblando.
Ella luego de un par de segundos más acabó dejándome sentir sus fluidos cayendo sobre mi sexo. Volví a gemir al sentir el líquido caliente y sonreí satisfecha atrayendo el cuerpo de Lili hacia mí para abrazarlo.
—No dejes de practicar el baile— Susurré.
—Nunca, Nini
ESTÁS LEYENDO
One Shots Multiship Pinks
FanficPronto haré una portada, por favor, por ahora, por favor, continúen con la lectura. One Shots de todo tipo de Blackpink. ⚠️ Shipps: Jenlisa, Chaelisa, Lisoo, Chaesoo, Jensoo, Channie ⚠️TW⚠️ Este contenido puede ser sensible para algunas personas...