Prólogo

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Seguir la corriente es algo que la gente hace a menudo. Checo lo hace desde que lo recuerda. 

"— Cuando seas grande, te cases y tengas hijos con una mujer maravillosa, entonces lograrás ser un hombre." Eso era lo que toda la gente le decía cuando era niño. 

Lograrás ser un hombre. 

Lograrás ser un hombre. 

Lograrás ser un hombre. 

¿Entonces no sería un hombre si no logra eso? ¿Su familia estaría decepcionada de él si jamás lo logra? 

Así aprendió Checo a seguir la corriente. 

Y luego llegó el joven Checo que vivía en Europa para algún día cumplir su sueño de ser un piloto de Formula 1. 

"— Hijo, jamás te conformes con una, mujeres hay muchas." Era lo que le decían seguido de una risa. 

Checo estaba confundido. 

Primero dicen que se case y tenga hijos con una mujer, y luego le dicen que no se conforme con una. Asqueroso. ¿Cuál era el punto? 

Y cuando Checo cumplió 19 y maduró, sabía que ya se había convertido en un hombre porque había perdido su virginidad con una mujer. 

Eso lo hacía hombre, ¿cierto? 

Aunque realmente, él ya se sentía como un hombre desde antes. 

Así creció Checo, con la mentalidad de ser un hombre. Ser ese tipo de hombre. 

Tiempo después, Checo decidió investigar a escondidas acerca de sus sentimientos. Y llegó a una alternativa. 

¿Le podía gustar los hombres? 

Se negaba a la idea, se negaba a ser algo que no aprobaría su familia ni el mundo del automovilismo. 

Checo jamás se volvió a replantear esa idea. 


2018. 

Checo estaba oficialmente casado con Carola Martínez, una mujer maravillosa que estaba llena de amor. 

¿Checo la amaba? Sí, definitivamente. 

¿De esa manera? Checo prefería no cuestionárselo. 

Carola estaba embarazada y eso lo tenía muy contento, ya sería oficialmente un hombre ante la sociedad. 


2019. 

Carola lo tenía, sentía algo en Checo que solo una vez había sentido y eso la tenía preocupada. 

Cuando tenía 16 años, Carola sentía algo con su mejor amigo, como un sexto sentido. Era una sensación muy única, una vibra que provenía de su mejor amigo. 

Un mes después, su amigo le confesó que era gay. 

Y ahora, Carola tenía su sexto sentido activo con Checo. 

Dos semanas después, Carola cenaba junto a Checo y las cosas salieron a la luz. 

Checo le confesó con pena que se sentía atraído a los hombres. 

Carola lo tomó bien, Checo, al final del día, era el padre de sus hijos, y mucho antes de tener un esposo, tienes un mejor amigo. 

Carola siguió con Checo, ambos eran felices como estaban pero Carola le dijo a Checo que en el momento en el que él decidiera decir la verdad, ella estaría bien. 


2020. 

El inicio de la pandemia y el inicio de la verdad. 

Teammate ; chestappenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora