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El sol cayó por el este y la oscuridad llegó. La luna se mantuvo sobre el cielo. Lady Bug tímidamente caminó donde estaba el rubio mirando el firmamento y con un suave toque de la punta de sus dedos tocó su hombro.

-Hola.

Saludó en un susurro mirando como él se erizaba y miraba con un sonrojo. Ella miró que aquello se estaba volviendo raro y se armó de valor.

-Bien, no repetiré esto así que escucha con atención. Sabemos que estamos creciendo, sabemos lo que sucedió ayer, sabemos que eso es parte de crecer en el aspecto físico y sabemos que eso no puede suceder. Perdón por... hacernos sentir eso, si yo no hubiera jugado así no estaríamos teniendo esta plática.

Le dijo sonrojada hasta las orejas y él se puso de la misma manera.

-Perdón por reaccionar así, aprenderé a controlar mi cuerpo, eso no volverá a suceder.

Ella asintió y le extendió el puño pero denuevo ese mismo cosquilleo en sus estómagos apareció y los hizo mirarse con el mismo fuego del día anterior.

-Agh, no ¡Amuleto encantado!

Él solo vio como ella invocaba su poder, viendo como algo pequeño caía en sus manos.

Ella lo atrapó y al verlo enrojeció tanto que sin pensarlo lo ocultó entre sus manos, mirando al rubio por si había visto lo que era.

-¿Qué es?

Ella se lo llevó a la espalda y negó.

-Nada, no es nada, es un... un... boleto para el cine.

Él chico intentó verlo pero ella negó, girandose y lo metió en su yoyo. Él en cambio también invocó un Lucky charm, mirando como ella daba un grito para evitarlo.

Pero sucedió, entonces ella al ver que el objeto comenzaba a bajar, ella salió corriendo con la vergüenza más grande que jamás había sentido en su vida.

Él no entendió hasta que miró al objeto aterrizar en sus manos, entonces se erizo como si fuese un gato.

-¡Es un...

El chico miró a todos lados por si alguien había visto, y lo guardó en su bolsillo.
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Adrien dejó salir a Plagg que extrañamente, en lugar de ir directo a comer 15 quesos, se quedó flotando frente a él como si quisiera decir algo.

-¿Otra reunión de kwamis o por qué pareciera que quieres pedir un permiso? Sabes que puedes ir.

El kwami negó.

-No es eso, solo quería que... platicaramos.

Adrien lo miró anonadado.

-¿Qué? ¿Tu platicar? Nah, ¿Te hizo mal el queso? ¿Estás enfermo?

-No Adrien, esque necesitamos hablar de... crecer y de... cuando dos personas se quieren y quieren tener... emm... ¡por todos los cataclismos, realmente no puedo con esto! Lo diré de una vez: quieres tener sexo.

Adrien se asustó.

-¡Oh, si estás enfermo Plagg! Tu jamás hablas de eso. Es más grave de lo que parece ¡Perdiste la cordura!

Dijo agarrandolo y envolviendolo en un pañuelo como si fuera un bebé y el kwami negó.

-¡No, Adrien, sueltame, tenemos que hablar de la luna y del sexo!

Dijo forcejeando pero el chico no le prestó atención.

-Pobrecillo, estás empeorando.

-¡Sueltame que tienes que escuchar esto! Cuando la luna se alinee con el sol, vas a querer coge...

Y Adrien le tapó la boca con preocupación, pensando en cómo salir a buscar al guardián celestial. Plagg simplemente lo traspasó.

-Bien, si no quieres escuchar no es mi problema ¡Reproducete como conejo!

Dijo y se dejó caer sobre la almohada, exhausto.
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Lady Bug dejó salir a su querida kwami y ella se sentó en su regazo.

-¿Tienes sueño?

Le preguntó y está le negó.

-No ¿Por qué preguntas?

La roja flotó a la altura de su cara y le tomó sus mejillas contenta.

-Perfecto, porque tenemos que hablar sobre la luna de día.

Marinette sonrió al igual que su kwami. Siempre le enternecía escucharla hablar sobre temas de las estrellas y la luna.

-Cuando la luna se vea de día vas a querer hacer lo que se hace para tener hijos.

Un silencio para intentar sacar contexto de lo antes dicho por Tikki y la ojiazul negó volviendo a sonreír.

-No Tikki, los humanos hacemos ese tipo de cosas cuando... los sentimientos y el cuerpo lo piden, la luna no tiene nada que ver con eso, tal vez con el movimiento de las olas o incluso el ciclo del sueño, pero no con las relaciones sexuales.

Le dijo antes de bajar por un vaso con agua, dejando a la kwami sola.

-Pero si no era pregunta.

Dijo para si misma la pequeña criatura.
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Cinco de la mañana y Adrien había sido despertado para ser mandado a un viaje sorpresa. Seis de la mañana, Hawk Moth había tomado a la ciudad entera como rehén al haber potenciado sus poderes. Siete de la mañana, Chat Noir ya estaba junto a Lady Bug luchando, con todo y sus ganas de comerse entre ellos. Ocho de la mañana, ya habían derrotado a Hawk Moth con la facilidad del poder potenciado producto de la boda. Para las nueve todo estaba como antes, excepto los ánimos de Adrien.

Continuara...

Y para las diez recordemos todos que esto lo escribí cuando estábamos en la cuarta temporada JAJSJSJJA.

Pero boeno, ya finalmente acabando esta historia.  Siii.

En fin, disfruten.

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